El documento discute cómo la tecnología moderna ha mejorado la calidad de vida y ha impulsado el desarrollo científico y técnico. Sin embargo, también ha generado una dependencia en el consumo de productos tecnológicos y una gran cantidad de desechos electrónicos que contaminan el medio ambiente. A medida que las ventas de dispositivos electrónicos aumentan en América Latina, también lo hace la cantidad de desechos electrónicos, lo que plantea problemas ambientales si no se gestionan adecuadamente.