El obispo ofrece orientaciones espirituales para el año pastoral 2015, invitando a la oración, el discernimiento espiritual y a ser evangelizadores con el Espíritu Santo. Pide evaluar el Plan Pastoral diocesano reconociendo los dones de Dios y los frutos de su siembra, así como los desafíos que enfrenta la Iglesia, para seguir sembrando el Evangelio con la guía del Espíritu.