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Señora de la ааа de
Valladolid
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41°39′08″N
4°43′25″O
3. Catedral
de
Nuestra
Señora
de la
Asunción
de
Valladoli
d
Cul Igle
4. sia
cat
to
ólic
a
Di
Vall
óc
ado
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s
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de
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7. Bar
roc
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o,
om
Chu
ina
rrig
nt
uer
es
esc
o
Catedral
es de
8. España
La Catedral de
Valladolid, concebida
en el siglo XVI y
diseñada por el
arquitecto Juan de
Herrera, es un edificio
de estilo herreriano
con añadidos
barrocos.
9. Conocida también
con el nombre de su
advocación, Catedral
de Nuestra Señora de
la Asunción, y sede
episcopal de la
archidiócesis de
Valladolid, se trata de
una obra inconclusa,
debido
principalmente a la
10. falta de recursos y a
los gastos provocados
por la cimentación
del templo, situado
en una zona con un
gran desnivel en el
terreno.
Obtuvo la categoría
de catedral el año
1595, tras haber sido
11. un templo colegial
dependiente de la
diócesis de Palencia.
Está situada en el
centro de la ciudad,
en una zona
ligeramente elevada,
cerca de la Iglesia de
Santa María de La
Antigua y construida
12. junto a la Colegiata
de Santa María,
anterior iglesia
colegial de Valladolid,
algunos de cuyos
espacios fueron
destruidos para
continuar con las
nuevas obras.
Tabla de
13. contenidos
[ocultar]
• 1 Antecedentes y
contexto
histórico del
origen
• 2 Las tres
primeras
colegiatas
o 2.1 Primera: la
14. colegiata del
conde Ansúrez
o 2.2 Segunda
colegiata del
siglo XIII
o 2.3 Tercera
colegiata
renacentista
• 3 Cuarta
colegiata-
catedral: Juan de
15. Herrera
• 4 De la
dependencia de
Roma hasta la
sede episcopal
vallisoletana
• 5 El proyecto de
Juan de Herrera
o 5.1 Evolución
de las obras:
siglo XVI
16. o5.2 El siglo XVII
o5.3 El siglo XVIII
o5.4 Conclusión
• 6 Arquitectura
del edificio
actual
o6.1 Fachada sur
o6.2 Fachada
oeste
o6.3 Fachada
este
17. o 6.4 Fachada
Norte
o 6.5 Torres
• 7 Interior
o 7.1 Capilla
mayor
7.1.1 Los
retablos
7.1.2 Historia
de la
creación del
18. retablo de
Juan de Juni
7.1.3
Descripción
del retablo
7.1.4 Coro
7.1.5 Reja del
coro
7.1.6 Los
órganos
musicales de
19. la catedral
o 7.2 Capillas de
la nave del
evangelio
7.2.1 Capilla
de San Juan
Evangelista
7.2.2 Capilla
de Nuestra
Señora de los
Dolores
20. 7.2.3 Capilla
de Nuestra
Señora del
Sagrario
7.2.4 Capilla
de San
Fernando
7.2.5 Capilla
del ábside
7.2.5.1
Sepulcro
21. del conde
Ansúrez
o 7.3 Capillas de
la nave de la
epístola
7.3.1 Capilla
de San
Miguel
7.3.2 Capilla
de San Pedro
Regalado
22. 7.3.3 Capilla
de San José
7.3.4 Capilla
de San Pedro
Apóstol
7.3.5 Capilla
del ábside
o 7.4 Sacristía
o 7.5 Sala
capitular
• 8 Monopolio de
23. la catedral sobre
la cartilla de
doctrina cristiana
• 9 Influencia
• 10 Véase
también
• 11 Referencias
o 11.1
Bibliografía
consultada
24. • 12 Enlaces
externos
Antecedentes y
contexto histórico
del origen [editar]
Retrato del Conde
Ansúrez.
En el último cuarto
del siglo XI el rey
25. Alfonso VI
encomendó al conde
Pedro Ansúrez la
repoblación y
administración de
esta zona que hoy
comprende la
provincia de
Valladolid. Los
núcleos de población
más importantes, a
26. orillas del río
Pisuerga, eran
Cabezón y Simancas,
en cuyas tierras
jurisdiccionales iban
surgiendo las villas
agrícolas. Una de
1
estas villas,
Valladolid, fue elegida
por el conde Ansúrez
como asentamiento
27. suyo y de su familia y
como centro desde el
cual organizaría y
gobernaría toda la
repoblación del
entorno. Por
entonces Valladolid
era una aldea
rodeada por una
cerca de defensa, que
contaba con un
28. alcázar o castillejo y
dos ermitas
dedicadas a dos
santos hispanos
tradicionales: San
Julián y San Pelayo. El
conde Ansúrez eligió
la zona donde se
encontraba la iglesia
o ermita de San
Pelayo (extramuros)
29. para edificar su
propio palacio. De
esta forma inició una
expansión de la villa
hacia el sureste.
Además del palacio
construyó una iglesia
o capilla privada, que
sería el origen de la
actual iglesia de Santa
María de la Antigua, y
30. una Colegiata o
iglesia Mayor que
vino a sustituir a la
dicha ermita de San
Pelayo y que realzó la
importancia religiosa
de la villa. Esta iglesia
Mayor, edificada en
arte románico, se
llamó Santa María la
Mayor y fue el origen
31. de la catedral
vallisoletana.
Las tres primeras
colegiatas [editar]
El Conde Ansurez
creó la primera
colegiata con la
intención de que
fuera una iglesia o
templo Mayor, punto
32. de referencia del
desarrollo de la villa
hacia el sureste y que
destacó hasta
mediados del siglo
XII. Sobre sus ruinas,
en tiempos de
Fernando III el Santo
se construyó la
segunda, de vida más
longeva y que
33. permaneció hasta el
siglo XVII, cuando el
culto se trasladó a la
actual catedral, que
es su heredera, a la
que se le ha llamado
también cuarta
colegiata. La tercera
colegiata, que fue un
intento fracasado de
un templo más
34. ambicioso y cuyas
obras se vieron
congeladas por falta
de dinero, se
construyó
perpendicularmente
a la segunda; de esta
tercera colegiata solo
queda el vestigio de
los cimientos.
35. Primera: la colegiata
del conde Ansúrez
[editar]
Torre románica de la
iglesia de Santa María
la Antigua, de finales
del siglo XII.
En el solar que
ocupaba una antigua
ermita dedicada a San
36. Pelayo fundó el
Conde Ansúrez, la
primitiva colegiata en
el año 1095, cuya
Carta de Fundación
comienza diciendo: 2
Yo el conde Pedro
Ansúrez juntamente
con mi mujer la
condesa Eylo [...]
37. ofrecemos por el
remedio de nuestras
almas [...] a la iglesia
de Santa María de
Valladolid [...] con tal
condición que el
oficio divino se
celebre en la dicha
Iglesia, y que se tenga
la devoción debida a
38. sus sagrados altares y
reliquias.
La ciudad crecía y era
necesario dotarla de
una iglesia que
sirviera de templo
mayor. Esta colegiata
se convirtió en el
principal templo de la
ciudad. La colegiata
39. no fue una iglesia
aislada sino que nació
como un monasterio
familiar del conde
Ansúrez que al mismo
tiempo servía de
iglesia Mayor de la
villa y que contaba
con menos rentas
que un obispado,
pero que pretendía
41. los pies y con la
función de torre-
pórtico. Poco antes el
conde había edificado
en el entorno su casa-
palacio en la que iba
incluida una pequeña
iglesia o capilla
palaciega. Como
dicha iglesia ya había
tomado como titular
42. a Santa María, se le
añadió el apelativo de
la Antigua, mientras
que la nueva
colegiata fue
conocida como Santa
María la Mayor.
En los años 1124,
1143 y 1155 se
celebraron en ella
43. tres Concilios
Nacionales. Esto
viene a demostrar la
importancia que iba
adquiriendo
Valladolid en la vida
religiosa y civil.
Segunda colegiata
del siglo XIII [editar]
44. Artículo principal:
Colegiata de Santa
María
Ruinas de la segunda
Colegiata con la torre
románica al fondo;
los cipreses indican el
lugar donde estaban
los pilares de la
iglesia.
45. Entre los años 1219 y
1230, reinando
Fernando III el Santo
y siendo Canciller
Juan Domínguez, se
llevó a cabo la
construcción de la
segunda colegiata
sobre el solar de la
primera,
respetándose tan
46. solo la torre románica
que dejó de ser torre-
pórtico en 1333
cuando construyeron
delante una serie de
capillas destinadas a
enterramientos. Son
las capillas que han
resistido el paso del
tiempo y que forman
parte desde el año
47. 1965 del Museo
Diocesano y
Catedralicio.
En 1228 se celebró en
el nuevo edificio otro
Concilio Nacional.
Esta colegiata se
mantuvo al uso hasta
1668 en que
definitivamente se
48. trasladó el culto al
templo herreriano.
Tercera colegiata
renacentista [editar]
En 1527, el Cabildo
convocó un concurso
entre arquitectos, al
que acudieron los
más prestigiosos
maestros del
49. momento: Diego de
Riaño, Juan de Álava,
Francisco de Colonia,
Juan Gil de Hontañón
y Rodrigo Gil de
Hontañón. A juicio
del Cabildo, la
colegiata del siglo XIII
se había quedado
pequeña y demasiado
sencilla para la
50. categoría de
Valladolid, en un
momento en que se
habían construido las
catedrales de
Salamanca y Segovia
y en que los
conventos de la
ciudad (San Pablo,
San Benito y San
Francisco sobre todo)
51. costeaban grandes y
suntuosas obras. Ese
mismo año, en el mes
de junio, se colocó la
primera piedra. El
proyecto, en principio
ambicioso, similar al
de la Catedral de
Segovia (una iglesia
de tres amplias naves,
con capillas entre los
52. contrafuertes,
crucero y cabecera
que se supone sería
semicircular, ya que
se conservan sólo
trazas del sector de
los pies de este
edificio), apenas pasó
de la cimentación y
de la elevación de
unos metros. Las
53. obras avanzaron muy
lentamente por falta
de recursos
económicos y
también porque
surgieron graves
problemas con el
tema de la
expropiación, ya que
se necesitaban los
terrenos hacia el sur,
54. debido a que se había
cambiado por
completo el eje de la
nueva planta (la
nueva colegiata no se
empezó a construir
sobre la antigua sino
perpendicular a ella):
quedaría la cabecera
al norte, junto al
antiguo claustro de la
55. colegiata anterior y
los pies al sur. Aun
así, el atrio quedaría
algo elevado por lo
que fueron necesarias
unas escalinatas para
su acceso. (Esta
nueva disposición
será respetada por
los planos de la
catedral de Herrera y
56. así es como se ve la
catedral en el
presente).
Se echaron los
cimientos ese mismo
año de 1527,
comenzando la
construcción por los
pies, para poder
hacer uso de la
57. antigua colegiata
mientras duraban las
obras. La idea era
llegar al crucero, que
caería en la zona del
antiguo claustro, y
empezar entonces la
demolición total.
Pero al avanzar tan
lentamente, el propio
Gil de Hontañón se
58. vio obligado a hacer
reformas en la
colegiata vieja para
seguir el uso litúrgico
sin problemas. Gil de
Hontañón murió en
1577 y las obras
seguían
prácticamente como
al principio. Habían
pasado 50 años y la
59. moda y las técnicas
en el arte de construir
habían cambiado.
Cuarta colegiata-
catedral: Juan de
Herrera [editar]
Proyecto ideal de
Juan de Herrera para
la catedral
vallisoletana según
60. Fernando Chueca
Goitia.
Desde la muerte del
arquitecto Gil de
Hontañón en 1577,
las obras de la tercera
colegiata habían
quedado paralizadas.
