El documento ofrece consejos para vivir una vida coherente y con propósito. Recomienda que lo que se piense, sienta y haga debe estar alineado, y que no se debe ser indiferente al sufrimiento de los demás. Además, enfatiza la importancia de aprender a tratar a los demás con respeto, superar el dolor en uno mismo y en la sociedad, y reconocer lo sagrado tanto interna como externamente.