El Carnaval de Santa Cruz de Tenerife se remonta al siglo XVIII cuando las familias pudientes celebraban bailes de disfraces en sus casas. Aunque la plebe también festejaba en las calles, las autoridades prohibían estas actividades públicas. Tras la dictadura franquista en 1945, los tinerfeños recuperaron el Carnaval de forma clandestina. En 1980 fue declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional. Las comparsas, murgas y rondallas son las protagonistas de estas fiestas, caracterizadas las murgas