En 1938, don Jesús Fuentes tuvo la visión de fundar un circo familiar que se extendiera a través de generaciones. Fundó el Circo de Renato con la intención de que cada uno de sus hijos tuviera su propio circo, convirtiéndose en la cadena de circos más grande del mundo con más de 15 circos. El circo presentaba actos como trapecistas, domadores de animales, motociclistas y bailarinas para entretener al público.