Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos como Peter Duesberg cuestionan esta hipótesis, señalando que el virus está presente en muy pocas células T y que los retrovirus no matan células. Además, el SIDA aparece años después de que el virus haya sido neutralizado. Aunque la mayoría de virólogos aceptan al VIH como causa del SIDA, la evidencia epidemiológica es discutida por científicos disidentes.
Este documento discute la hipótesis de que el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica suficiente de que el VIH sea el agente causal. El documento también analiza las correlaciones entre el VIH y el SIDA y las críticas a la evidencia epidemiológica utilizada para apoyar la teoría viral.
El documento discute varios puntos sobre el VIH y el SIDA. Primero, señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, a pesar de las condiciones insalubres. Luego, cuestiona las estadísticas oficiales sobre el SIDA en África y los métodos de diagnóstico. Finalmente, resume las presentaciones de varios expertos en un congreso sobre el VIH/SIDA que criticaron la hipótesis dominante sobre la causalidad del VIH.
El documento discute tres puntos principales:
1) Que el VIH no cumple con los postulados de Koch para ser considerado el agente causante del SIDA. No siempre está presente en pacientes con SIDA ni puede provocar la enfermedad cuando se inocula en otros animales.
2) Que factores ambientales como otras infecciones y tóxicos, así como factores del huésped, influyen en la progresión de la enfermedad al activar las células y causar inmunodepresión.
3) Que aunque el VIH es necesario, no
Las enfermedades reumáticas son trastornos crónicos que afectan múltiples sistemas y se caracterizan por períodos de exacerbación y remisión. Las enfermedades autoinmunes representan un impacto importante en la salud y se producen cuando el sistema inmune ataca tejidos u órganos sanos. Los anticuerpos antinucleares son marcadores comunes de estas enfermedades y pueden detectarse mediante inmunofluorescencia, aunque su presencia no siempre indica una enfermedad y su patrón no es especí
La enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (ECJ) forma
parte de un grupo de enfermedades conocidas como
encefalopatías espongiformes transmisibles (EET)
o enfermedades priónicas
Este documento resume las presentaciones de varios expertos en una conferencia sobre el VIH y el SIDA. Algunos cuestionan la teoría predominante de que el VIH causa el SIDA, señalando que no hay pruebas concluyentes. Otros defienden la teoría del VIH, pero sus argumentos son criticados. También se discute el papel de las drogas y el tratamiento con AZT en el desarrollo del SIDA.
Por Lucibel Crespo.
Conferencia presentada en la Reunion mensual de la sociedad Venezolana de Dermatologia. Instituto de Biomedicina. Escuela de Medicina Jose Maria Vargas
Publicado en PIEL-l.org Edicion 261
El documento resume varias noticias de salud pública de Argentina, Latinoamérica y el mundo. Reporta un brote de infecciones por Clostridium difficile en un hospital costarricense que ha causado varias muertes, la detección de una peligrosa bacteria cianobacteria en el Lago de Atitlán de Guatemala que podría afectar la salud de los residentes, y un brote infeccioso en El Salvador donde pacientes están contraiendo influenza A/H1N1 y dengue al mismo tiempo.
Este documento discute la hipótesis de que el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica suficiente de que el VIH sea el agente causal. El documento también analiza las correlaciones entre el VIH y el SIDA y las críticas a la evidencia epidemiológica utilizada para apoyar la teoría viral.
El documento discute varios puntos sobre el VIH y el SIDA. Primero, señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, a pesar de las condiciones insalubres. Luego, cuestiona las estadísticas oficiales sobre el SIDA en África y los métodos de diagnóstico. Finalmente, resume las presentaciones de varios expertos en un congreso sobre el VIH/SIDA que criticaron la hipótesis dominante sobre la causalidad del VIH.
El documento discute tres puntos principales:
1) Que el VIH no cumple con los postulados de Koch para ser considerado el agente causante del SIDA. No siempre está presente en pacientes con SIDA ni puede provocar la enfermedad cuando se inocula en otros animales.
