Para mantener una buena organización financiera, es importante mantener la contabilidad actualizada y registrada de acuerdo con la ley y costumbres mercantiles. La Superintendencia Financiera vigila que las empresas cumplan con estas disposiciones legales. Los estados financieros proporcionan informes periódicos sobre el estado financiero y desarrollo administrativo de una compañía para la toma de decisiones sobre su futuro.