Sólo se habían
echado los cimientos
61. y elevado algunos
metros de algunos
muros. Ante esta
situación, el Cabildo
decidió continuar la
gran obra aun cuando
su situación
económica nunca era
boyante.
Aprovechando una
estancia de Juan de
62. Herrera en Valladolid
(requerido por el
Ayuntamiento para
hacer los planos de
varias obras
municipales), el
Cabildo se entrevistó
con él y le pidió el
estudio y trazas de
una nueva colegiata
que fuera de acuerdo
63. con los tiempos y que
se edificaría sobre las
obras de la anterior
renacentista,
siguiendo el mismo
eje norte-sur,
siempre
perpendicular a la
vieja colegiata de la
que aún se
conservaban algunas
64. capillas. El arquitecto
3
aceptó el encargo y
se puso
inmediatamente a
trabajar, de manera
que el 13 de mayo de
1582, Pedro de
Tolosa, que había
trabajado en el
Monasterio de El
Escorial y en
65. Villagarcía de
Campos, obtuvo la
maestría mayor para
las obras, haciéndose
cargo de ellas bajo la
dirección del
arquitecto Diego de
Praves, hombre de
confianza de Juan de
Herrera. Murió al año
siguiente y le sucedió
66. como maestro de
obras su hijo Alonso
de Tolosa.
A instancias de Felipe
II, la colegiata en
construcción tomó el
rango de catedral. El
21 de mayo de 1595
tuvo lugar la solemne
consagración, a 4
67. dirigiendo la
ceremonia el
arzobispo de Toledo,
Bernardo, con el
obispo de Palencia,
Raymundo, asistidos
por los obispos Pedro
(de León), Gómez (de
Burgos), Osmundo
(de Astorga), Martín
(de Oviedo) y
68. Amorico (de Lugo),
acompañados de
varios condes y
caballeros. Al año
siguiente, en 1596,
Felipe II otorgó el
título de Ciudad a la
villa de Valladolid. En
1597 murió Juan de
Herrera y un año
69. después, en 1598,
murió Felipe II.
De la dependencia de
Roma hasta la sede
episcopal
vallisoletana [editar]
En un principio, el
conde Ansúrez
instituyó la colegiata
(con su pequeña
70. comunidad monacal)
dependiendo
directamente de la
Santa Sede de Roma y
autorizando al obispo
de Toledo para que
fuera el encargado de
hacer cumplir las
cláusulas de la
fundación. Sus
abades ejercieron
71. jurisdicción episcopal
sin estar sujetos a
otros prelados,
además de tener
licencia para escoger
un dominus o
protector, o tutor que
velara por los
intereses del
monasterio. Éste es el
sistema característico
72. de esta época, el
sistema de behetrías
entre parientes; en
este caso los
parientes serían el
abad y sus monjes,
constituidos en
señorío, que
tomarían un tutor o
benefactor dentro de
la familia de los
73. condes y sucesores,
con derecho a
cambiarlo si el
elegido no cumplía
con toda
responsabilidad. Así
las cosas, el conde
Ansúrez tuvo que
preparar su auto
exilio a tierras de
Urgel donde
74. gobernaba su yerno
Ermengol. 5
En 1103, cuando
estaba a punto de
partir, encomendó su
abadía de Valladolid
al obispo de Palencia
Raymundo. No fue
una encomienda
formal y oficial con
75. cesión de todos los
derechos sino un
encargo a su amigo y
hombre de confianza,
con el mandato
además de que
entregara 100
sueldos anuales a la
Santa Sede. En 1110,
el conde regresó del
destierro y con la
76. ayuda y aprobación
de la reina Urraca,
recuperó su abadía-
colegiata. Pero por
entonces ya no
estaba el obispo
Raymundo y este
hecho molestó a su
sucesor, el obispo
Pedro de Palencia,
que inició una disputa
77. y buscó el favor del
papa Pascual II. Este
papa, y más tarde
Inocencio II,
confirmaron la
vinculación de la
colegiata a la sede de
Palencia. A partir de
estos hechos se
desencadenó una
pugna abierta entre
78. las dos villas. Con
Armengol VI llamado
el de Castilla (nieto
del conde Ansúrez) se
llegó a un acuerdo
que fue en realidad
una claudicación,
entregando la
colegiata al obispo de
Palencia y
concertando que en
79. ese momento éste
nombrase abad al
arcediano Nicolás. El
acuerdo tuvo como
consecuencia muchas
protestas y disturbios
hasta que Alfonso VII
ratificó el convenio
sustentándose en que
“así lo había querido
el fundador conde
80. Ansúrez”, y tomó una
decisión irrebatible,
dejando para la
posteridad el
mandato de dos
pautas a seguir por el
régimen interno: que
la elección del abad
era un derecho del
Cabildo colegial y que
el rey se reservaba la
81. potestad de
confirmarla.
En 1162 intervino de
nuevo el Papa,
Alejandro III. Mandó
reformar la abadía
con la instauración de
una nueva
comunidad de
canónigos de San
82. Agustín, encargando
realizar dichos
cambios al obispo de
Toledo. 6
A finales del siglo XV,
los Reyes Católicos
suplicaron al papa
Alejandro VI que
uniese la abadía de
Valladolid al obispado
83. de Palencia. El papa
murió antes de haber
despachado la bula.
De nuevo, hacia 1504
hicieron una petición
a Julio II, quien
despachó la bula con
una cláusula: que el
obispo de Palencia lo
fuese también de
Valladolid, que ambas
84. iglesias fuesen
catedrales y que cada
cabildo tuviese su
hacienda aparte. Pero
el abad de la
colegiata de
Valladolid, don
Fernando Enríquez,
no quiso dejar la
abadía y el papa tuvo
85. que suspender la bula
de unión,
Hac vice duntaxat
El siguiente abad,
Alfonso Enríquez,
mantuvo la colegiata
30 años, hasta que en
1555, Pedro de la
Gasca, obispo de
Palencia, insistió en la
86. unión mencionada
ante el emperador.
Así, en mayo de 1554,
el Consejo Real dio
una provisión en que
mandaba a la ciudad
de Palencia y al
Cabildo de Valladolid
que en un
determinado tiempo
alegasen las razones
87. que pudieran tener
para no realizar tal
unión. Palencia envió
sus procuradores. Al
frente iba Francisco
de Salas, procurador
del Deán y Cabildo.
Entre otros
razonamientos alegó:
88. […] querer hacer
ahora una unión de
dos iglesias
catedrales, la una en
un pueblo tan grande
y tan rico, y que cada
día va en tanto
crecimiento como es
Valladolid, y la otra
de otra iglesia que
está en tan pequeño
89. pueblo y tan pobre
como es Palencia es
dar ocasión y hacer
que del todo se olvide
se deshaga y
disminuya la iglesia y
ciudad de Palencia,
porque es harto
verosímil que el
obispo que por
tiempo fuere de
90. Palencia y Valladolid
se querrá y preciará
más intitular del
mayor y más insigne
pueblo que es
Valladolid y no del
menor y más pobre
que es Palencia.
Porque esto no
parezca adivinar que
no hay mejor regla o
91. conjetura en lo
porvenir que la
experiencia de lo
pasado, tenemos
ejemplo harto claro
en la ciudad de Baeza
y Jaén, como después
se ganó Jaén que son
dos iglesias
catedrales debajo de
un obispo […] como
92. Jaén es mayor, se ha
quedado en olvido
Baeza y solamente se
llama obispo de Jaén,
aunque la iglesia de
Baeza sea catedral.
[…]
Clemente VIII otorgó
la bula Pro Excellenti
que convirtió a
93. Valladolid en sede
episcopal con
catedral.
El procurador dio
hasta ocho
razonamientos más.
Valladolid por su
parte, pidió ser
arzobispado y que
Palencia fuese una de
94. las iglesias
sufragáneas, o que al
menos se nombrara
un obispo de
Valladolid y Palencia,
en ese orden, y que la
renta de la abadía se
gastase en la fábrica
de la nueva iglesia.
95. El Consejo Real
resolvió el tema no
por sí mismo, sino
haciendo una
consulta directa al rey
que estaba en
Flandes. El tiempo
pasó sin resolverse
nada, hasta que en
1595 y siendo obispo
de Palencia Martín
97. natal, venciendo así la
majestad del rey.
El rey había enviado
como embajador en
Roma al duque de
Sesa, Antonio de
Córdoba y Cardona,
con el encargo de
llevar a cabo las
negociaciones con el
98. papa Clemente VIII,
que otorgó la bula
Pro Excellenti del 25
de noviembre de
1595, haciendo a
Valladolid
sufragánea del
7
Arzobispado de
Toledo. Felipe II
8
presentó como
primer obispo de la
99. nueva catedral a
Bartolomé de la
Plaza, magistral de la
colegiata de Baza que
fue ratificado y
nombrado por el
Papa, por bula del 18
de diciembre de
1596. El territorio de
la nueva diócesis
vallisoletana fue muy
100. recortado para no
inferir ni perjudicar
las diócesis cercanas.
El 16 de marzo de
1851, habiéndose
celebrado el
Concordato de 1851
con la Santa Sede
(siendo papa Pío IX),
la reina Isabel II pidió
101. el título y dignidad de
metropolitana para
esta catedral. El Papa
ejecutó la petición,
otorgando la bula el 4
de julio de 1857. Ya
no fue sufragánea de
Toledo, y sí pasaron a
serlo de ella las
jurisdicciones de
Ávila, Ciudad Rodrigo,
102. Salamanca, Segovia y
Zamora.
El proyecto de Juan
de Herrera [editar]
Planta actual de la
Catedral de
Valladolid, con cada
una de sus partes
numeradas:
103. 1.Capilla de San Juan
Evangelista
2.Capilla de Nuestra
Señora de los Dolores
3.Capilla de Nuestra
Señora del Sagrario
4.Capilla de San
Fernando
5.Capilla Mayor
6.Capilla de la
Magdalena
104. 7.Capilla de San José
8.Capilla de San
Pedro
9.Capilla de San
Miguel
10.Sacristía
11.Capilla de San
Lorenzo
12.Sala Capitular
13.Capilla de Santo
Tomás
105. 14.Ángulo del
Claustro
15.Capilla de San Blas
y de San Juan
Evangelista
16.Torre de la
Colegiata
17.Capilla de Santa
Inés
18.Sala Nueva del
Museo
106. Los rasgos del nuevo
templo son
clasicistas, basados
en las construcciones
de la Antigua Roma
que habían inspirado
a la arquitectura del
Renacimiento y a
teóricos como
Vitruvio, con su obra
De Architectura. 9
107. También se nota
influencia manierista,
sobre todo a través
de los escritos de
Sebastiano Serlio. La
línea es pura, sin
concesiones al
adorno de ninguna
clase. La única
decoración del
edificio es la
109. acercamiento de la
Eucaristía al pueblo.
Así, Herrera traslada
el coro –que
tradicionalmente se
había colocado en
frente del altar mayor
bloqueando su
visión– a la cabecera
del templo, dejando
un amplio espacio
110. entre el crucero y la
puerta sur de entrada
por los pies. El coro,
que rodearía el altar,
estaría abierto a la
nave del templo, con
lo cual ambos serían
perfectamente
visibles por los fieles.
111. Proyecto de Juan de
Herrera para la
fachada de la catedral
de Valladolid, según
Chueca Goitia.
En resumen, el
edificio de Herrera
sería una gran iglesia
de tres naves, con
capillas entre los
112. contrafuertes,
siguiendo la
disposición general y
las proporciones de la
planta de la colegiata
trazada en 1527,
cuyos cimientos
pisaba, si bien la
cabecera del edificio
de Herrera sería
recta.
