Un tribunal de Nueva York declaró inocentes a tres policías acusados de matar a tiros a un hombre negro desarmado de 23 años llamado Sean Bell fuera de un club nocturno tras celebrar su despedida de soltero. Los policías dispararon hasta 50 veces contra Bell y sus dos amigos, alegando que creían que enfrentaban un peligro inminente. El Departamento de Justicia revisará el caso para considerar posibles cargos por violación de los derechos civiles.