Miguel Ángel fue uno de los más grandes artistas renacentistas que trabajó como arquitecto, escultor y pintor. Es conocido por obras maestras como la Bóveda de la Capilla Sixtina y El Juicio Final, donde representó figuras desnudas con un enfoque en la belleza humana. Aunque se especializó en escultura, también creó pinturas notables bajo el patrocinio del Papa Julio II.