El documento explica que la tradición del anillo de bodas se originó en la antigua Egipto, donde se creía que había un nervio en el cuarto dedo que iba directamente al corazón. Los griegos y romanos pensaban que había una vena llamada "vena del amor" en ese dedo. Aunque no existe tal vena, la tradición se ha mantenido hasta la actualidad. La mano en la que se usa el anillo ha variado a lo largo de la historia y depende de la época y la nacionalidad.