113. Así, la planta, como
ha demostrado
Fernando Chueca
Goitia, se organiza en
un rectángulo de
proporción 2x1,
(420x210 pies
castellanos)
encontrándose el
crucero en el centro
del mismo. El edificio
114. poseería tres naves
de cuatro tramos
cada una desde los
pies hasta el crucero
y de otros tres tramos
desde el crucero a la
cabecera. El edificio
está proporcionado
por un método usado
por los maestros
tardogóticos
115. españoles en las
catedrales de Segovia
o Salamanca: cada
tramo de las naves
laterales es cuadrado
en planta y cada uno
de los de la nave
principal es un
rectángulo de
proporción
sexquiáltera en
116. planta cuyo lado
menor es igual al lado
del cuadrado que
forma en planta un
tramo de la nave
lateral; también las
capillas-hornacina se
modulan por medio
de rectángulos
sexquiáteros: el lado
mayor del rectángulo
117. en planta de las
mismas es igual al del
cuadrado que forma
en planta un tramo
de la nave lateral. Así,
un tramo de las naves
laterales tiene una
medida en planta de
40x40 pies
castellanos, un tramo
de la nave central en
118. planta mide 40x60
pies (40x3/2 = 60) y
las capillas hornacinas
están inscritas en
planta en un
rectángulo de 40x28
pies (40x2/3 ≈ 28).
Las secciones del
edificio se
proporcionan
119. también en base a la
proporción
sexquiáltera. La nave
central y las
colaterales se
separarían con
grandes arcos de
medio punto sobre
pilares de sección
cuadrada de 13 pies
de lado con pilastras
120. corintias adosadas,
sobre las que
cabalgaría un gran
entablamento del
mismo orden que
abrazaría toda la nave
central a la altura del
arranque de las
bóvedas, generando
una potente sombra.
La nave central se
121. cubriría con una gran
cañón corrido con
lunetos y las laterales
con bóvedas de
arista, mientras que
el crucero lo haría
con una cúpula vaída
(el cimborrio que
aparece en algunos
dibujos no se debe a
Herrera y se añadió a
122. los planes del
proyecto avanzado el
siglo XVII, buscando
una silueta más
movida y barroca al
exterior). La luz
entraría por la nave
central por medio de
grandes huecos
termales que
quedarían
123. parcialmente ocultos
por el entablamento,
con lo que se haría la
ilusión de que la
bóveda flotaría sobre
el entablamento, sin
una unión física con
resto del edificio.
Planta ideal de la
Catedral, según el
124. proyecto de Juan de
Herrera. Se observa el
proyecto de gran
iglesia de tres naves
con crucero y coro
abierto a los fieles,
con el altar visible. En
negro, se muestran
las partes del edificio
construidas, mientras
que las no realizadas
125. están rayadas. A línea
de puntos se
muestran los tres
ábsides provisionales
del siglo XVII que
cierran actualmente
los realizados.
Abiertas a las naves
laterales habría una
serie de capillas-
126. hornacinas entre los
contrafuertes. En
cuanto a éstas, si bien
están, naturalmente,
comunicadas con el
templo a través de
grandes arcos, se
conciben como
espacios más o
menos
independientes, con
127. su propio foco de luz,
un pequeño óculo; el
muro de estas
capillas, cubiertas con
bóveda de cañón con
lunetos, está animado
por decoración de
placas y hornac inas
que modelan el
potente muro de
piedra. El arco de
128. comunicación entre
las capillas-hornacina
y las naves laterales
se configura en su
alzado a estas últimas
como un arco del
triunfo con dos pares
de pilastras dóricas
que sujetan una
tribuna a la que se
abre, por medio de
129. una pequeña puerta
(que introduce la
escala humana
dentro de la escala
colosal a la que está
pensado todo el
edificio para acentuar
su grandeza), el
espacio que existe
sobre las capillas
hornacinas,
130. concebido para usos
auxiliares, como
archivo o biblioteca.
En los dibujos de
Herrera, en los
exteriores, el cuerpo
central y principal de
la fachada de los pies
(al sur), se concibe
como el apilamiento
131. de dos elementos de
la arquitectura
clásica: el arco del
triunfo y el frente de
templo. El cuerpo
central se adelantaría
notablemente al
resto de la fachada,
consiguiendo así una
especie de vestíbulo
o narthex a la entrada
132. del templo. El piso
bajo del cuerpo
central, concebido
como arco de triunfo
con dos pares de
columnas dóricas
gigantes a los lados
que apearían un
potente
entablamento dórico,
cobijaría la puerta
133. principal, adintelada y
con guardapolvo;
sobre este arco del
triunfo se encontraría
el segundo cuerpo,
concebido a manera
de un templo
tetrástilo, aunque con
el manierismo de
sustituir las columnas
por pilastras, que
134. irían a plomo sobre
las columnas del arco
del triunfo del piso
inferior. En el centro
del cuerpo alto, entre
las pilastras, si
situaría una enorme
ventana adintelada y
con guardapolvo para
iluminación del
interior. Se coronaría
135. con frontón triangular
con remates de bolas
en vez de acróteras.
Además, los paños de
muro de este cuerpo
central estarían
animados con
hornacinas. .
10
Planos originales de
Juan de Herrera para
136. la Catedral de
Valladolid,
custodiados en el
archivo de la misma.
Arriba, sección
transversal con el
claustro; en el centro,
alzado lateral este y
abajo, sección
transversal por la
nave mayor.
137. En los extremos de la
fachada se situarían
dos torres iguales de
planta cuadrada, con
tres pisos separados
por entablamentos
apeados sobre
pilastras dóricas
pareadas dispuestas
en las esquinas,
siendo los dos
138. primeros pisos
macizos, con los
lienzos del muro
animados con
hornacinas, adornos
de placas y ventanas
adinteladas, y el
último cuerpo, donde
estarían las
campanas, abierto
con un gran arco en
139. cada cara de la torre,
coronándose todo
con una balaustrada
con bolas a plomo de
las pilastras y cúpula
de media naranja con
linterna y remate.
Entre las torres y el
cuerpo central
adelantado se
situarían sendos
140. cuerpos de unión
correspondientes a
las naves laterales
interiores y en los
que se encontrarían
las puertas de acceso
a éstas, adinteladas y
con guardapolvo. La
fachada posterior no
sería muy distinta a la
principal, aunque no
141. se adelantaría el
cuerpo central ni el
primer piso de este
cuerpo tendría cuatro
grandes columnas
dóricas, sino pilastras,
y no habría puerta.
Las torres serían
también más bajas
que las de la fachada
principal, pues
142. tendrían sólo dos
pisos, si bien
semejantes en todo a
los dos primeros de
las torres principales,
rematándose con una
balaustrada con bolas
y un chapitel
piramidal de pizarra
rematado con una
gran esfera.
143. En los alzados
exteriores laterales,
se encontraría en el
centro la fachada del
crucero, idéntica en
todo al cuerpo central
de la fachada
principal, con su arco
triunfal dórico abajo y
su frente de templo
arriba. En los
144. extremos de los
laterales se hallarían
las torres y entre
éstas y el crucero, se
encontrarían los
cerramientos de las
capillas hornacinas y
las dependencias
auxiliares situadas
encima de ellas. Este
cerramiento se vería
145. al exterior como un
muro apilastrado
rítmicamente,
animado con las
ventanas adinteladas
de las dependencias
auxiliares y con los
óculos de las capillas
y rematado por una
saliente cornisa. Este
muro dialogaría con
146. las construcciones
próximas a la
Catedral por su altura
moderada. Sobre él,
aunque en un plano
posterior, retrasado,
se encontraría el
cerramiento lateral
de la nave central,
más alta, con los
contrafuertes en
147. forma de arbotante
invertido y los huecos
termales que la
iluminan, rematado
con una gran cornisa
y el tejado de pizarra.
En su proyecto,
Herrera tuvo en
cuenta la posibilidad
de un gran claustro
148. procesional cuadrado
de un solo piso de
orden dórico, que iría
unido a la nave oeste
y que contendría
dependencias como
la sala capitular o la
sacristía. La
construcción de este
claustro traería serias
dificultades de tipo
149. técnico y económico,
pues por este lado del
oeste del edificio
había un importante
desnivel que caía
hasta el cauce del río
Esgueva y por ello,
parece que su
construcción nunca
se consideró
seriamente. 11
150. El edificio, al pisar la
cimentación de la
colegiata de 1527, se
orientaría en un eje
norte-sur, con la
cabecera el norte, sin
seguir la orientación
canónica, ya en
desuso en el siglo XVI,
en el que pesaban
más los valores
151. urbanísticos a la hora
de orientar las
iglesias.
Una vez terminado el
estudio, Herrera puso
los planos en manos
de su discípulo y
hombre de confianza,
el arquitecto Diego de
Praves. En 1587
12
152. tuvieron una
entrevista de trabajo
en Madrid. Es sabido
que Juan de Herrera
jamás estuvo a pie de
obra de la catedral de
Valladolid.
Hay controversia
entre los
historiadores sobre si
153. las trazas de esta
catedral de Valladolid
son un reflejo de la
basílica de El
Escorial. 13
Evolución de las
obras: siglo XVI
[editar]
El nuevo edificio no
sólo trajo aires
154. modernos en cuanto
a arquitectura se
refiere, sino también
en la técnica y modo
de trabajar, copiando
el sistema llevado en
las obras de El
Escorial. En primer
lugar, se organizó en
el entorno un
gigantesco obrador o
155. taller que dio nombre
a la vía abierta
delante de la fachada:
calle de la Obra. Se
coordinó un equipo
de picapedreros (que
extraían la piedra en
canteras cercanas,
como la de
Villanubla),
carreteros, canteros,
156. carpinteros y otros
oficios. Hubo un
grupo de trabajo
integrado por
profesionales de la
construcción, cuya
cabeza principal era
Juan de Herrera, que
había diseñado los
planos y había ideado
la fábrica, seguido por
157. su hombre de
confianza, Diego de
Praves, como
arquitecto director y
supervisor que tenía
a sus órdenes a un
maestro mayor,
Pedro de Tolosa,
quien a su vez había
nombrado a varios
aparejadores, entre
158. los que se encontraba
su hijo, Alonso de
Tolosa. Pedro de
Tolosa murió en
1583, sucediéndole
en la maestría mayor
su hijo Alonso, que se
mantuvo a pie de
obra hasta 1588, año
en que Diego de
Praves se hizo cargo
159. de la obra como
arquitecto-director y
maestro mayor.
Diego de Praves
replanteó todo el
templo desde los pies
hasta el crucero.
Empezó la
construcción por los
pilares del lado del
160. Evangelio y trató de
embutir lo que se
había construido de
la colegiata gótica
trazada en 1527 en el
nuevo edificio. Sin
embargo, los muros
ya realizados del lado
del Evangelio del
templo de 1527
tenían una leve
161. declinación en planta,
lo que hacían
problemático su
aprovechamiento.
Para solventar esto,
Praves escribió una
carta a Herrera en la
que manifestaba esta
cuestión,
acompañándose de
un plano donde se
162. dibujaba lo que
estaba hecho de la
colegiata de 1527 y lo
del nuevo edificio de
Herrera. Solucionados
estos problemas, los
muros de la colegiata
tardogótica se
reaprovecharon,
embutiéndolos en los
de la obra herreriana.
163. En 1589 se compró
más piedra para
labrar las basas y
zócalos de los pilares
interiores. En 1594 ya
se estaban
preparando los
cimientos del
crucero, que
irrumpiría en el
claustro de la anterior
164. colegiata. Un año
después, Felipe II iba
a conseguir la sede
episcopal para
Valladolid, de manera
que en plenas obras,
el edificio pasó de
seguir siendo una
colegiata a ser ya una
catedral. Sin
embargo, faltaban
165. todavía bastante años
para su consagración,
así es que la liturgia
siguió celebrándose
en el edificio de la
antigua colegiata. En
1599, de Praves
terminaba el sector
del lado del Evangelio
desde los pies hasta
el crucero, aunque
166. faltando la cubrición.
