El documento describe la ciudad de Barcelona entre 1888 y 1929 como una ciudad vanguardista, urbanita, modernista e industrial. Destaca a artistas como Picasso y Gaudí y lugares emblemáticos como el Museo Picasso, las Ramblas, el barrio gótico y el Parque Güell que representan estas características durante este periodo. También incluye un plano de la ciudad.