2) Que factores ambientales como otras infecciones y tóxicos, así como factores del huésped, influyen en la progresión de la enfermedad al activar las células y causar inmunodepresión.
3) Que aunque el VIH es necesario, no
Las enfermedades reumáticas son trastornos crónicos que afectan múltiples sistemas y se caracterizan por períodos de exacerbación y remisión. Las enfermedades autoinmunes representan un impacto importante en la salud y se producen cuando el sistema inmune ataca tejidos u órganos sanos. Los anticuerpos antinucleares son marcadores comunes de estas enfermedades y pueden detectarse mediante inmunofluorescencia, aunque su presencia no siempre indica una enfermedad y su patrón no es especí
La enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (ECJ) forma
parte de un grupo de enfermedades conocidas como
encefalopatías espongiformes transmisibles (EET)
o enfermedades priónicas
Este documento resume las presentaciones de varios expertos en una conferencia sobre el VIH y el SIDA. Algunos cuestionan la teoría predominante de que el VIH causa el SIDA, señalando que no hay pruebas concluyentes. Otros defienden la teoría del VIH, pero sus argumentos son criticados. También se discute el papel de las drogas y el tratamiento con AZT en el desarrollo del SIDA.
Por Lucibel Crespo.
Conferencia presentada en la Reunion mensual de la sociedad Venezolana de Dermatologia. Instituto de Biomedicina. Escuela de Medicina Jose Maria Vargas
Publicado en PIEL-l.org Edicion 261
El documento resume varias noticias de salud pública de Argentina, Latinoamérica y el mundo. Reporta un brote de infecciones por Clostridium difficile en un hospital costarricense que ha causado varias muertes, la detección de una peligrosa bacteria cianobacteria en el Lago de Atitlán de Guatemala que podría afectar la salud de los residentes, y un brote infeccioso en El Salvador donde pacientes están contraiendo influenza A/H1N1 y dengue al mismo tiempo.
Este documento discute la hipótesis de que el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica suficiente de que el VIH sea el agente causal. El documento también analiza las correlaciones entre el VIH y el SIDA y las críticas a la evidencia epidemiológica utilizada para apoyar la teoría viral.
Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica de que el VIH sea el agente causal. El documento luego describe la posición oficial de que existe una correlación entre el VIH y el SIDA, aunque algunos investigadores disienten y argumentan que esta correlación es débil. Finalmente, se mencionan varios científicos prominentes que han expresado escepticismo sobre la teoría del VIH-SIDA.
Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica de que el VIH sea el agente causal. El documento luego describe la historia de cómo se identificó al VIH y cómo se estableció la teoría predominante, y resume las críticas de científicos disidentes como Duesberg que ponen en duda la evidencia epidemiológica de la relación entre VIH y SIDA.
Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica de que el VIH sea el agente causal. El documento luego describe la posición oficial de que existe una correlación entre el VIH y el SIDA, aunque algunos investigadores disienten y argumentan que esta correlación es débil. Finalmente, se mencionan varios científicos prominentes que han expresado escepticismo sobre la teoría del VIH-SIDA.
El documento discute la conferencia de 1997 en Bucaramanga (Colombia) sobre el SIDA. Varios expertos cuestionaron la hipótesis predominante de que el VIH causa el SIDA, señalando que las pruebas de VIH no son concluyentes y que factores como las drogas podrían ser la verdadera causa. La conferencia contó con el apoyo de varias universidades colombianas a pesar de la oposición de algunos funcionarios de salud.