Hacia 1600,
empezaba la fachada
principal (sur),
haciéndose el gran
arco de la misma en
1616. En los primeros
años del siglo XVII se
trabajaba realizando
molduras y cornisas y
construyendo el
167. sector del lado de la
Epístola desde los
pies hasta el crucero,
dejándolo también
hasta el arranque de
las bóvedas.
El siglo XVII [editar]
Bóvedas de la nave
central de la Catedral,
construidas por
168. Francisco Tejerina
entre 1662 y 1666.
Puede advertirse
también cómo el
entablamento oculta
los huecos de
iluminación, con lo
cual parece que la
bóveda flota
suspendida.
169. En 1620 murió Diego
de Praves,
sucediéndole en la
maestría de obras su
hijo Francisco de
Praves, con quien se
terminaron las
capillas del lado del
Evangelio, haciendo
sus bóvedas. En la
década de 1620, Juan
170. de la Rozadilla talló
los capiteles corintios
de las pilastras de la
nave central y las
molduras y
modillones del
entablamento de la
nave. A la muerte de
Francisco de Praves
en 1637, tomó su
puesto Juan de
171. Répide, hasta 1661.
Cuatro años más
tarde, Sebastián
Mardaz Colmenares,
supervisado por
Francisco Tejerina,
cerró toda la nave de
la Epístola con
bóveda de arista y en
1662 se terminó la
nave central,
172. tapándola con
bóveda de cañón
corrido con lunetos y
adornada con
yeserías ajenas a las
trazas de Herrera. Las
obras se habían
dilatado más de lo
esperado, así que el
Cabildo tomó la
decisión de inaugurar
173. la nueva catedral,
aunque estuviera
incompleta. El 26 de
agosto de 1668, en
una ceremonia de
gran solemnidad, fue
consagrada la parte
construida de la
nueva catedral, que
se componía de las
tres naves, las capillas
174. del lado del
Evangelio, una capilla
en el lado de la
Epístola y tres ábsides
provisionales en el
espacio en que se
suponía iría el
crucero.
El siglo XVIII [editar]
175. Los recursos
económicos siguieron
siendo escasos a
pesar de las ayudas
de los reyes y otras
donaciones, por lo
que las obras de la
catedral o se
paralizaban o
continuaban lentas y
sin grandes avances
176. arquitectónicos. Ya
entrado el siglo XVIII,
se levantó la torre del
lado del Evangelio,
siguiendo las trazas
de Herrera, aunque
no demasiado
fielmente. En 1713 se
pudieron terminar las
capillas del lado de la
Epístola, todavía en
177. estilo herreriano, a
pesar de que venía
imponiéndose el
barroco. Sin embargo,
el cuerpo alto de la
fachada principal fue
terminado al gusto de
la nueva corriente
artística, siguiendo las
trazas del arquitecto
Alberto de
178. Churriguera. Los
planos y dibujos de
este arquitecto que
se guardan en los
archivos, distan
bastante de la
interpretación y
hechura que dieron
los maestros de obras
correspondientes y
los canteros, que no
179. supieron estar a la
altura. La fachada
principal, con sus
estatuas, fue
terminada en 1733.
Conclusión [editar]
Las obras de
engrandecimiento de
la catedral quedaron
interrumpidas en la
180. mitad del proyecto de
Herrera. Además, la
torre que se había
levantado a principios
del siglo XVIII, se
hundió en 1841,
causando daños al
edificio que tuvieron
que ser reparados,
aunque la torre jamás
se volvió a levantar. A
181. principios de año
1880, comenzó la
construcción de la
torre del lado de la
Epístola, que finalizó
en 1890, salvo el
remate actual de la
cúpula y la escultura
del Sagrado Corazón
de Jesús que se
añadieron en 1923.
182. Entre 1922 y 1928 se
hicieron reformas
interiores, entre otras
la eliminación del
coro de la nave
central, la
construcción de la
tribuna del nuevo
órgano, (para lo cual
se desbarató parte
del crucero que ya no
183. servía como tal), bajo
la dirección del
arquitecto Ricardo
García Guereta, y la
instalación del
retablo mayor de
Juan de Juni. Entre
1962 y 1964 hubo un
intento bastante
afortunado de
rematar en alguna
184. medida el proyecto
de Herrera allí donde
había quedado
inconcluso (siempre
en la única mitad
construida),
rematando la parte
alta del lado de la
Epístola al exterior, y
el primer cuerpo de la
portada, que en
185. teoría habría dado
acceso al crucero,
dirigiendo estos
trabajos el arquitecto
Anselmo Arenillas. En
1965 se restauraron
las capillas de la
antigua colegiata,
salvadas de la
demolición porque
las obras de la
186. catedral no
prosperaron. En estas
capillas se ubicó el
Museo Diocesano
Catedralicio.
Arquitectura del
edificio actual
[editar]
El edificio está sólo
construido desde los
187. pies hasta el crucero.
De la otra parte,
desde el crucero a la
cabecera, sólo está
realizada una capilla
hornacina del lado
del Evangelio y las
cimentaciones de su
simétrica del lado de
la Epístola. Por ello, el
edificio presenta hoy
188. en día tres naves,
separadas con
grandes pilares de
planta cuadrada que
sujetan grandes arcos
de medio punto,
presentando sólo
cuatro tramos cada
una y rematándose
en tres ábsides
provisionales
189. construidos en el
siglo XVII, usando
ladrillo, en el lugar
donde debería haber
estado el crucero. A
los lados del conjunto
de las tres naves
existen ocho capillas
hornacinas (cuatro a
cada lado) cerradas
con rejas, que
190. guardan retablos
barrocos, rococós y
neoclásicos, además
de alguna muestra de
escultura funeraria.
En el exterior, el
edificio también sólo
está concluido hasta
el crucero, si bien
falta una torre de la
191. fachada principal, que
se hundió en 1841, y
la que actualmente se
conserva, fue
construida entre 1880
y 1890 y no es fiel en
absoluto a las trazas
de Juan de Herrera.
Tampoco el cuerpo
alto de la fachada
principal (orientada al
192. sur) es fiel a los
planos herrerianos,
pues fue diseñado
por Alberto de
Churriguera a
principios del siglo
XVIII.
Fachada sur [editar]
Vista del imafronte
de la catedral.
193. En el exterior destaca
la portada de la
fachada principal, que
estaría situada entre
las dos torres, de las
cuales sólo existe hoy
una, levantada en el
siglo XIX sin seguir los
planos de Herrera.
Está resuelta como
un colosal arco de
194. triunfo de orden
dórico y distribuida
en tres cuerpos
centrales bien
definidos:
• El primer cuerpo,
presenta cuatro
columnas y dos
imágenes de San
Pedro y San Pablo
195. situadas en dos
hornacinas
excavadas en los
intercolumnios. En
el centro y
enmarcando la
puerta de entrada
hay un arco
formado por dos
pares de columnas
que soportan la
196. cornisa con
metopas y que
flanquean un arco
de medio punto,
dentro del cual se
abre la puerta
adintelada. No está
bien ejecutada por
los canteros que
materializaron los
planos de Herrera,
197. pues, aparte de no
adelantarse tanto el
cuerpo central
respecto al resto de
la fachada como
está reflejado en los
planos del
cántabro, el gran
arco tiende a ser
apuntado, habiendo
sido diseñado como
198. de medio punto. En
el tímpano del arco
se halla una imagen
de la Virgen de la
Asunción, titular de
la catedral. Las
esculturas de San
Pedro, San Pablo y
la de la Virgen
fueron realizadas
por Pedro
199. Baamonde en el
siglo XVIII cuando
se edificó el
segundo cuerpo de
la fachada. Sobre
los capiteles de las
cuatro columnas,
separando los dos
primeros cuerpos,
se asienta un
200. arquitrabe con friso
y cornisa.
Escud Escudo Escud
o con sostenid o con
el o por el
tema dos tema
maria ángeles maria
no del con las no de
sol. iniciales la
de luna.
201. María.
• El segundo cuerpo,
edificado según las
trazas de Alberto
Churriguera en el
siglo XVIII, presenta,
en altura, las
mismas
dimensiones que el
primero. Posee una
203. marianos,
realizados por el
escultor salmantino
Juan García
Espinosa. Sobre la
ventana se sitúa
una cornisa que
sirve de separación
con el tercer
cuerpo. Presenta
una balaustrada
205. Ambrosio, San
Agustín, obras del
escultor Pedro
Baamonde, San
Gregorio y San
Jerónimo, obras del
escultor Antonio de
Gautúa.
• El último cuerpo se
remata con un
206. triángulo concebido
a modo de frontón
en cuyo centro se
ubica un escudo
sostenido por dos
ángeles que cobijan
las iniciales de
María. El tejadillo
del frontón
presenta cuatro
pilastras barrocas,
207. dos a cada lado, y
otra de mayor
tamaño en el
vértice rematada
con una cruz de
hierro forjado.
Los cuerpos laterales
de la fachada
presentan dos
puertas que se abren
208. a las las naves
menores del interior
de la catedral. Sobre
estas puertas se
encuentra un círculo
en relieve y una
cornisa sobre la cual
se levanta otro
cuerpo de poca altura
con otro círculo en
relieve, de tamaño
209. menor, terminado
con un adorno en
voluta o roleo de
estilo churrigueresco.
Fachada oeste
[editar]
En este lado, el
edificio está
concluido hasta el
crucero, aunque falta
210. la torre de la fachada
principal, hundida en
1841. De la fachada
del crucero sólo están
realizados la
cimentación y los
arranques de los
muros, pero sin el
revestimiento
exterior. A esta
fachada habría
211. estado pegado el
claustro diseñado por
Herrera si se hubiera
construido.
Vista del edificio
desde el oeste (plaza
de Potugalete). Se ve
el edificio herreriano
concluido hasta el
crucero, el muñón de
212. la torre hundida en
1841 con la cornisa
destrozada por el
efecto de la caída de
las piedras y las
ruinas de la colegiata
bajomedieval.
Vista, desde la plaza
de la Universidad del
cuerpo bajo de la
213. fachada del crucero
este, construido entre
1962 y 1964.
Vista de la fachada
oeste, con el crucero
inconcluso y los
muros sin su hoja
exterior. Se ven los
capiteles de las
pilastras y el gran
214. entablamento
interior, que está al
exterior por no
haberse cubierto
nunca esta parte del
edificio. También
aprecia el
cerramiento de la
nave con ladrillo y los
tres ábsides del siglo
XVII. Algunos autores
215. han comparado el
aspecto de esta
construcción con el
de las ruinas de la
antigua Roma.
Fachada este [editar]
Sólo se habían
construido hasta
mediados del siglo XX
la mitad baja del
216. cerramiento exterior
de las capillas-
hornacina hasta el
crucero, la parte alta
que cierra la nave
central, con sus
contrafuertes en
forma de arbotante
invertido, y el exterior
de una capilla-
hornacina del sector
217. de la cabecera,
después del crucero,
que quedaba aislada
por no estar unida
con el resto a raíz de
que la fachada del
crucero no estaba ni
siquiera empezada.
Entre 1962 y 1964, se
reanudaron las obras
con la idea de
218. completar en parte el
proyecto de Herrera
bajo la dirección del
arquitecto A.
Arenillas,
construyéndose la
parte alta de las
capillas del lado de la
Epístola y el primer
cuerpo de la fachada
este del crucero. El
219. resultado fue
bastante
satisfactorio. La
fachada del crucero,
semejante al cuerpo
bajo de la fachada
sur, presenta cuatro
gruesas columnas,
arco de medio punto
que cobija la puerta
de entrada y un
220. entablamento con
cornisa. Sobre este
cuerpo existiría otro,
que no está realizado,
con una gran ventana
flanqueada por dos
pares de pilastras y
coronado con frontón
con bolas a modo de
acróteras.
