Dios creó a Adán y Eva. Según la Biblia, Dios formó a Adán del polvo de la tierra y sopló en su nariz aliento de vida, y luego creó a Eva a partir de una costilla de Adán para que no estuviera solo. Dios los puso en el Jardín del Edén y les dio el mandato de multiplicarse y gobernar la tierra.