El documento discute la conferencia de 1997 en Bucaramanga (Colombia) sobre el SIDA. Varios expertos cuestionaron la hipótesis predominante de que el VIH causa el SIDA, señalando que las pruebas de VIH son inespecíficas y que factores como las drogas podrían causar la enfermedad. Las autoridades colombianas permitieron el evento aunque pidieron cautela en la transmisión de ideas alternativas. La conferencia permitió un debate entre puntos de vista oficiales y disidentes sobre las causas del SIDA
El documento discute varios puntos sobre el VIH y el SIDA. Primero, señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, a pesar de las condiciones insalubres. Luego, cuestiona las estadísticas oficiales sobre el VIH/SIDA en África y los métodos de diagnóstico. Finalmente, resume las presentaciones de varios expertos en un congreso sobre el VIH/SIDA que cuestionaron la hipótesis dominante sobre la causalidad del VIH.
El documento discute varios puntos sobre el VIH/SIDA. Primero, señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, a pesar de las condiciones insalubres. Luego, cuestiona las estadísticas oficiales sobre VIH/SIDA en África y los métodos de diagnóstico. Finalmente, resume las presentaciones de varios expertos en un simposio sobre VIH/SIDA que cuestionaron la hipótesis dominante sobre la causalidad del VIH.
El documento discute la controversia sobre la causalidad del VIH/SIDA. Señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, y que los diagnósticos de SIDA en África a menudo se basan solo en síntomas comunes como tos y pérdida de peso. Varios expertos en diferentes conferencias cuestionaron la validez de las pruebas de VIH y la atribución directa del VIH como causa del SIDA.
Este documento resume las presentaciones de varios expertos en un simposio sobre el SIDA en Colombia en 1997. Algunos cuestionaron la evidencia de que el VIH causa el SIDA, como Kary Mullis quien criticó el uso de la prueba PCR. Otros como Peter Duesberg argumentaron que las drogas y medicamentos, no el VIH, son los causantes del SIDA. Varios expertos concluyeron que las pruebas de VIH no son válidas para diagnosticar la infección.
1) Varios expertos discutieron diferentes teorías sobre las causas del SIDA, incluyendo el consumo de drogas, el tratamiento con AZT y la infección por VIH. 2) Algunos cuestionaron que el VIH cause inevitablemente el SIDA o que se transmita fácilmente, mientras que otros defendieron la evidencia de que el VIH causa el SIDA. 3) No hubo consenso entre los expertos sobre la causa del SIDA.
1) Varios expertos discutieron diferentes perspectivas sobre las causas del SIDA, incluyendo la hipótesis de que es causado por el consumo de drogas y el tratamiento con AZT en lugar del virus VIH. 2) Algunos cuestionaron que el VIH sea la única causa del SIDA y sugirieron que es una enfermedad multifactorial. 3) No hubo consenso sobre la evidencia de que el VIH cause el SIDA.
1) Varios expertos discutieron diferentes teorías sobre las causas del SIDA, incluyendo el papel del VIH, el consumo de drogas y el tratamiento con AZT. 2) Algunos cuestionaron la evidencia de que el VIH causa el SIDA y propusieron hipótesis alternativas donde el consumo prolongado de drogas y el tratamiento con AZT son las causas principales. 3) No hubo consenso entre los expertos sobre la causa del SIDA.
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba los hallazgos de un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios que encontraron asociaciones entre el consumo de drogas y el SIDA, pero que fueron ignorados o sus limitaciones no fueron reconocidas. El documento sugiere que existen dos posiciones válidas en el debate, pero solo se discuten a puerta cerrada sin incl
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Señala que la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También destaca que los principales científicos disidentes que proponían otras causas tenían dificultades para publicar en revistas líderes.
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba los hallazgos de un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios que encontraron asociaciones entre el consumo de drogas y el SIDA, pero que fueron ignorados o sus limitaciones no fueron reconocidas. El documento sugiere que el debate científico sobre las causas del SIDA ha estado sujeto a la censura
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Analiza un estudio que vinculaba el VIH pero no las drogas con el SIDA, el cual fue cuestionado por no considerar adecuadamente factores como el consumo prolongado de drogas y de AZT. También señala que los científicos disidentes que apoyan otras hipótesis tienen dificultades para publicar en revistas líderes.
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Señala que la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También destaca que los principales científicos disidentes que proponían otras causas tenían dificultades para publicar en revistas líderes.
