Este poema habla sobre la importancia de amar a otra persona sin confundirse con ellos, estimarlos sin juzgarlos, e invitarlos sin controlarlos. También enfatiza la necesidad de alejarse sin remordimientos, criticar sin culpar, y ayudar sin menospreciar. El poema concluye que si ambas partes pueden brindarse esto mutuamente, entonces podrán enriquecerse el uno al otro.