Este documento contrasta las descripciones y etiquetas que se suelen dar a niñas y niños para describir los mismos rasgos de personalidad. Señala que para características como la sensibilidad, la obediencia, la curiosidad y la prudencia se usan términos más positivos para los niños y más negativos para las niñas. Similarmente, rasgos como la insistencia, la desenvoltura y la audacia suelen describirse de forma más positiva en los niños y más negativa en las niñas.