Este documento discute la censura científica en relación al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios epidemiológicos que encontraron altas tasas de consumo de drogas y prostitución entre pacientes con SIDA en Belle Glade, Florida, pero que no consideraron al consumo de drogas como un factor de riesgo. El documento argumenta que existe censura de las pers
Este documento discute la censura científica en relación al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios epidemiológicos que encontraron altas tasas de consumo de drogas entre personas con SIDA, pero que no consideraron esto como un factor de riesgo. El documento argumenta que el debate científico sobre las causas del SIDA ha estado sujeto a censura y ha ocur
Este documento contiene información personal de Silvia Giménez Rodríguez incluyendo su nombre completo y número de identificación. También incluye páginas en blanco que no contienen texto.
Este documento parece ser una serie de páginas con el mismo nombre repetido, "Silvia Giménez Rodríguez", seguido de números de página consecutivos que van de 526 a 529.
Este documento discute la hipótesis de que el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica suficiente de que el VIH sea el agente causal. El documento también analiza las correlaciones entre el VIH y el SIDA y las críticas a la evidencia epidemiológica utilizada para apoyar la teoría viral.
Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica de que el VIH sea el agente causal. El documento luego describe la posición oficial de que existe una correlación entre el VIH y el SIDA, aunque algunos investigadores disienten y argumentan que esta correlación es débil. Finalmente, se mencionan varios científicos prominentes que han expresado escepticismo sobre la teoría del VIH-SIDA.
Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica de que el VIH sea el agente causal. El documento luego describe la historia de cómo se identificó al VIH y cómo se estableció la teoría predominante, y resume las críticas de científicos disidentes como Duesberg que ponen en duda la evidencia epidemiológica de la relación entre VIH y SIDA.
Este documento discute la hipótesis de que el VIH causa el SIDA. Algunos científicos han cuestionado esta teoría, argumentando que no hay evidencia empírica de que el VIH sea el agente causal. El documento luego describe la posición oficial de que existe una correlación entre el VIH y el SIDA, aunque algunos investigadores disienten y argumentan que esta correlación es débil. Finalmente, se mencionan varios científicos prominentes que han expresado escepticismo sobre la teoría del VIH-SIDA.
El documento discute la conferencia de 1997 en Bucaramanga (Colombia) sobre el SIDA. Varios expertos cuestionaron la hipótesis predominante de que el VIH causa el SIDA, señalando que las pruebas de VIH no son concluyentes y que factores como las drogas podrían ser la verdadera causa. La conferencia contó con el apoyo de varias universidades colombianas a pesar de la oposición de algunos funcionarios de salud.
El documento discute la conferencia de 1997 en Bucaramanga (Colombia) sobre el SIDA. Varios expertos cuestionaron la hipótesis predominante de que el VIH causa el SIDA, señalando que las pruebas de VIH son inespecíficas y que factores como las drogas podrían causar la enfermedad. Las autoridades colombianas permitieron el evento aunque pidieron cautela en la transmisión de ideas alternativas. La conferencia permitió un debate entre puntos de vista oficiales y disidentes sobre las causas del SIDA
El documento discute varios puntos sobre el VIH y el SIDA. Primero, señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, a pesar de las condiciones insalubres. Luego, cuestiona las estadísticas oficiales sobre el VIH/SIDA en África y los métodos de diagnóstico. Finalmente, resume las presentaciones de varios expertos en un congreso sobre el VIH/SIDA que cuestionaron la hipótesis dominante sobre la causalidad del VIH.
El documento discute varios puntos sobre el VIH/SIDA. Primero, señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, a pesar de las condiciones insalubres. Luego, cuestiona las estadísticas oficiales sobre VIH/SIDA en África y los métodos de diagnóstico. Finalmente, resume las presentaciones de varios expertos en un simposio sobre VIH/SIDA que cuestionaron la hipótesis dominante sobre la causalidad del VIH.
