1. VENCIENDO GIGANTES
Por Alexander Dorado Albán

2. Introducción
Esta es una de las historias épicas mas
apasionantes de las escrituras; para
muchos resulta inverosímil que un
niño se enfrentara a un hombre, que
en un pastor encarara a un gladiador,
que un jovencito con una honda y
piedra se enfrentara a un mercenario
armado para la batalla. Lo que
muchos ignoran, son los motivos que
llevaron a ese niño a enfrentar a ese
gigante, y no solo a enfrentarlo sino a
vencerlo, y en consecuencia a darle
una gran victoria a su pueblo.

3. 1. Luchar por el honor,
defender aquello que se ama
a. Hacer respetar el nombre de Dios y el de una familia
b. No es cuestión de orgullo, sino de honor
c. Nadie tiene derecho a menospreciar a Dios ni a su
ejercito
d. Cuidar nuestro buen nombre
e. En minutos se puede perder lo que ha costado toda
una vida

4. 2. Ignorar las provocaciones,
insultos y amenazas
(guerra sicológica)
a. Algunos se especializan en difamar y blasfemar
b. Aunque es mero hablar, es mejor callarlos
c. En el mundo, se difama como estrategia para debilitar,
para hacer perder credibilidad
d. Es mas fácil derrotar a un ejercito atemorizado,
acobardado, intimidado
e. El desprestigio se usa como arma de ataque
f. Lo mas grave es cuando los de adentro, creen lo que
dicen los de afuera.

5. 3. Usar las herramientas
conocidas, destrezas y
habilidades propias
a. No se trata de improvisar o experimentar con algo
desconocido
b. Hacer uso de las fortalezas y herramientas propias
c. David conocía a su enemigo; su estatura y peso era su
principal debilidad (aparatoso)
d. El podía sacar ventaja de esto
e. David sabia en que se había adiestrado, cuales eran sus
armas
f. Entrar en un terreno inexplorado puede significar una
muerte súbita

6. 4. Entrar en la arena de la
batalla y encarar al enemigo
a. Ir a la línea de batalla, es la única manera de vencerlo
b. El enemigo se siente menos fuerte cuando lo
encaramos, su jerarquía mengua
c. El miedo no debe ser un vencedor sino un vencido
d. El gigante se ve mas grande de cerca, su voz de oye
mas fuerte, pero esto nos da la distancia de poder
atacarlo con nuestras armas
e. “Los toros no se vencen desde la barrera”, hay que
tomarlos por sus cuernos.

7. 5. Ir con la seguridad de
contar con la bendición y el
respaldo de Dios
a. David tenia la certeza que Dios estaba con el y no con
el enemigo
b. Su confianza no estaba en su habilidad sino en la
bendición de Dios
c. Sabia que el era un instrumento en manos de Dios
d. Estaba seguro que Dios le daría la victoria
e. No podía dejar todo en manos a Dios, el tenia que
tener un excelente desempeño
f. El no presumía de “héroe”, era un instrumento.

8. 6. Asestar en la primera
oportunidad dando en el
blanco
a. No tenia una segunda oportunidad, no podía fallar
b. La herida tenia que ser mortal, sino el gigante tomaría
ventaja
c. El factor sorpresa era algo determinante
d. El debía combinar sus movimientos rápidos de gacela con
una afinada puntería
e. Debía elegir muy bien su blanco
f. Su estrategia constaba de tres acciones tácticas: aturdirlo,
tumbarlo, cortarle la cabeza

9. 7. Asegurarse de terminar el
trabajo sin dejar cabo sueltos
ni dar nada por hecho
a. Privarlo no era suficiente, había que terminar vencerlo
definitivamente
b. Uso la espada del enemigo, sus propios argumentos
para terminar con el
c. El sabia que la moral del ejercito de Dios estaba en
juego
d. Vencer al gigante solo era el primer paso, el siguiente
era ir por el ejercito de filisteos, en esto no hay tregua
e. A partir de ese día, su vida cambiaria, era su matricula
en la escuela de los que vencen gigantes

10. Aplicación
El mundo, es el terreno en el cual nos movemos, y allí
encontraremos gigantes que vencer; como lideres y
empresarios, son muchas las batallas que tendremos
que librar, pero en todas ellas, lo importante es saber
con quien nos hemos asociado para la batalla; con
aquel que no solo adiestra las manos para la guerra
sino que nos da la seguridad de la victoria. Contamos
con su bendición, pero el requiere de nuestra
valentía, habilidad y desempeño. El método de Dios
somos los hombres, siempre que seamos dispuestos a
creerle y dejarnos usar por el.