221. Fachada Norte
[editar]
Nunca fue construida
tal fachada. Aunque
desde el exterior no
puede verse, esta
parte de la catedral
es una mezcla entre
las ruinas de la
colegiata y zonas de
222. lo que pudo ser el
crucero de Herrera.
Lo construido del
templo herreriano se
remata por este lado
por con un muro de
ladrillo que cierra la
nave central a la
altura del crucero y
los tres ábsides que
rematan las naves.
223. Por encima se ven los
muros sin terminar
de lo que hubiese
sido el interior del
crucero, con el gran
entablamento
corintio, los capiteles
y los huecos termales
sin cerrar.
Torres [editar]
224. Artículo principal:
Torres de la catedral
de Valladolid
Torre actual de la
catedral, construida
entre 1880 y 1890. La
cúpula de coronación
y la estatua
monumental del
Sagrado Corazón de
225. Jesús fueron añadidas
en 1923.
Juan de Herrera había
concebido para la
catedral la
construcción de
cuatro torres, dos en
las esquinas de la
fachada de los pies y
dos más bajas en las
226. esquinas de la
cabecera. Estas dos
últimas nunca
llegaron a construirse
y de las otras dos sólo
se levantó la del
oeste. En su alzado,
según los planos, las
torres constan de tres
cuerpos y se remata
en media naranja y
227. linterna. El tercer
cuerpo había de
servir como
campanario.
Entre 1703 y 1709 se
levantó la torre del
lado del Evangelio,
siguiendo las trazas
de Herrera y
dirigiendo las obras el
228. maestro de cantería
Antonio de la Torre.
Años más tarde,
sustituyendo a la
cúpula de media
naranja pensada por
Herrera, se le añadió
un piso más,
ochavado con huecos
donde se albergaron
las campanas, en un
229. número mayor de lo
previsto y rematado
con cúpula de cascos
y linterna. La torre
empezó a dar
problemas, y a lo
largo del siglo XVIII se
hicieron tres
reparaciones, hasta
que en el siglo
siguiente, en 1841, se
230. desmoronó toda la
parte de arriba,
arrastrando gran
parte del tercer y
segundo cuerpo. Las
ruinas corrían peligro
de desplome, así es
que las autoridades
se decidieron por su
derribo hasta la altura
del primer cuerpo,
231. que se mantenía
sólido y firme.
A raíz de esta caída se
proyectó el alzado de
la otra torre del lado
de la Epístola. Habrá
que esperar hasta
1879 para que
empiecen en serio las
obras de la nueva
232. torre. Las trazas de
Iturralde se basaban
en las de Juan de
Herrera para la torre,
con la alteración de la
coronación ochavada,
pero suprimiendo por
economía el segundo
cuerpo de la torre
ideada por Herrera,
es decir, el cuerpo
233. que tenía en sus
alzados dos ventanas
superpuestas. Al
terminarse el primer
piso del cuerpo
ochavado, se
inauguró con
solemnidad el 4 de
abril de 1885. Hubo
entonces numerosas
críticas ante la escasa
234. esbeltez de la torre y
su poca altura, con lo
que Iturralde se vio
obligado a construir
sobre lo edificado dos
cuerpos ochavados
más: uno con el reloj
y otro con una nueva
sala de campanas,
similar a la del primer
piso (ya construido en
235. ese momento) del
cuerpo ochavado.
Todo esto se realizó
entre 1886 y 1890,
año en el que la torre
se remató con un
torpe tejado y un
pararrayos. Por
14
motivos económicos
hasta bien entrado el
siglo XX no se culminó
236. la obra con la
colocación de la
estatua del Sagrado
Corazón y la
instalación del reloj.
Interior [editar]
Alzado de un tramo
de la nave central,
con los grandes
pilares de 13 pies de
237. lado y las pilastras
adosadas que sujetan
el gran
entablamento. Al
fondo se ve el cierre
de las naves laterales,
con las capillas
hornacinas con su
pequeño óculo de luz.
238. El estilo de la catedral
de Valladolid es
purista y sobrio y se
corresponde con el
más típico clasicismo
herreriano, lo cual se
demuestra tanto en
su arquitectura como
en la decoración.
239. La catedral presenta
actualmente tres
naves de cuatro
tramos rematadas
con ábsides en el
lugar donde hubiese
estado el crucero. En
el interior, filas de
pilares con pilastras
adosadas de orden
corintio sujetan
240. hileras de arcos de
medio punto. Las
15
naves están cubiertas
por bóvedas de
arista.
El crucero ideado por
Herrera no existe
como tal porque fue
convertido en espacio
para la capilla mayor
241. y dos laterales.
Solamente del
crucero quedan
construidos algunos
muros y el cuerpo
bajo de su fachada
del lado de la
Epístola, al Este; en la
estancia llamada
Vestíbulo del museo
catedralicio puede
242. verse el arranque de
uno de los arcos
torales que se iban a
construir. El espacio
de lo que pudo ser
este crucero tiene la
misma longitud que
el ancho de las tres
naves, por lo que no
sobresale a los lados
del templo. En sus
243. extremos desemboca
en dos portales pero
sólo está realizado,
con puerta de acceso
y gran portada, el
cuerpo bajo del
correspondiente al
lado este, como ya se
ha dicho. Entre los
contrafuertes de cada
nave del templo se
245. mayor "provisional"
del siglo XVII con el
retablo de Juan de
Juni.
Se encuentra en el
presbiterio, en el
ábside central. Sus
paredes están
tapizadas con
damasco carmesí y
246. contiene el retablo
mayor, obra de Juan
de Juni, que fue
trasladado desde la
cercana iglesia de La
Antigua, la sillería y
un facistol del siglo
XVII, obra de
Cristóbal Ruiz de
Andino. En el centro
hay un altar adornado
247. con un frontal que
presenta un trabajo
de repujado en plata,
obra barroca del siglo
XVIII.
Los retablos [editar]
La capilla mayor ha
tenido tres retablos
diferentes a lo largo
de su historia. El
248. primero fue colocado
en 1670, el segundo
en 1865 y el tercero
en 1922, cuando por
motivo de las obras
en la iglesia de Santa
María La Antigua se
trasladó desde esta
iglesia el retablo de
Juan de Juni, que
quedó
249. definitivamente en la
catedral.
El primer retablo de
1670, era una especie
de tabernáculo y fue
construido por el
ensamblador Pedro
de Cea con esculturas
de José Mayo y Pedro
Salvador y una
250. pequeña imagen de la
Asunción que en el
año 2008 se
encuentra en la
capilla de San Pedro.
El segundo retablo,
que sustituyó al
anterior y que se
mantuvo hasta 1922,
procedía de la iglesia
251. de Arrabal de Portillo,
fue cedido por el
cardenal-arzobispo
de Valladolid Juan
Ignacio Moreno el 6
de julio de 1865. Su
instalación se celebró
con Salve Solemne 16
la víspera de la fiesta
de la Concepción
(según consta en las
252. Actas Capitulares).
Era un retablo
dorado, con cuatro
columnas
salomónicas, al que
se le añadió una
pintura de la
Asunción del pintor
Zacarías González
Velázquez, que fue
ampliada en sus
253. costados por el pintor
vallisoletano Pablo
Berasátegui, para
amoldarse al hueco
que ya tenía el
retablo. En los
intercolumnios del
retablo estaban las
imágenes de Pedro y
Pablo. También había
un lienzo apaisado
254. con Santiago Apóstol.
Tenía una tarjeta
circular festoneada
de nubes y cabezas
de ángeles, que
servían como marco
al anagrama de María
que era dorado sobre
fondo de azul claro,
acompañado de 4
jarrones
255. perpendiculares a las
columnas del tercer
cuerpo. Detrás del
tabernáculo había un
nicho abierto en el
muro y cerrado con
verja de hierro;
dentro había una
urna de plata con la
inscripción:
256. Corpora S. S. in pace
sepulta réquiem in
spe.
Este retablo barroco
fue cedido en 1922 a
la iglesia del
monasterio de San
Benito el Real, en
Valladolid, donde
actualmente se
257. conserva, aunque la
pintura de la
Asunción de Zacarías
González Velázquez
se quedó en la
Catedral,
conservándose hoy
en la Capilla de San
Pedro Regalado. El
tercer retablo, que es
el que perdura,
258. procede de la iglesia
cercana de Santa
María de la Antigua;
fue necesario sacarlo
de allí por motivo de
las obras que se iban
a realizar en esta
parroquia en 1922. Es
el retablo que Juan de
Juni contrató para
Santa María de la
259. Antigua en 1546
además de seis
sitiales adosados al
mismo y formando un
todo y que subsisten
en la catedral tal y
como lo concibió Juan
de Juni.
Historia de la
creación del retablo
260. de Juan de Juni
[editar]
El 12 de febrero de
1545, el escultor Juan
de Juni se reunió con
los canónigos y
parroquianos de la
iglesia de Santa María
de la Antigua de
Valladolid para
261. concertar las
condiciones para la
elaboración del
retablo mayor:
condiciones,
materiales, medidas,
esculturas, temas,
etc. El escultor se
comprometía
también a:
262. […] pintar y estofar
de oro, colores, todo
muy bueno, y por
mano de oficiales, los
que mejor lo supieran
hacer […]
Se estableció un
tiempo de seis años a
partir de la firma del
contrato (1546) y un
263. precio de 2.400
ducados. Pero el
acuerdo no pudo
seguir adelante
porque el escultor
Francisco de Giralte
entabló un pleito en
contra de Juan de
Juni, que duró hasta
1550, fecha en que la
Chancillería se
264. pronunció a favor de
Juan de Juni. El
proceso, del que se
guardan todos los
documentos y firmas
de testigos y
declarantes, fue largo
y desagradable. El
estudio exhaustivo
que hizo José Martí y
Monsó a la vista de
17
265. todos los legajos sacó
a la luz el origen de
este pleito y el por
qué de tanta
insistencia, sobre
todo por parte de los
seguidores del
escultor Giralte que
se vio inmerso en
esta historia como un
simple instrumento
266. sin demasiada
convicción.
Cuando la iglesia de
Santa María de la
Antigua repartió los
edictos para poner en
conocimiento la
pretensión de un
nuevo retablo, ningún
artista se presentó
267. salvo Juan de Juni
que inmediatamente
enseñó su proyecto.
Todos estuvieron de
acuerdo (el provisor
Juan de Balboa puso
algunas pegas por el
gran coste que
suponía) y la obra
habría seguido
adelante si no se le
268. hubiera tratado de
imponer a Juan de
Juni una última
condición que no
aceptó: tenía que
tomar como
ayudante o
colaborador para
pintar el retablo al
pintor Vázquez y a un
cuñado de éste
269. llamado Ribera,
protegidos de
algunos fieles
parroquianos de
bastante influencia.
Juan de Juni no
aceptó, alegando que
puesto que se había
comprometido a
realizar la obra quería
tener la libertad de
270. escoger a sus
pintores y salir fiador
de ellos. Ante la
negativa, los
interesados
consiguieron detener
la ejecución del
contrato y buscaron a
Giralte para que
presentara una nueva
traza y exigiese que le
271. otorgaran la
ejecución del retablo.
Aquí empezó el litigio
que, como se ha
dicho más arriba,
terminó en 1550
sentenciando la
Chancillería a favor
de Juan de Juni.
272. Descripción del
retablo [editar]
Capilla mayor, con la
sillería de coro
clasicista, el retablo
de Juan de Juni
procedente de La
Antigua y el altar con
frontal de platería.
273. Las medidas y
estructura del retablo
se adaptaban
perfectamente al
ábside de Santa
María de la Antigua
para quien fue
pensado y
proyectado; en la
catedral resulta
ligeramente
274. disminuido. Está
considerado como
una gran obra de
Juan de Juni que
expresó en él todo su
saber clasicista,
huyendo del
encasillamiento
convencional
renacentista. Por eso
puede verse como
275. novedad cómo están
divididos los
compartimentos para
las figuras aisladas y
cómo los tableros de
composición no se
repiten
simétricamente de
arriba abajo sino que
están intercalados en
los distintos cuerpos.