El documento discute la controversia sobre la causalidad del VIH/SIDA. Señala que los países donde se practica la mutilación genital femenina tienen menores tasas de VIH, y que los diagnósticos de SIDA en África a menudo se basan solo en síntomas comunes como tos y pérdida de peso. Varios expertos en diferentes conferencias cuestionaron la validez de las pruebas de VIH y la atribución directa del VIH como causa del SIDA.
Este documento resume las presentaciones de varios expertos en un simposio sobre el SIDA en Colombia en 1997. Algunos cuestionaron la evidencia de que el VIH causa el SIDA, como Kary Mullis quien criticó el uso de la prueba PCR. Otros como Peter Duesberg argumentaron que las drogas y medicamentos, no el VIH, son los causantes del SIDA. Varios expertos concluyeron que las pruebas de VIH no son válidas para diagnosticar la infección.
1) Varios expertos discutieron diferentes teorías sobre las causas del SIDA, incluyendo el consumo de drogas, el tratamiento con AZT y la infección por VIH. 2) Algunos cuestionaron que el VIH cause inevitablemente el SIDA o que se transmita fácilmente, mientras que otros defendieron la evidencia de que el VIH causa el SIDA. 3) No hubo consenso entre los expertos sobre la causa del SIDA.
1) Varios expertos discutieron diferentes perspectivas sobre las causas del SIDA, incluyendo la hipótesis de que es causado por el consumo de drogas y el tratamiento con AZT en lugar del virus VIH. 2) Algunos cuestionaron que el VIH sea la única causa del SIDA y sugirieron que es una enfermedad multifactorial. 3) No hubo consenso sobre la evidencia de que el VIH cause el SIDA.
1) Varios expertos discutieron diferentes teorías sobre las causas del SIDA, incluyendo el papel del VIH, el consumo de drogas y el tratamiento con AZT. 2) Algunos cuestionaron la evidencia de que el VIH causa el SIDA y propusieron hipótesis alternativas donde el consumo prolongado de drogas y el tratamiento con AZT son las causas principales. 3) No hubo consenso entre los expertos sobre la causa del SIDA.
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba los hallazgos de un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios que encontraron asociaciones entre el consumo de drogas y el SIDA, pero que fueron ignorados o sus limitaciones no fueron reconocidas. El documento sugiere que existen dos posiciones válidas en el debate, pero solo se discuten a puerta cerrada sin incl
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Señala que la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También destaca que los principales científicos disidentes que proponían otras causas tenían dificultades para publicar en revistas líderes.
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba los hallazgos de un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios que encontraron asociaciones entre el consumo de drogas y el SIDA, pero que fueron ignorados o sus limitaciones no fueron reconocidas. El documento sugiere que el debate científico sobre las causas del SIDA ha estado sujeto a la censura
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Analiza un estudio que vinculaba el VIH pero no las drogas con el SIDA, el cual fue cuestionado por no considerar adecuadamente factores como el consumo prolongado de drogas y de AZT. También señala que los científicos disidentes que apoyan otras hipótesis tienen dificultades para publicar en revistas líderes.
Este documento discute la censura científica en torno al debate sobre las causas del SIDA. Señala que la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También destaca que los principales científicos disidentes que proponían otras causas tenían dificultades para publicar en revistas líderes.
Este documento discute la censura científica en relación al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios epidemiológicos que encontraron altas tasas de consumo de drogas y prostitución entre pacientes con SIDA en Belle Glade, Florida, pero que no consideraron al consumo de drogas como un factor de riesgo. El documento argumenta que existe censura de las pers
Este documento discute la censura científica en relación al debate sobre las causas del SIDA. Describe cómo la revista Nature se negó a publicar una réplica de Duesberg que cuestionaba un estudio que vinculaba el VIH con el SIDA. También analiza varios estudios epidemiológicos que encontraron altas tasas de consumo de drogas entre personas con SIDA, pero que no consideraron esto como un factor de riesgo. El documento argumenta que el debate científico sobre las causas del SIDA ha estado sujeto a censura y ha ocur
Este documento contiene información personal de Silvia Giménez Rodríguez incluyendo su nombre completo y número de identificación. También incluye páginas en blanco que no contienen texto.
