2. Situación Geográfica
Entre las estribaciones de la Sierra de Gredos y
la ciudad de Plasencia se encuentra la comarca
septentrional de "El Valle del Jerte", por la cual
fluye el río Jerte, afluente del río Tajo. Enclavado
entre los montes de Tras la Sierra y la Sierra de
Tormantos. Estas dos sierras superan los 1000
metros de altitud, en la parte más al norte del
Valle se encuentra el pico más alto de
Extremadura, el Calvitero, con 2.425 metros de
altitud.
El Valle del Jerte ha sido históricamente el paso
natural de Extremadura a Castilla.
3. El nombre le viene del árabe Xerit, que puede
significar angosto o cristalino. El Jerte es ambas
cosas a la vez. Nacido a 900 metros, en los altos de
Tornavacas, desde donde se divisa el valle en
panorámica, cuando pasa por Plasencia, 50
kilómetros después, ya se encuentra a unos 345
metros. En su breve trayecto, recoge las aguas de los
arroyos y fuentes que convierten este pequeño valle
cacereño en un jardín botánico.
El valle está especialmente indicado para quien goza
descubriendo por sí mismo las sorpresas del
paisaje: el salto de la trucha que remonta la
corriente, la seta jugosa que esconde el robledal, el
postrer destello púrpura que arranca el sol a los
neveros, vagar por umbrosos senderos que
serpentean la montaña, dejarse caer junto al amial
acunado por los cálidos mugidos de las vacas, mojar
el cuerpo en las chorreras espumosas de cualquier
garganta.
4. Un río que oferta numerosos y acogedores charcos donde
ejercitar la natación. Al igual que las plácidas gargantas:
Becedas.
Los Papúos.
Los Buitres.
Las Nogaleas.
De San Pedro.
La Puria.
De Marta.
Las Rayuelas.
Los Sotillos.
Tornadero.
La Serrá.
San Martín.
Del Bonal.
Los Infiernos.
Bajo sus aguas pueden contemplarse buenos ejemplares de
truchas del país, las de pintas rojas, y hasta sorprender a la
lúcida nutria buceando en los ensotados recodos
5.
6. Geología y relieve
La roca predominante es el granito, formada por un
gran batolito correspondiente al metamorfismo de
hace 350-200 millones de años, en la orogenia
hercínica. Hace unos 40 millones de años y a lo largo
de la orogenia alpina se produjeron otro tipo de
ajustes en las diversas placas, cambiando el relieve
de forma muy significativa. El borde S del Sistema
Central NE, es una falla que une rocas cristalinas del
sistema montañoso con los sedimentos terciarios de
la depresión del Tajo. Los puertos que se originaron
por el movimiento de los diversos bloques son entre
otros: Tornavacas, Honduras, Rabanillo, San
Gamello, etc. Las fracturas delimitan los bloques que,
al hundirse, originaron fosas como los vecinos valles
de Tiétar, Tormes, etc.
7. El basculamiento hacia el N elevó bloques y
produjo en el Valle del Jerte una curiosa
desviación de montañas, que toman dirección N-
SW. Posteriormente las formas del relieve han
recibido retoques propios de la influencia del
glaciarismo, en las cumbres y de las aguas de
escorrentía y procesos de hielo-deshielo en las
partes más bajas. Los glaciares en el S de
Gredos tuvieron escasa importancia y, salvo en
las cumbres, no se ha registrado la acción de la
cuña del hielo. Los cursos de agua que
descienden de las cimas, han contribuido al
modelado de las laderas, formando profundas
gargantas, que otorgan al valle su especial
configuración.
8. Suelos
En el piso medio nos encontramos con tierras
pardas profundas. Constituidas por suelos
arenosos silíceos, que se lixivian con facilidad
con el uso agrícola. En el piso inferior nos
encontramos con suelos pardos francos
profundos, silíceos arenosos y arcillosos.
9. Red hidrográfica
La red hidrográfica, tributaria casi por entero del
río Jerte, se articula sin excesiva complejidad,
facilitado por la simplicidad del relieve, en un
valle típico en forma de V, conformando una red
fluvial de rápida evacuación. Una parte de la
comarca pertenece a la cuenca vertiente del río
Tiétar. El río Jerte discurre a lo largo de unos 70
km aproximadamente. Desde su nacimiento en la
cabecera vallense, va recogiendo las corrientes
que le aportan gargantas importantes .