Un circuito paralelo conecta dispositivos eléctricos de manera que todos los dispositivos comparten los mismos terminales de entrada y salida. En un circuito paralelo, la corriente se divide entre los dispositivos conectados y el voltaje es el mismo para todos los dispositivos. Un ejemplo de circuito paralelo es la conexión de cargas eléctricas como bombillas en una vivienda, donde todas comparten la misma fuente de alimentación.