Este documento parece ser una serie de páginas con el mismo nombre repetido, "Silvia Giménez Rodríguez", seguido de números de página consecutivos que van de 526 a 529.
Este documento parece ser una serie de páginas con el mismo nombre repetido, "Silvia Giménez Rodríguez", seguido de números de página consecutivos que van de 522 a 525.
Este documento parece ser una serie de páginas con el mismo nombre repetido, "Silvia Giménez Rodríguez", seguido de números de página consecutivos que van de 518 a 521, indicando posiblemente un libro o documento más largo del que estas son sólo algunas páginas.
Este documento parece ser parte de un libro o revista, ya que contiene el nombre de la autora Silvia Giménez Rodríguez seguido de números de páginas consecutivos, indicando que es un texto continuo a lo largo de varias páginas.
Este documento parece contener las páginas 498 a 501 de un trabajo escrito por Silvia Giménez Rodríguez. Incluye cuatro páginas consecutivas con su nombre en la cabecera y las páginas numeradas de forma secuencial.
Este documento parece ser un conjunto de páginas escritas por Silvia Giménez Rodríguez. No hay información adicional sobre el contenido de las páginas aparte del nombre de la autora y los números de página 486 a 489.
Este documento parece ser una serie de páginas escritas por Silvia Giménez Rodríguez. No hay información adicional sobre el contenido de las páginas aparte del nombre de la autora y los números de página.
Este documento parece ser un reporte o informe de varias páginas que contiene la información de Silvia Giménez Rodríguez en las páginas 478 a 481. No hay más detalles proporcionados en el texto dado.
Este documento parece ser una serie de páginas escritas por Silvia Giménez Rodríguez. No hay suficiente contexto para proporcionar más detalles sobre el contenido o tema en 3 oraciones.
Este documento parece ser un trabajo académico que contiene varias páginas escritas por Silvia Giménez Rodríguez. Incluye las páginas 470 a 473 y ofrece opciones para pasar a la página anterior, inicio o siguiente.
Este documento parece ser una serie de páginas escritas por Silvia Giménez Rodríguez. No hay suficiente contexto para determinar el tema o contenido específico.
Este documento parece ser una serie de páginas escritas por Silvia Giménez Rodríguez. No hay información adicional sobre el contenido de las páginas aparte del nombre de la autora y los números de página.
1. Silvia Giménez Rodríguez - 114 -
TASAS DE MORTALIDAD POR GRUPOS DE EDAD, AÑO 2005
Fuente: Mortalidad por VIH/SIDA. Resultados 2005. Instituto de Salud Carlos III de Madrid.
2. Silvia Giménez Rodríguez - 115 -
CAPÍTULO 3 HIPÓTESIS NO VÍRICA DEL SIDA
El 23 de abril de 1984, la Secretaria de Estado de Sanidad y Servicios Sociales de Estados
Unidos, Margaret Heckler anunció en una rueda de prensa junto al investigador Robert Gallo que un virus
era “la causa probable del SIDA” y que en unos meses estaría disponible el test sanguíneo para
detectarlo, así como que en dos años una vacuna estaría lista para ser probada. Gallo y colaboradores
registraron la patente de una prueba de detección de anticuerpos contra el mencionado virus,
precisamente el mismo día de la rueda de prensa. Esta presentación pública, oficial y políticamente
definitiva de un virus como la causa del SIDA, ocurrió antes de que se hubiera publicado un solo estudio
americano sobre el mismo en ninguna revista científica (CONNOR, 1987:49-58). De hecho, hasta 1986
no aparece la denominación actual consensuada de VIH como causa del SIDA.
