La textura del cabello se refiere al grosor de las hebras individuales y se clasifica como gruesa, media o fina, midiendo el diámetro de la hebra. El cabello grueso tiene el diámetro más ancho y es más fuerte, mientras que el cabello fino es más frágil y susceptible a daños químicos. El cabello de textura media es el más común y no suele presentar problemas.