El documento trata sobre la importancia de la ética en la ingeniería. Señala que los ingenieros deben ganarse su reputación por mérito propio y no competir de forma deshonesta. También destaca que debido a su conocimiento especializado, los ingenieros tienen la responsabilidad de ser ciudadanos honestos y útiles para la sociedad. Un ingeniero irresponsable o corrupto socava la confianza pública en la profesión.