De acuerdo con este punto de vista, el VIH es un retrovirus que se transmite por vía sexual, y por
exposición en fluidos corporales. Tal y como se ha expuesto en el capítulo anterior, en 1982 los Centros
para el Control de las Enfermedades de Estados Unidos, en Atlanta (CDC) consideraban contagioso al
SIDA porque parecía transmitirse entre los usuarios de drogas inyectadas y entre los homosexuales, a
través del contacto sexual o de sangre contaminada. Entre los agentes infecciosos estaban los
citomegalovirus (CMV) y algunas bacterias. En 1983 Montagnier y sus colaboradores sugirieron el virus
asociado a la linfadenopatía (LAV) y Gallo y sus colaboradores el virus linfocitotrópico de las células T
(HTLV) como causas del SIDA. También fueron propuestas como causas, el Sarcoma de Kaposi y la
neumonía en homosexuales y las drogas psicoactivas, tales como los nitritos afrodisíacos inhalados
(poppers). Se considera que el VIH produce inmunodeficiencia al matar billones de células T, a los 10-11
años como media de la fecha de infección y aparición de los anticuerpos neutralizantes. El VIH es el
primer virus para el cuál se interpreta un resultado positivo en la prueba de anticuerpos como un indicador
de futuras enfermedades primarias, aunque ningún retrovirus se haya demostrado hasta el momento que
sea patógeno para los hombres (Duesberg, 1997:199-1220). Sin embargo, se cree que este retrovirus es
perjudicial entre el 50 y 100% de los casos, más que cualquier otro virus humano. Se considera un
diagnóstico favorable a SIDA siempre que se encuentre VIH asociado a cualquiera de las enfermedades
catalogadas como definitorias del síndrome, incluso sin detección de inmunodeficiencia. A la enfermedad
sin síntomas clínicos se le denomina enfermedad por VIH. Hacia 1986, la mayoría de los virólogos habían
aceptado la hipótesis del VIH como causa del SIDA: “Independientemente de la presencia de otras
3. Silvia Giménez Rodríguez - 116 -
causas de inmunodeficiencia, en presencia de evidencia de laboratorio de VIH, cualquier enfermedad
catalogada… indica un diagnóstico de SIDA”. (CDC, 1987:1143-1154)
Diferentes investigadores desde un principio se han desmarcado de la línea oficial, cuestionando
la citada causa viral de SIDA a través de sus investigaciones cualificadas. Con Peter Duesberg a la
cabeza (descubridor de los oncogenes), Robert Rootbernstein, Roberto Giraldo, Rasnick (investigador de
los inhibidores de la proteasa) y el equipo de Perth en Australia de Papadopulos-Eleopulos y Turner, se
representan las críticas y posibles hipótesis alternativas, tanto en etiología, diagnóstico, y tratamiento. En
estos 25 años desde que se diagnosticara el primer caso, un grupo de científicos intentan hacerse eco en
la literatura científica de su desacuerdo con el origen viral del SIDA. Más de 4.000 firmantes de un
manifiesto para la reevaluación del SIDA entre los que se encuentran tres Premios Nobel de la ciencia,
que niegan que el sida sea causado por un virus y que sea una enfermedad transmisible y ni siquiera
infecciosa. Ellos son: Walter Gilbert, estadounidense de Boston, Premio Nobel de Química en 1980 por la
secuenciación rápida del ADN; Bárbara McClintock, estadounidense de Cold Spring Harbor, Premio Nobel
de Medicina 1983 por el descubrimiento de los genes saltarines; Kary Mullis, estadounidense de San
Diego, Premio Nobel de Química en 1993 por el invento de la tecnología PCR (reacción en cadena de la
polimerasa)
3.1. Etiología
3.1.1. No evidencia empírica del VIH como agente causal del SIDA
Desde 1987, el Catedrático de Biología Molecular y Celular de la Universidad de California,
Berkeley, Peter Duesberg1 viene cuestionando la hipótesis del VIH y el SIDA al constatar que el virus está
1 Estudió química en las universidades de Würzburg, Basilea y Munich, doctorándose finalmente en Fráncfort en
1963. Trabajó en la investigación de virus en el Instituto Max Planck de Tübingen y desde 1973 es profesor en el
Departamento de Biología Molecular y Celular de la Universidad de California en Berkeley. Duesberg aisló el primer
gen carcinogénico (gen del cáncer) de un virus a los 33 años, a los 36 años obtuvo plaza fija (tenure) en la
Universidad de California, Berkeley, y a los 49 años fue invitado a unirse a la Academia Nacional de Ciencias
norteamericana, uno de los más altos honores que puede recibir un científico, por ser un reconocimiento a
distinguidos y continuos logros en la realización de investigación original. Recibió también una asignación de fondos
de siete años como Investigador Extraordinario (Outstanding Investigator Grant) del Instituto Nacional de Salud
norteamericano. Sus controvertidas hipótesis sobre el SIDA causaron una retirada de fondos para la investigación.
