1. 52 EL MUNDO. MARTES 10 DE ENERO DE 2012
EM2 / MADRID / OCIO
Un día a bordo
7.45 horas. Los bibliobuses se
limpian por dentro y por fuera.
8.30 horas. En el depósito
bibliográfico se preparan los títulos.
10.00 horas. Los conductores
ponen a punto sus vehículos.
11.00 horas. Salen los buses.
11.45 horas. El bibliobús 11 llega
a la calle de Minerva, en Vicálvaro. Se
sube Cristina, la primera lectora.
14.30 horas. Es un día tranquilo.
Las vacaciones de Navidad propician
que los lectores vengan más
separados y los niños, al ser un día
de fiesta, apenas vienen. Es hora de
reponer fuerzas con un almuerzo.
15.45 horas. De vuelta al trabajo.
Algunos niños con sus padres,
adultos en busca de novedades
literarias...
17.30 horas. Hora de volver a
casa. Los bibliobuses más alejados
del centro ya están en camino.
18.30 horas. Se acabó por hoy.
Es tiempo de ordenar un poco el
vehículo y apagar todos los
sistemas. Mañana, más y mejor en
Moratalaz y Puente de Vallecas.
El bibliobús de la ruta número 11, aparcado en la calle de Minerva, en Vicálvaro. / ALBERTO CUÉLLAR
Aniversario / En la carretera desde 1986 intenta localizar un título que Cris-
tina aún no haya devorado.
25 años de cultura
Lo contrario le sucede a Irene, de
siete años, que se encamina rápida-
mente a la sección de películas in-
fantiles. A cambio, Paula, su madre,
‘sobre ruedas’ le ayuda a elegir un libro. «La niña
lee mucho más desde que hay bi-
bliobús en el barrio. Además, mi
marido también es socio y ella in-
tenta imitarle cuando ve a su padre
EM2 acompaña a uno de los 13 leyendo», ilustra la mamá.
Lorenzo es el tercer cliente de la
bibliobuses de la Comunidad de Madrid, jornada. «Venía a preguntar cómo
que celebran sus ‘bodas de plata’ hacerme socio», es su carta de pre-
sentación. En menos de dos minu-
tos, el joven forma parte ya del más
CARMELO PÉREZ pera de ser rescatados por los fun- amplio club de lectores de Madrid,
Más de 9.000 días. Los bibliobuses cionarios cuando un usuario los so- con un carné que le abre las puertas
de la Comunidad de Madrid acu- licita. Además de ellos, cada vehí- del sistema bibliotecario de la Comu-
mulan ya sobre sus metálicas es- culo porta en torno a 3.500 títulos nidad: la Biblioteca Regional, la red
paldas más de 216.000 horas de «que se van actualizando año tras de bibliotecas públicas —integrada
trabajo desde que comenzaron a año», explica la responsable. «Pero por 18 bibliotecas ubicadas en los
acercar la cultura a todos los rinco- si un lector pide un ejemplar que distintos distritos de la capital—, los
nes de la Comunidad en 1986. En no forma parte del fondo que lleva- 13 bibliobuses, las 125 bibliotecas
esa tarea siguen a día de hoy, re- mos en el coche, se lo buscamos y municipales con convenio de colabo-
cién celebradas sus bodas de plata lo entregamos en nuestra próxima ración, los 80 centros de lectura que
en la carretera. visita a su barrio o su pueblo», ase- se encuentran en poblaciones meno-
Mucho han cambiado las cosas guran los responsables. res de 5.000 habitantes, el Servicio
desde aquella primera mañana: José Luis Maraña lleva 19 años de Telebiblioteca, el de Bibliometro
nuevos vehículos, sistemas infor- subido sobre las cuatro ruedas de y el de Préstamo Colectivo.
máticos de gestión, nuevos soportes estas bibliotecas rodantes. «Lo que Finalmente, el recién estrenado
además del tradicional libro de pa- más valoro es la cercanía que llega- socio se lleva Entre la bruma, de Si-
pel (películas en DVD, CD de músi- mos a tener con los lectores. Se monetta Agnello Hornby. «Me han
ca, audiolibros, juegos, CD-ROM...). crean relaciones muy especiales. hablado genial de él. Me llama la
«Pero la tarea es la misma. Y la ilu- Algunos se suben y nos dicen: atención que lo tengan, se nota que
sión con la que salimos cada día ‘Búscame algo de mi estilo, tú ya están al día», sentencia el lector
también», explica Sagrario Fernán- sabes lo que me gusta’», explica el mientras el bibliotecario le da ins-
dez, responsable del servicio. funcionario. trucciones para que, si lo desea,
La jornada empieza muy tem- La primera lectora del día de gestione sus préstamos y sus devo-
prano en las instalaciones que alo- hoy es Cristina Jiménez, una an- luciones con el novedoso sistema
jan los 13 vehículos que componen ciana de expresión sobria pero cor- de radiofrecuencia. «Como en un
la flota. El responsable de conduc- dial. A sus 67 años, ya le resulta di- autoservicio, sin necesidad de pasar
tores, Juan Pulido, inicia poco des- fícil encontrar una lectura novedo- por caja», bromean ambos.
pués de las siete de la mañana la sa. «Me llevo tres para mí y tres Avanza la tarde y el bibliobús nú-
inspección de cada autobús, dando para los sobrinos. Eso para una se- mero 11 leva anclas con destino al
el visto bueno para su puesta en mana o 15 días, según», refiere. garaje. Doce unidades van ocupan-
marcha. «Ahora no sólo son coches «Me encanta leer, pero no tengo di- do sus puestos mientras sus biblio-
cómodos, sino que cumplen con las nero para comprar libros. Si no tecarios terminan de ordenar las es-
más exigentes normas de seguri- fuera por el bibliobús no sé qué se- tanterías. El coche que viene de
dad», insiste con el orgullo de ría de mí», asegura con cierta me- Montejo de la Sierra se retrasa. Es
quien conoce casi palmo a palmo lancolía, esa que envuelve a quie- normal, tiene más de dos horas de
cada uno de los vehículos. nes han hecho de la lectura el me- ALBERTO CUÉLLAR trayecto desde su destino. Pero lle-
A pocos metros de las cocheras, jor remedio para despistar la UN ENGRANAJE PERFECTO gará, como todos, al lugar donde
los bibliotecarios se ocupan ya de soledad y el cansancio. Los bibliobuses cuentan con un depósito de más de 200.000 títulos [foto su- duermen las historias que forman
rescatar de sus estanterías algunos «Es una de nuestras mejoras lec- perior], que crece cada año. Además, cada vehículo porta 3.500 documen- parte de los libros. Para descansar y
de los títulos que les han pedido los toras. Siempre está pendiente de tos, entre libros DVD, CD-ROM y juegos [imagen del centro]. Cada lector salir de nuevo mañana al encuentro
lectores. Más de 200.000 ejempla- las novedades en novela y en His- puede entregar y llevarse sus libros sin necesidad de ser atendido personal- con los lectores. Y así todos los días
res duermen en el depósito a la es- toria», apostilla Maraña, mientras mente, gracias un sistema informático de radiofrecuencia [foto inferior]. desde hace 25 años.