La corriente libertadora del sur financió expediciones de Argentina y Chile para lograr la independencia del Perú. San Martín ayudó a conseguir la independencia de Chile y luego invadió el Perú con su ejército de los Andes. A pesar de las negociaciones fallidas, derrotó a los realistas y declaró la independencia del Perú el 28 de julio de 1821, siendo nombrado Protector.