Este poema de tres oraciones expresa el profundo amor del autor por Carmen. Compara a Carmen con la primavera y las cosas bellas que Dios creó, destacando su frescura, transparencia, belleza y dulzura. El autor desea que Dios proteja a Carmen y le dé a él la llave para estar con ella, pues a pesar del paso del tiempo, su amor por ella no ha disminuido desde que se conocieron.