276. El retablo está
dedicado a Santa
María, por lo que
presenta escenas de
la vida de la Virgen y
de Cristo. Está
dividido en predela y
tres cuerpos más el
ático. En los dos
primeros cuerpos las
columnas de orden
277. compuesto sirven de
separación (o de
marco) para las
distintas figuras de
santos esculpidas en
busto redondo. Los
fustes no presentan
ninguna
ornamentación de
grutescos, como
todavía se venía
278. haciendo, siendo este
detalle bastante
criticado por algunos
personajes de la
época. El tercer
cuerpo no tiene
esculturas enteras
sino relieves que
sobresalen bastante,
contrastando con los
relieves del segundo
279. cuerpo que están
alrededor de las
figuras y que
sobresalen muy poco.
En los intercolumnios
se hallan las figuras
de San Andrés, San
José, San Joaquín y
San Agustín. Tienen la
originalidad de que la
280. cruz de San Andrés se
asoma por detrás de
la columna, en el
hueco siguiente y lo
mismo ocurre con el
báculo de San
Agustín. En palabras
de Martí y Monsó, el
escultor Juan de Juni
en esta obra llegó a
dar:
281. […] el sello especial
de grandiosidad
ampulosa, de
movimientos
decididos y violentos
con semblantes
expresivos, y
conocimiento
profundo de la
anatomía artística […]
282. Coro [editar]
La Catedral de
Valladolid atesora un
archivo musical que
está considerado
como de los mejores
del mundo en su
género. En él se
encuentran obras
manuscritas e
283. impresas (algunas de
éstas últimas, de gran
valor por los escasos
ejemplares que se
conservan) que van
desde el siglo XV al
XX. Muchas de las
composiciones son
obra de los Maestros
de Capilla que ha
tenido la colegiata y
284. después catedral
vallisoletana desde el
Renacimiento hasta
nuestros días. Entre
ellos, destacan
Francisco de
Montanos en el siglo
XVI; Manuel Gómez
Camargo en el XVII;
en el XVIII, José
Martínez de Arce y
285. Fernando Haykuens;
en el XIX, Antonio
García-Valladolid;
Vicente Goicoechea a
caballo entre el XIX Y
XX y ya esta últia
centuria, Julián García
Blanco . 18
Al contrario que
muchas catedrales
286. españolas, en la
actualidad, la sillería
de coro no está
colocada en la nave,
sino en el presbiterio,
mientras que el
órgano se halla en
una tribuna alta a los
pies. Sin embargo,
cuando se construyó
el coro en 1667, se
287. situó la sillería en el
centro de la nave
mayor, con los
órganos a los lados,
según costumbre de
la arquitectura
religiosa española,
ocupando el segundo
tramo por los pies de
la nave central. La
primera sillería que
288. tuvo fue la
proveniente de la
antigua colegiata, de
estilo tardogótico,
realizada en el siglo
XV. En el siglo XVII,
hubo necesidad de
hacer nuevos sitiales
al pasar de la
Colegiata gótica al
templo herreriano.
289. Esta sillería se utilizó
hasta los primeros
años del siglo XIX,
cuando se sustituyó
por otra,
desmembrándose la
tardogótica, que fue
arrinconada y
guardada en huecos
de diversas capillas.
Algunos de los
290. paneles de madera
finamente tallados
que servían de
respaldos, fueron
utilizados como
batientes de puertas 19
y la silla abacial se
llevó a la capilla del
Palacio Arzobispal. En
1763 se empezó a
colocar la reja
291. costeada por el
obispo de Valladolid
Isidro Cosío y
Bustamante.
A principios del siglo
XIX se amuebló el
coro con la sillería
que estaba en el coro
alto de la iglesia del
convento de San
292. Pablo. Esta sillería, de
estilo herreriano y
realizada con
maderas de gran
calidad, fue mandada
construir por el
duque de Lerma,
patrón del Convento
de San Pablo, en el
siglo XVII y sus
autores fueron
293. Francisco Velázquez y
Melchor Beya, ambos
de Valladolid. En el
libro Becerro del
convento de San
Pablo puede leerse
esta referencia:
En mil seiscientos
veintiuno y mes de
Noviembre, se
294. finalizó la sillería del
coro, que se
compone de
cincuenta sillas altas y
cuarenta y cinco
bajas. Costó la
hechura de cada par
unas con otras,
trescientos treinta
ducados. Las maderas
son de las indias
295. portuguesas; costeó
la obra el duque
cardenal.
Cuando en 1928 se
desbarató el recinto
del coro y la reja que
lo cerraba fue
vendida, se hizo la
tribuna a los pies de
la catedral, donde se
296. instaló uno de los dos
órganos, y los sitiales
se llevaron al
presbiterio, donde se
colocaron en
semicírculo apoyados
en la pared.
Actualmente siguen
dispuestos de este
modo. Se encuentran
los sitiales
297. distribuidos en dos
grupos simétricos
flanqueando al
retablo de Juan de
Juni. Existen en total
32 sillas altas y 22
bajas sin contar con
los seis sitiales bajos
que posee el propio
retablo de Juni.
298. Reja del coro [editar]
El coro estuvo
cerrado por una
buena reja costeada
por el obispo de
Valladolid Isidro Cosío
y Bustamante, que se
empezó a colocar en
octubre de 1763 y
quedó instalada en
299. diciembre de ese
mismo año. Acabó su
dorado en agosto de
1764. En el centro del
segundo cuerpo
colocó el Cabildo el
escudo de armas del
obispo Bustamante,
en homenaje y
agradecimiento a su
donación. Llevaba la
300. leyenda:
Esta reja y rallar las
dio el Ilmo. Sr. Don
Isidro Cosío, obispo
que fue de esta
ciudad.
Años más tarde este
escudo con su
inscripción fue
301. sustituido por el del
Cabildo.
Reja del coro de la
Catedral,
actualmente
expuesta en el Museo
Metropolitano de
Nueva York.
La reja fue ejecutada
en talleres de Elorrio
302. y Elgóibar, en el País
Vasco, siendo
terminada en 1763.
Tradicionalmente se
ha venido
atribuyendo su
autoría a dos rejeros:
Gregorio de Aguirre y
Rafael de Amezua.
Estudios más
recientes dan por
303. segura la autoría del
artista Amezua
perteneciente a una
familia de rejeros de
Elorrio. Parece que lo
confirma la similitud
de motivos en dos
rejas firmadas por
Rafael de Amezua
destinadas a los lados
del altar mayor de la
304. catedral de Cuenca y
otra de Gaspar de
Amezua para el coro
de la Iglesia de Santa
María de Palacio, en
Logroño. Teorías
20
anteriores atribuían
la obra a Gregorio de
Aguirre, rejero y
21
maestro arquitecto
de Elgoibar. 22
305. Era costumbre de los
rejeros de Elorrio y
Elgóibar depositar en
Vitoria las piezas de
las rejas una vez
terminadas. Desde
allí, cargadas en
carretas, llegaron a
Valladolid en cuya
catedral fueron
montadas y
306. asentadas entre
octubre y diciembre
de 1763, bajo la
supervisión del
maestro rejero autor
de la obra. El Cabildo
invitó a los artífices a
un ágape, lo que
entonces se llamaba
guantes para
refrescar. En 1764 se
307. llevó a cabo el
dorado,
probablemente por
doradores segovianos
que eran los más
expertos en esta
época.
En 1928, con la
remodelación hecha
en la catedral, la
308. sillería del coro volvió
al altar mayor y se
construyó una
tribuna alta a los pies
donde se ubicó el
órgano. Por motivos
económicos por la
necesidad de seguir
haciendo obras, el
Cabildo vendió la reja
(y otras obras de arte)
309. que fue a parar a la
Fundación Hearst.
Esta fundación la
donó en 1956 al
Museo Metropolitano
de Arte de Nueva
York, donde se puede
ver asentada sobre
un banco de piedra.
310. Tiene 3 puertas, 9
calles y 3 pisos. Las
columnas son mitad
torneadas y mitad
abalaustradas (con
abalaustramiento
invertido), siguiendo
un modelo típico del
taller de Elorza. Tiene
64 balaustres
cincelados. Un
311. arquitrabe liso separa
el primer friso con
una cornisa de
molduras. El
coronamiento tiene
ornamentación de
espirales, óvalos y
jarrones.
312. Los órganos
musicales de la
catedral [editar]
El 26 de agosto de
1668 se inauguró y
consagró la catedral
de Herrera, aun sin
estar terminada. Un
año antes se había
situado el coro en la
313. nave central, con la
sillería gótica de la
antigua colegiata.
Posiblemente con la
sillería, pasó al nuevo
edificio el órgano de
la colegiata, que
databa de mediados
del siglo XVI y que
había sido reformado,
o quizás totalmente
314. reconstruido, hacia
1620. Sustituyendo a
este instrumento, a
finales del siglo XVII
se construyeron
sendos órganos que
se colocaron a los
lados del coro,
cobijados bajo los
grandes arcos que
separan la nave
315. central de las
laterales. Los dos
órganos fueron
reformados en 1792,
construyéndose una
caja nueva neoclásica
para el del lado de la
Epístola. Ambos
instrumentos
respondían a la
tipología de órgano
316. barroco español, con
una importante
trompetería de
fachada.
Órgano Amezua en su
emplazamiento
actual, a los pies del
templo, sobre su
tribuna construida en
1928. También se ve
317. el cancel
churrigueresco de
principios del siglo
XVIII.
Se tiene noticia de
arreglos y reformas
en los órganos
barrocos a lo largo
del siglo XIX. Sin
embargo, a principios
318. del siglo XX, la
estética sonora
barroca no gustaba
por el cambio de las
modas y además, los
dos órganos
catedralicios no se
encontraban en buen
estado. De esta
manera, gracias a las
gestiones del
319. entonces Maestro de
Capilla de la Catedral,
Vicente Goicoechea,
se realizó un nuevo
órgano de estilo
romántico en 1904,
sustituyendo al
órgano barroco del
lado de la Epístola del
coro, pero
reutilizando su caja
320. de 1792 y situándose
en el mismo lugar. El
nuevo instrumento
fue construido por el
importante organero
vasco Aquilino
Amezua (1847-1912),
figura clave de la
organería romántica
española e
introductor del
321. órgano romántico en
nuestro país. En 1907,
se celebró un
importante congreso
de música sagrada en
la Catedral y tuvieron
lugar dos conciertos
en este órgano de
Amezua en los que
tocaron los organistas
españoles más
322. destacados del
momento, dando a
conocer el repertorio
romántico para
órgano (Felix
Mendelssohn,
Alexandre Guilmant,
Charles-Marie Widor,
Léon Boëllmann...)
que nunca antes se
había interpretado en
323. la Catedral, y la
música de Johann
Sebastian Bach,
desconocida hasta
entonces en
Valladolid.
En 1928 se
desmanteló el coro
bajo y el órgano
barroco que aún se
324. conservaba en el lado
del Evangelio, fue
vendido como
chatarra,
construyéndose una
tribuna a los pies
donde se colocaría el
órgano que Amezua
había realizado en
1904, con su caja
neoclásica de finales
325. del siglo XVIII. En
1933, a petición del
Organista de la
Catedral, se amplió y
reformó el órgano
con el dinero
procedente de una
donación anónima
destinada a tal
efecto. Los trabajos
fueron realizados por
326. Leocadio Galdós
(discípulo de A.
Amezua), adquiriendo
el instrumento su
actual configuración
con tres teclados y
pedalero, 34 juegos
efectivos y alrededor
de 2100 tubos; se
trata de uno de los
órganos más grandes
327. de Castilla y León.
