Los andróginos eran seres creados por Zeus que tenían ambas naturalezas masculina y femenina. Eran muy poderosos y eficientes, pero se volvieron arrogantes y ambiciosos, creyendo que podían ser iguales a los dioses. Por esto, Zeus mandó a Hefesto partirlos en dos, y luego Poseidón, Hades y otros dioses los atacaron con tormentas y desastres naturales, dejándolos dispersos y desmemoriados. Desde entonces, los humanos descendemos de los andróginos y