El documento resume los principales tratados de paz después de la Primera Guerra Mundial, incluido el Tratado de Versalles con Alemania, que impuso severas sanciones territoriales, militares y económicas. Los tratados con Austria, Hungría, Bulgaria y el Imperio Otomano también implicaron pérdidas territoriales y reparaciones. Como resultado, los imperios austrohúngaro, otomano y alemán fueron desmembrados, dando lugar a nuevos estados europeos.