El documento presenta dos tendencias futuras: 1) El internet se usará principalmente para el comercio electrónico al detalle, donde los usuarios podrán comprar cualquier producto a través de catálogos y pagos electrónicos. 2) La tecnología permitirá oficinas virtuales para personas que necesitan trabajar en diferentes lugares, lo que facilitará la comunicación global a través de correo electrónico y videoconferencias.