El presidente de Ecuador, Rafael Correa Delgado, firmó el Decreto 1014 en abril de 2008 ordenando que todos los software usados por las administraciones públicas sean de código abierto. Esto se hizo por razones económicas y de soberanía nacional. Además, la decisión coincidió con noticias de que servicios de espionaje estadounidenses estaban infiltrando software privativo, lo que llevó a preocupaciones de que este software podría usarse para espionaje.