Los colombianos deben asumir más responsabilidad para desarrollar un pensamiento emprendedor en lugar de uno mediocre. También deben trabajar más como grupo en lugar de de manera individualista para lograr mejores resultados, como hacen los extranjeros. Los líderes colombianos deberían invertir más en educación y menos en preparación para la guerra para aprovechar mejor los recursos naturales del país y orientarlo hacia el futuro.