3. 27 de noviembre del 2011
La historia cuenta que hace 7 años
la casa destinada a las pequeñas
princesas de la Reina se
quemó, quemando con ello el
cuadro coronado de nuestra
Mater, historia heredada de
antiguas generaciones. Hoy
deseamos nuevamente
coronarla, haciendo presente su
trono en nuestra casa.
4. “Acepten Ustedes la pequeña
corona... No solamente ha de ser
obsequio, sino también una
exhortación de merecerla cada día
de nuevo, de extender cada día las
manos hacia las estrellas. Pero
Uds. también tienen que tratar de
poder llevar esta corona hasta el
fin de su vida. No solamente como
don, sino como gran misión...
Tenemos que tratar de que la
Inmaculada tenga pleno sentido
5. Debemos ponernos nuestro “traje
de fiesta”, un corazón dispuesto y
abierto a su reinado. Hoy es una
noche muy especial, llena de
gracias y dones del cielo, porque
la historia de Schoenstatt se ha
forjado con la entrega de
corazones heroicos, dispuestos a
construir el reino y hoy, nuestra
Mater las llama a ustedes a ser
parte de este Reino de la
Inmaculada
6. Hemos recorrido un camino juntas. Este
representa lo que vivimos como
azucenas de Belén en nuestros
grupos, jornadas y encuentros de
Juventud femenina. Hoy y siempre
estamos ante el Padre. El corazón del
Padre fue consagrado por entero a la
Mater, aquí Ella reina como Inmaculada
desde su niñez y de su mano queremos
recibir la corona que regalaremos a
nuestra querida Reina.
Las invito, Azucenas de Belén, para ser
7. El Padre nos pregunta:
Azucena de Belén para La
estás dispuesta a lleva
Como hijas responde
Sí, estoy dispuesta…
8. Míranos Reina ante Ti… Reina en tus
hijas, acepta la corona que te
ofrecemos día a día. Y corónanos