2. EL ORIGEN DE LA VIDA HUMANA
Hace mil o dos mil millones de años, cuando la tierra estaba todavía caliente, envuelta en espesas nubes de
donde caían sin cesa aguaceros hirvientes, los primeros seres vivientes aparecieron en los mares. Eran seres
minúsculos, como microbios, y que apenas hubieron aparecido, se multiplicaron y se transformaron..
Dios no había creado una colección de seres vivientes destinados a reproducirse siempre idénticos. Dios
estaba creando la Vida, y la Vida se desarrollaba. No era solamente la lucha para sobrevivir la que hacía
desaparecer a los más débiles y permanecer a los mejor armados. No era solamente la casualidad la que hacía
brotar en cada especie seres con caracteres distintos de sus antepasados. En la materia viviente actuaban
fuerzas espirituales, creando en cada especie órganos nuevos, tratando de solucionar de mil maneras
distintos problemas: órganos para ver, oír, sentir, correr, nadar, volar.
3. LA
EVOLUCIÓN
DEL
HOMBRE
Los seres más antiguos en el camino evolutivo son los Driopitecus. El
Driopitecus posee un molar con una forma o patrón encontrado sólo en los
humanos, y no en los monos del antiguo continente, de lo que se deduce que
era un tipo o variedad de mono cuya cabeza al menos ya estaba
evolucionando hacia la forma definitiva de Homo.
4. Capacidad craneana de 500 a 600 centímetros cúbicos. Utilizaba útiles, pero no los elaboraba.
Los Australopitecus eran un grupo variado de homínidos de amplia distribución, que empezaron a extenderse
en África hace unos cinco millones de años. El rápido retroceso de los bosques les abrió nuevos nichos y se
convirtieron en parte importante de la biomasa de los primates; ocupando en forma exclusiva el peldaño superior
de la escala de la evolución.
El Australopitecus evolucionó hacia un predador de cerebro grande, muy apto para cazar solo. Durante este
período se desarrollaron la domesticación del fuego, los utensilios de piedra tallada y las lanzas primitivas, las
cuales eran palos afilados con piedras endurecidos al fuego.
5. HOMO HABILIS
Capacidad craneana de 650 a 750 centímetros cúbicos.
Aparecen los primeros útiles de piedra tallada y viven en grupo.
El Homo Habilis es el primer representante del género Homo
(el nuestro). Tenía una capacidad craneal media de unos 600
centímetros cúbicos y era quizá un poco más pequeño que los
Australopithecus. En comparación con las piernas tenía unos
brazos muy largos, y experimentó una expansión cerebral a la vez
que una reducción del aparato masticador. Sus utensilios eran
simples piedras rotas para obtener un filo con el que poder cortar la
poca carne que consumían, ya que se ha comprobado que era
prácticamente vegetariano.
6. EL HOMO ERCTUS
Capacidad craneana de 1000 centímetros
cúbicos. Perfeccionan los útiles. Conservaba
el fuego e intercambian las primeras palabras.
El Homo Erectus fue el primer homo en
colonizar nuevos espacios. Aprendió a
cubrirse con pieles y a encender fuego. Su
cerebro era grande, de 800 a 900 centímetros
cúbicos
7. HOMO SAPIENS
Capacidad craneana de 1400 a 1450 centímetros cúbicos.
Primeros enterramientos. Usa útiles especializados y sabe
fabricar el fuego.
Eran herbívoros, quizás insectívoros y desde luego en cierta
forma cuadrúpedos, pues para desplazarse por el suelo utilizaban
los pies y los nudillos de las manos. Vivían de forma familiar y sin
establecer relación entre otras especies. Las glaciaciones trajeron
consigo un aumento de temperatura muy fuerte, que fue
eliminando las plantas y árboles, (base de la nutrición del Homo
Sapiens), por esto tuvieron que desplazarse en busca de alimento
a otras zonas. Estas temperaturas deshicieron casi todas las
selvas frondosas, por lo que se vieron obligados a desplazarse a
lugares más largos de los habituales, en los que la postura que
tenían inicialmente les resultaba muy incómoda y dolorosa.
8. ESPECIE HUMANA ACTUAL
Actualmente la especie humana se ha desarrollado en
el terreno de la ciencia en grandes proporciones, hasta
conseguir grandes logros. Nuestras condiciones de vida han
ido progresando hasta conseguir una buena calidad.
Nuestro aspecto físico se caracteriza por una mayor
estatura en relación al peso. La altura media en la especie
humana es de 1.65 aproximadamente. El peso, con sus
excepciones, está entre 60-65 kilogramos. La postura es
totalmente erguida, bípeda y utilizamos en la mayoría de
los casos las manos para cualquier actividad. El pelo está
presente en todo nuestro cuerpo, pero es un carácter
recesivo del cuerpo humano y aparece en poca cantidad, ya
que no es tan necesario para mantener la temperatura
corporal.
9. DESARROLLO HISTÓRICO DE
LA VIDA HUMANA
Hace 30 millones de años, habitaba nuestro planeta un primate del genero Aegyptopithecus, del cual partieron dos líneas
evolutivas, una hacia los gibones, y otra hacia los póngidos y homínidos.
Entre 25 y 15 millones de años atrás, en el Mioceno medio, en Europa, Asia y África habitaron diversas especies de Driopitecus
que fueron posibles antecesores de los póngidos y homínidos.
En Francia se ha encontrado un ejemplar al que se le llamó Driopitecus, de posiblemente 13 millones de años de antigüedad, y
en Palestina, el Sivapithecus, posiblemente relacionado con el antecesor del orangután.
Entre 14 y 8 millones de años, en el Mioceno superior y Plioceno inferior, habitaban el género Ramapithecus en la India, Pakistán y
China; otra forma similar, el Keniapithecus en África. Mientras algunos autores sostienen que el Ramapithecus es un homínido, y por
tanto que la separación de esta familia del tronco común con la de los póngidos, se realizó entre 20 y 15 millones de años atrás, la
mayoría de antropólogos lo consideran un mono antepasado del orangután