4. Silvia Giménez Rodríguez - 117 -
latente y presente durante el SIDA en sólo una de cada 500 células T, al recordar que los retrovirus no se
caracterizan por matar a las células y al no poder explicar por qué el SIDA viral aparece una media de 10
años después de que el virus haya sido neutralizado por los anticuerpos. La comunidad científica oficial
respondió en un principio a estas apreciaciones afirmando que el origen viral del SIDA no se podía
defender en términos de virología ortodoxa basada en propiedades genéticas y bioquímicas conocidas
del VIH. Sin embargo, se insistió en afirmar la evidencia epidemiológica del VIH como causa del SIDA, así
como su futura demostración científica. En 2007 Duesberg sigue poniendo en duda esa presunta
evidencia epidemiológica.
3.1.1.1. Correlaciones entre SIDA y VIH
Los principales investigadores oficiales del SIDA señalan la evidencia epidemiológica entre la
asociación del VIH y SIDA, y en el caso de Gallo, considera que la epidemiología ha sido un escalón de
un buen comienzo (Gallo, 1991). Así pues y en vista de las correlaciones establecidas, la hipótesis oficial
sostiene que las personas infectadas con el VIH desarrollarán SIDA y aquellas no infectadas no lo
desarrollarán, o lo que manifestaba Gallo al respecto: el VIH es condición sine qua non para que se
desarrolle la epidemia. A pesar de esta afirmación Montagnier la matizará con la teoría de los cofactores
necesarios para su desarrollo, teoría vigente en este momento (Maddox,1992:189). No obstante, la
ciencia sabe que correlación no es igual a causalidad, y por ello algunos científicos disidentes aceptan la
tal llamada correlación como un dato insignificativo y sin relevancia, al considerar que tal correlación es
algo forzada. Peter Duesberg (1991:1575-1579; 1993:131-228) ya a principio de los años 90 observaba
diferentes aspectos que le despertaron serias dudas sobre la supuesta correlación entre el VIH y el SIDA,
hasta el punto de pronunciarse por negarla. Algunos de ellos son los siguientes:
Actualmente, Duesberg financia su investigación a partir de contribuciones caritativas y con los beneficios de la
venta de sus libros. Ha recibido los siguientes premios: Premio Merck 1969. Premio Anual de los Científicos de
California 1971. Primer Premio Anual del centro médico Americano en oncología. Premio al Investigador Externo,
institutos nacionales de salud, 1986. Academia Nacional de Ciencias, elegido en 1986. Fogarty Scholar Resident en
el Instituto Nacional de la Salud, Bethesda, MD, 1986-1987. Wissenschatspreis, Hanover, Alemania, 1988. Lichtfield
Lecturer, Oxford, Inglaterra, 1988. C. J. Watson Lecturer, hospital Abbott Northwestern, Mineapolis, 1990. Profesor
distinguido, Universidad Norte de Texas, Denton, Texas, 1992. Schaffer Alumni Lecturer, Universidad de Tulane,
Nueva Orleans, 1992. Constance Ledward Rollins Lecturer, Universidad de New Hampshire, Durham NH, 15 de
diciembre de 1992.
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