Colocar clavos requiere herramientas como martillos y clavos, y habilidad para usarlos de forma segura y efectiva. Se deben alinear el clavo con el objeto que se desea fijar y dar golpes firmes pero no excesivos para clavarlo sin doblarlo ni dañar la superficie. Con práctica cualquiera puede aprender esta útil habilidad manual.