7 razones para NO emprender y sólo una para sí hacerlo
Mal empleado
1.
2. Usted encontrara su al mal
empleado
Para tratar de poner nuestro granito de arena a la hora de
encontrar a un mal empleado les proponemos una serie de rasgos
que definen su personalidad. Si usted cuenta con alguno que
responda afirmativamente a la mayoría de estas cuestiones que a
continuación le planteamos podrá estar más seguro de sus
sospechas.
3. SE QUEJA DE MANERA HABITUAL.
Los empleados que no están comprometidos con un
proyecto de negocio suelen mostrarse insatisfechos casi
de manera constante. Pero eso no quiere decir que sean
malos, quizá no se sienten parte de la empresa.
Para solucionar este problema trate de
encontrar el problema que se esconde tras
esa actitud de queja y protesta casi
constante.
4. LA EXCUSA POR BANDERA.
Los malos empleados nunca suelen asumir la responsabilidad
de los errores. Siempre encuentran una excusa, por muy
banal que sea, que decir ante cualquier inconveniente. Esto
puede dañar la moral del equipo ya que el trabajo de todos se
resentirá ante este tipo de situaciones.
5. FALTA DE ENTUSIASMO.
Imagine que usted tiene una buena noticia que va a compartir con
su plantilla. Lo hace y resulta que hay uno al que no se le ve feliz
con la situación sino que muestra una expresión de tristeza y
dejadez inusitada. Éste es sin duda otro rasgo del trabajador poco
eficiente.
6. JAMÁS AYUDA A LOS COMPAÑEROS.
En las empresas bien organizadas lo normal es que cada persona
sepa lo que tiene que hacer. Pero también es habitual que los picos
de trabajo originen que algún trabajador se sienta desbordado y no
sea capaz de dar a basto con la tarea. Normalmente a esa persona se
le suele ayudar. Si eso es algo que nunca realiza una persona en
concreto estará ante otra muestra inequívoca de desafecto con el
equipo y con el negocio.
7. MENTIROSOS.
Por alguna razón desconocida los empleados desvinculados con
el proyectos empresarial no tienen ningún inconveniente en
mentir ante cualquier situación. Tenga cuidado con esta actitud.
La mezcla de mentiras y excusas suponen un explosivo cóctel
que puede ser dañino para el negocio.
8. SIEMPRE CON RETRASOS.
Es imposible que una persona sea puntual el 100% de
las veces y siempre sea capaz de terminar su tarea a
tiempo. Pero si esto se convierte en habitual estamos
ante otra actitud negativa que afectará a la plantilla. De
extenderse estaríamos ante un problema que sería
muy complicado de atajar. Por tanto, no lo dude, ante
las irresponsabilidades continuas toca actuar con
contundencia.
9. DISTRAÍDO.
Un empleado sin ningún interés en la empresa suele tener la cabeza
en cualquier sitio menos en la oficina. Por tanto, la distracción es
otra muestra más de que nos encontramos ante un mal ejemplo
para el resto de compañeros.