El documento describe cómo un niño de 10 años murió después de beber Coca-Cola Light y comer mentas. La autopsia reveló que su estómago se inflamó y murió por asfixia. Un profesor explica que la mezcla de ingredientes en la Coca-Cola Light y las mentas genera altos niveles de gases que pueden causar una explosión en el estómago. El documento advierte a los lectores que no mezclen estos productos.