Este documento presenta 8 motivos para la oración, incluyendo alabar a Dios, pedir perdón de pecados, orar por el pastor de la iglesia, profundizar el conocimiento de la Biblia, orar por la familia cristiana, pedir provisión económica, alabar a Dios con alegría y orar por el bautismo en el Espíritu Santo.

1. BIENVENIDOS A LA
VIGILIA DE ORACIÓN

2. MOTIVO 1
ALABANZA Y GRATITUD A DIOS.
• Dad gracias en todo, porque esta es la
voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. 1 Tes. 5:18

3. MOTIVO 2
POR EL PERDÓN DE TODO
PECADO Y POR UNA VIDA SANTA
• Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia;
Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones.
Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado. Sal. 51.1-2

4. MOTIVO 3
POR EL PASTOR DE LA IGLESIA.
• Acordaos de vuestros pastores,
que os hablaron la palabra de Dios;
considerad cuál haya sido el resultado
de su conducta, e imitad su fe. Heb. 13:7

5. MOTIVO 4
POR UN CONOCIMIENTO
PROFUNDO DE LA PALABRA DE DIOS.
QUE EL VARÓN CRISTIANO LEA LA BIBLIA.
• ¡oh, cuánto amo yo tu ley!
todo el día es ella mi meditación. Sal. 119:97

6. MOTIVO 5
POR LA FAMILIA DEL VARÓN CRISTIANO.
POR LA INSTRUCCIÓN DE NUESTROS HIJOS,
POR SU CRECIMIENTO ESPIRITUAL Y
POR SUS NECESIDADES.
• Porque yo también fui hijo de mi padre, Delicado y único delante de mi madre.
Y él me enseñaba, y me decía: Retenga tu corazón mis razones,
Guarda mis mandamientos, Y vivirás. Prov. 4:3-4

7. MOTIVO 6
POR UNA ECONOMÍA SANA,
QUE AÚN EN TIEMPOS DIFÍCILES EN LA ECONOMÍA
MUNDIAL LAS FAMILIAS CRISTIANAS SIGAN
EXPERIMENTANDO LA PROVISIÓN DE DIOS.
• Mi Dios, pues,
suplirá todo lo que os falta conforme
a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Fil. 4:19

8. MOTIVO 7
TIEMPO DE ALABANZA Y ADORACIÓN
• Cantad alegres a Dios,
habitantes de toda la tierra.
Servid a Jehová con alegría;
venid ante su presencia con regocijo. Sal. 100:1-2

9. MOTIVO 8
POR EL BAUTISMO CON EL
ESPÍRITU SANTO
• Porque para vosotros es la promesa,
y para vuestros hijos,
y para todos los que están lejos;
para cuantos el Señor nuestro Dios llamare. Hch. 2:39