Consola del órgano
Amezua de la
Catedral. Se observan
los tres teclados
manuales y el
pedalero, así como
los mandos de los
registros.
328. La caja de este
órgano es muy
sencilla de acuerdo
con el gusto
neoclásico; está
rematada por un
frontón con
acróteras. La fuellería
se oculta tras unos
paneles del pedestal.
Los capiteles de las
329. pilastras son corintios
y sostienen una
cornisa con tallas en
los intercolumnios.
Los tubos que se ven
en los costados son
de adorno, pues la
tubería cantante
(como se conoce a los
tubos que suenan) se
extienden en varios
330. castillos (castillo es la
palabra con la que se
conoce en organería
cada uno de los
grupos de tubos que
adornan la fachada
de un órgano)de la
fachada principal de
la caja.
331. Este órgano se
conserva en la
tribuna de los pies de
la catedral (año de
2008).
Recientemente, se ha
cambiado el antiguo
motor-ventilador
destinado a hinchar
los fuelles por uno
moderno y más
332. silencioso. El
instrumento se utiliza
en las liturgias
dominicales de la
Catedral, sonando
ocasionalmente en
concierto. A lo largo
de su historia, han
dado conciertos en él
grandes organistas
españoles como
333. Bernardo Gabiola,
Víctor Zubizarreta,
Miguel Echeveste,
Jesús Guridi, José
Manuel Azkue, José
Enrique Ayarra o
Esteban Elizondo.
En el mes de
diciembre del año
2005 el Arzobispado
334. de Valladolid
adquirió, con gran
polémica, un órgano
electrónico Allen que
se encuentra cerca
del presbiterio,
destinado para
acompañar al Coro
Diocesano.
335. Capillas de la nave
del evangelio [editar]
Planta de la Catedral
de Valladolid, con las
capillas de la nave del
evangelio en color
naranja:
1.Capilla de San Juan
Evangelista
2.Capilla de Nuestra
336. Señora de los Dolores
3.Capilla de Nuestra
Señora del Sagrario
4.Capilla de San
Fernando
Son las capillas que se
encuentran a la
izquierda, según se
mira al altar. Son las
siguientes: Capilla de
337. San Juan Evangelista,
Capilla de Nuestra
Señora de los
Dolores, Capilla de
Nuestra Señora del
Sagrario y Capilla de
San Fernando
Capilla de San Juan
Evangelista [editar]
338. Hacía las funciones
parroquiales, ya que
en su interior se
encontraba la pila
bautismal. Es una
capilla de tamaño
reducido, ya que se
encuentra justo
debajo de la antigua
torre. Con el
hundimiento de dicha
339. torre, se procedió a
rehacer su bóveda,
imitando a la antes
existente. Contiene
en su interior un
retablo neoclásico,
realizado por por
Jorge Somoza en
1846, que se organiza
a modo de arco del
triunfo, con cuatro
340. grandes columnas
corintias. Dicho
retablo fue encargado
para reemplazar al
anterior, de 1714 y
obra de Pedro de
Rivas, que se
destruyó al hundirse
la torre. Acoge una
escultura del santo
titular del siglo XVII.
341. Además, hay varios
lienzos y parte de la
antigua sillería del
siglo XV procedente
de la colegiata. La
capilla se cierra con
una reja del siglo XVII,
rematada con
crestería barroca
tallada en madera.
342. Capilla de Nuestra
Señora de los
Dolores [editar]
Formaba parte del
antiguo patronato de
la familia de los
Velarde, siendo
bendecida la capilla
en 1630. Posee un
gran retablo barroco
343. dorado, datado hacia
1700, con estípites y
un gran tabernáculo,
adornado con
espejos. En el retablo
se encuentran
pequeñas esculturas
coetáneas al mismo.
Flanqueándolo, se
hallan dos hornacinas
que contienen los
344. relicarios de la
Catedral, del siglo
XVII. En un lado de la
capilla se halla un
retablo de estilo
rococó, realizado en
1776, para
conmemorar el
nacimiento de San
Simón de Rojas en
1552, en una casa
345. que se encontraba,
antes de la
construcción de la
actual catedral, en el
lugar que hoy ocupa
esta capilla; contiene
una pintura que
representa un pasaje
de la vida del santo.
En el lado opuesto a
este último retablo,
346. se halla el
monumento sepulcral
del fundador Juan
Velarde (fallecido en
1616), de estilo
clasicista, con cuatro
columnas dóricas
entre las que se
encuentra el
sarcófago; también
existe un retrato del
347. fundador, obra de
gran calidad,
atribuida al pintor
Francisco Martínez.
Aquí se encuentra en
la actualidad la pila
bautismal de la
Catedral. Hay además
varios lienzos. La
capilla se cierra con
una reja del siglo XVI,
348. quizás procedente de
la colegiata, y
colocada aquí en
1674.
Capilla de Nuestra
Señora del Sagrario
[editar]
En esta capilla se
encuentra la imagen
de Nuestra Señora
349. del Sagrario, una
escultura de la Virgen
con el Niño, de
pequeño tamaño
realizada en piedra y
que data del siglo XV;
se encontró
emparedada en 1602,
durante el transcurso
de unas obras en la
colegiata. El Cabildo
350. la eligió como su
patrona y la colocó en
esta capilla,
terminada en 1624.
La imagen se
encuentra en un
retablo neoclásico de
principios del siglo
XIX. Se encuentran
además dos lienzos
de Manuel Peti,
351. realizados en 1700,
varias pinturas y
esculturas de santos
del siglo XVII, entre
ellas, una buena
imagen de la Virgen
del círculo de
Francisco del Rincón,
y dieciocho sitiales de
la antigua sillería
tardogótica. Se cierra
352. la capilla con una reja
de hierro realizada
antes de 1655.
Capilla de San
Fernando [editar]
Fue fundada en 1585
por Juan de
Santisteban, pero
debido a la lentitud
de la marcha de las
353. obras del templo
herreriano, la capilla
no se materializó
hasta casi noventa
años después. En su
interior, se halla un
retablo salomónico
de 1680, obra de
Pedro de Cea, que se
organiza por medio
de cuatro columnas
354. salomónicas entre las
que se encuentra una
escultura de San
Fernando tallada por
Alonso de Rozas.
También existe un
retablo dedicado la
Inmaculada, situado
antes en el trascoro
desmantelado en
1928, que contiene
355. una serie de pinturas
de Felipe Gil de
Mena. Se cierra con
una reja de 1678.
Capilla del ábside
[editar]
Sepulcro del conde
Pedro Ansúrez, señor
y repoblador de
Valladolid.
356. Remata la nave del
Evangelio y
notablemente más
baja que ésta. Fue
construida en el siglo
XVII de manera
provisional, usando
ladrillo y yeso. Posee
planta ochavada y se
decora en el interior
con varias molduras y
357. ménsulas de estilo
barroco. En esta
capilla, se encuentra
el mostrador donde
se despachan los
billetes para entrar al
Museo Diocesano y
Catedralicio; también
se encuentran,
además del sepulcro
del Conde Ansúrez,
358. algunas obras de arte
como el retablo
neoclásico formado
por una tabla del siglo
XVI con el tema de la
Crucifixión cuyo autor
es el flamenco Miguel
Coxcie, que trabajó
bastante durante el
reinado de Felipe II.
359. Sepulcro del conde
Ansúrez [editar]
En la pared oeste, y
justo detrás del
mostrador, está el
humilde sarcófago del
conde Ansúrez,
rodeado de una
sencilla reja de hierro
que tiene en su
360. centro un pequeño
escudo con las armas
del conde. Sobre la
lápida se encuentra
una tosca escultura
de madera
representando al
conde en posición
supino-horizontal,
con casco y
armadura. El conde
361. fue enterrado, según
sus deseos, en la
antigua colegiata
fundada por él, y sus
restos fueron
trasladados a este
lugar en 1674. En el
hueco del nicho se
puede ver una tabla
del siglo XVI pintada
con el tema de San
362. Miguel, que recuerda
la cofradía de
Escuderos fundada
por el conde Ansúrez.
En los costados se
repiten los escudos y
debajo están
colocadas dos tablas
procedentes del
primitivo
enterramiento de la
363. colegiata pintadas de
blanco y escritas con
unos versos que
elogian las buenas
cualidades de
Ansúrez.
El historiador Juan
Antolínez de Burgos,
en su Historia de
Valladolid, cuenta
364. que en el año 1556, al
abrir el sepulcro para
reparar el arco, se
halló su cuerpo
armado con su
espada y espuelas, tal
y como se ve en su
escultura.
Capillas de la nave de
la epístola [editar]
365. Planta de la Catedral
de Valladolid, con las
capillas de la nave de
la epístola en color
naranja:
6.Capilla de la
Magdalena
7.Capilla de San José
8.Capilla de San
Pedro
366. 9.Capilla de San
Miguel
Son las capillas que se
encuentran a la
derecha, según se
mira al altar. Son las
siguientes: Capilla
absidal, Capilla de San
Pedro Regalado,
Capilla de San José,
367. Capilla de San Pedro
Apóstol, Capilla de
San Miguel y por
último.
Capilla de San Miguel
[editar]
Realizada en 1712, se
encuentra bajo la
torre realizada entre
1880 y 1890. Su reja
368. data también de
1712. El retablo,
barroco y adornado
con cornucopias de
estilo churrigueresco,
fue realizado en 1714
por Pedro de Rivas, y
su escultura titular,
probablemente
también fue obra de
Pedro de Ávila.
369. Capilla de San Pedro
Regalado [editar]
Originalmente
dedicada a la
Magdalena, fue
realizada en 1712, y
cambió su advocación
en 1843 por la de San
Pedro Regalado, en
honor al santo local.
370. En uno de sus lados,
en un retablo
neoclásico con
frontón triangular,
contiene un lienzo
neoclásico de la
Asunción, obra de
Zacarías González
Velázquez; enfrente
de este retablo existe
otro con un lienzo
371. que representa a la
Virgen entregando el
niño a San Antonio de
Padua, obra de
Alonso del Arco. No
se conserva el retablo
titular realizado en
1714, pero sí la
Magdalena,
posiblemente
realizada por Pedro
372. de Ávila, que se
guarda en otras
dependencias
catedralicias.
Actualmente, el
retablo que posee la
capilla, de estilo
rococó, con dos
columnas corintias de
fuste adornado,
acoge un gran lienzo
373. con el tema de San
Pedro Regalado
resucitando para dar
de comer a un pobre,
del pintor italiano
Placido Costanzi
datado en la primera
mitad del siglo XVIII.
La reja que remata la
capilla data del año
1712.
374. Capilla de San José
[editar]
Contiene las
esculturas funerarias
de la familia Venero y
Leyva, provenientes
de la Capilla de Santa
Catalina del Convento
de San Francisco,
atribuibles a
375. Francisco del Rincón y
realizadas en
alabastro. Su retablo
mayor, de estilo
barroco, con estípites
y dorado, data de
1712, siendo la
imagen titular
atribuida a Pedro de
Ávila. Cuenta con una
serie de lienzos,
376. varios de ellos copias
de cuadros de
pintores como Tiziano
y Rafael. Su reja fue
realizada en Vitoria
en 1712, siendo
realizada su cornisa
por Alonso del
Manzano.
377. Capilla de San Pedro
Apóstol [editar]
Se terminó su
realización en 1712,
siendo colocado su
retablo, también
barroco y con
estípites, dos años
más tarde. Su
escultura titular es
378. atribuible a Pedro de
Ávila. Cuenta con una
escultura de la
Asunción. Contiene
además dos
pequeños retablos
salomónicos,
procedentes de la
antigua iglesia de San
Esteban, en Portillo,
hoy desaparecida. Su
379. reja data del siglo XVI,
siendo recompuesta
dos siglos más tarde.
