1. Mi comandante Eterno
Voy a permitir que me digas adiós, te lo acepto por que llego tu hora de
descansar, me pregunto si se hizo realidad tu sueños y ese llano venezolano que
tanto amas te trago, hoy me dijeron que tu cuerpo dejo de batallar, pero estoy más
que consiente que tu alma sigue en lucha, lo que no te permito es que nos dejaste
un vacio enorme, ya casi no tengo lagrimas porque mis ojos ya no lloran solo
sufren tu despedida, si me preguntan donde estas voy a jugar con palabras y diré
a mis hijos que te fuiste a la sabana hermosa de sus tardes eternas, la gente
llorara tu partida y con esas lagrimas vamos hacer un rio por donde recorran tus
ideas tu memoria tu recuerdo vivo, que puedo decirte Hugo te quería para mi
patria te vi eterno, te vi anciano al lado de tus hijos y de tus nietos, pero te me
escapaste chico para irte de mi lado a correr como el niño Tribilin que llego a
caracas para convertirse en el líder de la revolución, hoy estaba sentado en el
hospital militar y vi cuando me saludabas y me hacía una seña con la mano como
diciéndome que me callara, que no dijera nada que te estabas escapando para irte
a descansar, te escapabas con esa sonrisa de siempre con esa risa de niño que
sueña con la paz del mundo y la igualdad de tu pueblo, me dijiste que no lloraras,
que no te extrañara que el seguiría aquí mismo al lado de tu pueblo, en la sonrisa
de cada niño, en el sueño de aquel que recibió su casa, en la mirada de aquel
anciano que recibió una ayuda, allí camarada voy a estar yo así que no sufras, mi
despedida que aunque solo tu mires que me marcho quiero que le trasmitas a mi
pueblo que pueden buscarme en la sonrisa grande de la patria, diles que solo he
decidido descansar que ya era suficiente para mi cuerpo que es mejor dedicarme
a caminar los senderos que hemos construido, y que en mi alma eterna camine
por esta patria que tanto amo y que le he dado todo por verla crecer, de ese modo
se despidió de mi siguió con su sonrisa eterna pude ver en su rostro el mismo
amor de siempre su entereza su grandeza me pidió que les dijera que no lloraran
por el que los amigos no se lloran y mucho menos se extrañan, para que me
encuentren tienen que buscar dentro de cada uno de nosotros, y mirar lo que el
nos enseño que nadie se quede en su casa que salgan a las calles a celebrar su
despedida, porque el quería descansar el quiso hacer patria y lo logro, nos enseño
y construyo el camino y aquí sigue con nosotros, nos hiciste trampa Hugo quisiste
irte a u llano y este te trago, los que mueren por la vida no pueden llamarse
muertos hasta la Victoria Siempre Viviremos y vencemos.