1. LOS TIEMPOS DE LA LIBERTAD
1961-1978
“Ahora ya los hechos estaban consumados. Abril fue solo un grito de heroísmo, una
noción de patria, un estandarte de sueños sobre la multitud, y quizás tan solo, una
canción de protesta contra los silencios de una nación dormida”.
José Rafael Lantigua.
La ciudad de Santo Domingo tomo un giro inesperado, de ser un país bajo una
total dictadura (30 años), paso a ser un estado con derecho, capaz de crear o
restablecer una nueva ciudad libre y con abiertos pensamiento.
A partir de aquí se desarrolla una etapa de superación, buscando desarrollar la
ciudad, donde se integran arquitectos tales como: Eugenio Pérez Montas,
Roberto Bergés, Fred Goico, entre otros, los cuales se formaron en Italia en
disciplinas del diseño, urbanismo y restauración de monumentos. Aplicando una
manera mas rigurosa, mas exigente y sofisticada, de practicar la arquitectura
dominicana.
Por lo siguiente, el Estado Dominicano fue sometido a la estructura operativa de
reingeniería institucional integral por el Consejo del Estado. Lo cual llevo a la
creación de la Liga Municipal Dominicana, Los Ayuntamientos, el instituto
Nacional de la Vivienda (INVI), el instituto Nacional de Recursos Hidráulicos
(INDRHI), al igual que se inician planes reguladores para ciudades, como Higüey,
dirigido por Eugenio Pérez Montas. Se estableció la oficina de Planeamiento
Urbano del Distrito Nacional, con Manuel Salvador Gautier como director, Rafael
Calventi subdirector y Víctor Bisonó al frente de los estudios básicos.
Se consolido el método de concursos para la obra publica y privada, donde se
sometieron a concurso obras tales como:
El Aeropuerto de las Américas en Punta Caucedo, ganado por Fred Goico
en 1970.
Los laboratorios, dormitorios y otros edificios de la UASD, ganados por
Rafael Calventi y Fred Goico en 1962.
El edificio para el Ayuntamiento de Baní, ganado por Fred Goico en 1962
y posteriormente ejecutado por Luis Despradel.
El Concurso de Vivienda Social organizado por el CODIA,6 ganado por
Rafael García.
El Mercado de la Avenida Duarte, ganado por Rafael Calventi en 1969.
La Sede del Banco Popular Dominicano, ganada por Rafael Calventi a fines
de los 70, y posteriormente ejecutado con otra concepción por Pedro José
Borrell.
El Estadio Olímpico, ganado por Fred Goico, José Antonio Caro y Danilo
Caro, en 1972.
El desarrollo turístico de la Playa de Najayo.
Pero donde mas destaca la arquitectura en el país es en el ámbito urbano,
específicamente en Santo Domingo y Santiago.
2. Luego de esto, se inicia las construcciones en Naco, donde se definen proyectos
inmobiliarios. Naco se convierte en un nuevo centro de negocios de la ciudad
capital, a partir de 1972 se comienzan proyectos de mayor riesgo, como el
conjunto de 8 torres multifamiliares dispuestas paralelamente en sentido este-
oeste, construidas secuencialmente a partir de 1975. Concebido como una
unidad urbanística integral, el sector de NACO contempló una serie de servicios
tales como: escuela –La San Judas Tadeo–, hospital –el Militar de las Fuerzas
Armadas–, hotel –el Hotel NACO 1 y el 2–, estación de policía, el Club NACO, etc.[1]
Rafael Tomás Hernández, quien llevo el mando en los ensayos de definir una
arquitectura de mínimo costo y máxima expresión plástica. Barrios como
Honduras, Matahambre, fueron barrios de interesante trazado y articulación de
tramas existentes.
Los doce años de Balaguer, demarcan en el territorio dominicano un importante
desarrollo en la arquitectura y el urbanismo nacional. Implementando en
multiples obras la “varilla y cemento”. Definiéndose paisajes urbanos tales como,
la Plaza de la Cultura, el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, el Parque Zoológico
Nacional de Eugenio Pérez Montás y Manuel Valverde; el Parque Botánico y la
Plaza de La Trinitaria de Benjamín Paiewonsky; el Parque Mirador del Sur de
Pérez Montás y Valverde, Christian Martínez et al.
“Mientras se armaba, por un lado, el sistema institucional para la salvaguarda de
la arquitectura histórica, por otra parte, se desarrollaba nueva arquitectura de
calidad y se dominaba los territorios urbanos con una pasión nunca vista en la
historia”.
Este momento corresponde la plástica transición entre el moderno internacional
de los años 50, el brutalismo y el clasicismo expresivo. En ejemplo tenemos el
Museo del Hombre Dominicano que pertenece al brutalismo, y el Teatro Nacional
al clasicismo. Donde se precian las nuevas arquitecturas o edificaciones en
hormigón visto, esta es la etapa donde inicia el brutalismo en el caribe.