Se encuentran
además una serie de
pinturas de santos,
todas ellas del siglo
XVII. En esta capilla y
la anterior se
encuentra
actualmente una
380. colección de doce
hacheros de bronce
realizados en
Barcelona en el siglo
XVIII.
Capilla del ábside
[editar]
Es ochavada,
construida con
ladrillo y yeso,
381. adornada con algunas
molduras y ménsulas
de estilo barroco y
totalmente enlucida.
Posee un retablo
neoclásico, idéntico al
de la capilla absidal
del lado del
Evangelio, que acoge
un gran lienzo sobre
el tema de la
382. Transfiguración, obra
atribuida a Lucas
Jordán. A través de la
capilla se realiza el
ingreso al templo a
través de la fachada
este, a la plaza de la
Universidad,
cerrándose con unas
puertas de estilo
rococó, muy
383. deterioradas,
procedentes de la
Iglesia del monasterio
de San Benito el Real
de Valladolid, donde
originalmente
cerraron el trascoro
de esta iglesia.
Llegaron a la Catedral
en 1866.
384. Sacristía [editar]
La sacristía de la
catedral era la
antigua capilla de la
Inmaculada, la única
construida del sector
de la cabecera
después del crucero.
Fue patronato de don
Pedro de Arce, pero
385. que fue habilitada en
1960 como sacristía.
Se construyó en 1655,
y de dos años más
tarde es su reja.
Contiene una serie de
pinturas originales y
copias, varias tablas
con piezas en cobre y
un retablo neoclásico
con un cuadro de la
386. Anunciación, obra de
Bartolomé de
Cárdenas. Contiene
también una sencilla
cajonería neoclásica
de principios del siglo
XIX. En dependencias
contiguas se halla una
serie de retratos de
los Obispos y
Arzobispos
387. vallisoletanos desde
Bartolomé de la Plaza
hasta nuestros días.
Sala capitular [editar]
Se encuentra
integrada entre las
capillas de la antigua
colegiata. Fue
construida en el siglo
XVII, usando parte de
388. una crujía del claustro
colegial. Se cubre con
bóveda de cañón con
lunetos y yeserías.
Posee una sillería
barroca tallada en
1764 para el coro alto
la iglesia del
monasterio de San
Benito el Real de
Valladolid y
389. trasladada a la
Catedral en 1867.
Además, contiene
varias pinturas, y
esculturas, dos de
ellas traídas de San
Pablo de la Moraleja.
Monopolio de la
catedral sobre la
390. cartilla de doctrina
cristiana [editar]
Artículo principal:
Cartilla de la doctrina
cristiana
Felipe II extendió una
Real Cédula
concediendo a la
catedral el privilegio
391. de venta de la cartilla
de doctrina cristiana.
La cartilla de doctrina
cristiana era un
librito donde venía
resumido lo esencial
de dicha doctrina. Los
niños aprendían a
leer en este
cuadernillo a través
392. de las plegarias y
oraciones más
simples y los puntos
más importantes de
la doctrina cristiana.
Había también unas
páginas dedicadas a
lo más básico del
cálculo matemático.
En el siglo XVI
proliferaron estas
393. cartillas de tal
manera que algunos
historiadores le
llamaron el siglo de
las cartillas o de los
catecismos de
Doctrina Cristiana. 23
La venta de esta
cartilla llegó a ser
monopolio de la
catedral de
394. Valladolid, a partir de
una petición hecha
por el Cabildo al rey
Felipe II, para
sufragar las
interminables obras
de acabado de la
catedral. Felipe II
escuchó la petición y
extendió una Real
Cédula el 20 de
395. septiembre de 1583
concediendo el
privilegio,
inicialmente por 3
años, que más tarde
prorrogaría y que
después prorrogarían
los reyes sucesores
hasta llegar a Carlos
III, que el 7 de
septiembre de 1779
396. concedió la última
prórroga por 40 años,
a pesar de que el
Cabildo le había
pedido perpetuidad:
Si V.A. no se digna a
perpetuar el
privilegio, poco a
poco se irá
arruinando el edificio.
397. En el archivo de la
catedral de Valladolid
se conservan los
documentos en que
se da noticia de la
primera petición, de
las razones para esa
petición, de la
finalidad que tendrán
los beneficios
obtenidos (siempre y
398. en único lugar las
obras de la catedral),
de las condiciones de
impresión; sólo se
podía imprimir en
Burgos, Valladolid,
Salamanca, Madrid y
Sevilla y siempre con
licencia del Cabildo
vallisoletano:
399. Mandamos (el rey)
que […] persona
alguna, sin nuestra
licencia no pueda
imprimir ni vender la
dicha cartilla ni otra
alguna...
Se expresan así
mismo los castigos y
multas que caerán
400. sobre las personas
que desobedezcan
estos mandatos:
Sopena que el que la
imprimiere y
vendiere, aya perdido
y pierda todas y
cualesquiera cartillas
y moldes y aparejos
que de ella tubiere y
401. mas incurra en pena
de cincuenta mil mrs.
por cada vez que lo
contrario hiciere…
A pesar de todos
estos mandatos hubo
muchas infracciones
de las que se queja
constantemente el
Cabildo. Los ingresos
402. que se obtenían de
este privilegio eran
bastante sustanciosos
pero no llegaban en
absoluto a cubrir
gastos para la
catedral, que se
nutría principalmente
de limosnas y de
otros impuestos
beneficiarios, como el
403. cobro de un cuarto
por cada persona que
acudiera al teatro. 24
El comercio de las
cartillas se extendió a
América, siendo el
único producto
manufacturado en el
que Valladolid tuvo
contacto comercial
404. en el siglo XVI con el
Nuevo Mundo. De
América se
obtuvieron muy
buenos beneficios.
Influencia [editar]
Debido a la influencia
de Juan de Herrera y
a la similitud de la
filosofía de su
405. construcción con la
ideología de los
Austrias Mayores, la
catedral de Valladolid
fue muy imitada en la
arquitectura religiosa
del siglo XVII. Su
influencia está
presente en la Iglesia
de Nuestra Señora de
las Angustias de
406. Valladolid así como
en las catedral de
México y Lima.
Véase también
[editar]
• Cronología de la
Catedral de
Valladolid
• León de la catedral
de Valladolid
407. • Museo Diocesano y
Catedralicio de
Valladolid
Referencias [editar]
1. ↑ Las jurisdicciones
durante la Edad
Media en España
venían
determinadas por el
régimen feudal y
408. estaban formadas,
física y
jurídicamente, por
el conjunto de
tierras sobre las que
el señor ejercía su
autoridad.
2. ↑ El texto de esta
Carta de Fundación
tanto en latín como
en castellano puede
409. verse (además del
original que está en
los Archivos) en la
obra citada de
Manuel Canesi,
Tomo I página 220 a
225.
3. ↑ Esto pudo
suceder entre
1580-1582; no se
410. tiene una referencia
exacta.
4. ↑ Se refiere a la
consagración del
rango de catedral
que sustituyó al de
colegiata, no a la
consagración del
edificio como
catedral nueva, ya
que eso tuvo lugar
411. más adelante, el 26
de agosto de 1668.
5. ↑ Fue por causas
políticas y
desavenencias con
el rey Alfonso VI.
6. ↑ Pascual |
Martínez Sopena,
Una historia de
Valladolid.
412. 7. ↑ La condición de
sufragánea
implicaba el
sometimiento a la
autoridad del
Arzobispado de
Toledo, careciendo
de jurisdicción
eclesiástica propia.
Además, llevaba
aparejada la
413. obligación de
aportar una parte
de los recursos
obtenidos entre los
fieles o en virtud de
la explotación de
sus bienes, a
Toledo.
8. ↑ Las fechas son
dispares según
distintos autores:
414. 21 de mayo de
1595, 25 de
noviembre de 1595,
25 de septiembre
de 1595.
9. ↑ Wikisource en
latín contiene una
copia de De
architectura.
10. ↑ Herrera
consiguió aquí su
415. deseo de resaltar la
parte central donde
va la puerta, cosa
que no había
podido realizar en
la fachada del patio
de los Reyes en El
Escorial.
11. ↑ Aun hoy (año
2008) sigue
habiendo bastante
416. desnivel a pesar de
las obras de relleno
que se fueron
haciendo en
distintas ocasiones.
12. ↑ Diego de Praves
estaba en Valladolid
por esas fechas
ejecutando otros
proyectos de
Herrera encargados
417. por el
Ayuntamiento:
Consistorio,
Carnicería,
Panadería y
Fuentes.
13. ↑ Wilkinson-
Zerner; Juan de
Herrera, arquitecto
de Felipe II, pág. 5,
122 y 124
418. 14. ↑ Ortega del Río,
José Miguel (2000),
El siglo en que
cambió la ciudad,
págs 193-203,
Ayuntamiento de
Valladolid. ISBN
84-95389-10-X.
15. ↑ Bongäser,
Barbara (1997):
«Arquitectura
419. barroca en España y
Portugal, pág 92»,
en El Barroco.
Colonia:Könemann,
1997. ISBN
3-89508-920-6
16. ↑ GARCÍA-
VALLADOLID,
Casimiro G.
Valladolid,
420. recuerdos y
grandezas.
17. ↑ Estudios
histórico-artísticos
relativos
principalmente a
Valladolid, página
326 y siguientes.
18. ↑ LÓPEZ-CALO,
José: La Música en
la Catedral de
421. Valladolid.
Ayuntamiento de
Valladolid y Caja
España, Valladolid,
2008. ISBN
978-84-96864-02-3.
19. ↑ Hoy (2008) están
custodiadas en el
museo.
20. ↑ Jesús Urrea A
new Date for the
422. Choir Screen from
Valladolid.
Metropolitan
Museum Journal
13, New Cork, 1979,
página 143.
21. ↑ A. Gallego de
Miguel, Rejería
castellana. Segovia.
Salamanca 1974,
página 144.
423. 22. ↑ Fue dos veces
alcalde de Elgoibar;
fue veedor y
tasador de oficio.
Nieto político y
heredero del taller
de Bartolomé de
Elorza (posible
autor de las rejas de
la nave de la
Epístola de la
424. catedral de
Valladolid.
23. ↑ J. Sánchez
Herrero,
Alfabetización y
catequesis en
España y América
durante el siglo XVI.
24. ↑ Reales Cédulas
de 1631 y 1632.
425. Bibliografía
consultada [editar]
• BUSTAMANTE
GARCÍA, Agustín. La
arquitectura
clasicista del foco
vallisoletano.
Institución Cultural
Simancas,
Valladolid, 1983.
426. ISBN 84-600-2926-3
• CANESI ACEVEDO,
Manuel. Historia de
Valladolid (1750).
Libro primero, tomo
I. Edición facsímil
del Grupo Pinciano,
1997. ISBN
84-87739-60-1
(página -241-)
• CANESI ACEVEDO,
427. Manuel. Historia de
Valladolid (1750).
Libro quinto, tomo
III. Edición facsímil
del Grupo Pinciano,
1997. ISBN
84-87739-62-8
(página -335-)
• G. GARCÍA-
VALLADOLID,
Casimiro.
428. Valladolid,
recuerdos y
grandezas. Tomo I.
Edita Grupo
Pinciano. Edición
facsímil. ISBN
84-500-4066-3
• CHUECA GOITIA,
Fernando. La
Catedral de
Valladolid. Instituto
429. Juan de Herrera,
Escuela Técnica
Superior de
Arquitectura de
Madrid, 1998. ISBN
84-89977-57-7
• GALLEGO DE
MIGUEL, Amelia.
Rejería castellana.
Valladolid. Edita
Institución Cultural
430. Simancas, 1982.
ISBN 84-500-5119-3
• MARTÍ Y MONSÓ,
José. Estudios
histórico-artísticos
relativos
principalmente a
Valladolid. Basados
en la investigación
de diversos
archivos. Primera