El documento describe la evolución de la inteligencia artificial y las expectativas para su futuro. Señala que los robots ya forman parte de la vida cotidiana y que en décadas pasadas reemplazaron trabajadores en fábricas. Además, analiza las posibles aplicaciones de la inteligencia artificial en computadoras, internet, educación, servicios y medicina. Finalmente, advierte que si bien la IA promete un mundo fantástico, también podría agravar problemas como el desempleo y aumentar las diferencias entre países.
1. La inteligencia artificial
¿Hacia dónde nos lleva?
Introducción
En 1921, el escritor checo Karel Capek introdujo el término robot, el cual ya
no se considera sinónimo de androides metálicos. Más bien, los robots ya han
comenzado a ser parte de nuestra vida cotidiana, y se espera que lo sean cada
vez más.
En el siglo XX, la construcción de robots es un intento del ser humano por
reproducir el antiguo mito de la creación. El sueño del ser humano es poseer
robots verdaderamente útiles, que sea posible interactuar con ellos de modo
natural y sean compañeros cercanos. Y ya han habido algunos logros. En los años
ochenta los robots dejaron de ser ficción cuando brazos gigantes que se movían
obedeciendo un programa predeterminado, desplazaron a los obreros de las
fábricas automotrices de Japón.
Otro logro es la creación en Estados Unidos de un modelo capaz de
caminar, captar el movimiento de una pelota en el aire y cacharla con su mano
mecánica. Sin embargo, además de ser muy costoso, para ejecutar este
movimiento sencillo debe conectarse a varias computadoras que trabajan a su
máxima capacidad. La realidad es que la producción de robots es complicada y
cara. No obstante, se espera que un día la producción en masa haga a los robots
baratos y que sus cerebros electrónicos tengan algún grado de inteligencia.
Desarrollo
La Inteligencia Artificial (IA), se puede definir como el medio por el cual las
computadoras, los robots y otros dispositivos realizan tareas que normalmente
requieren de la inteligencia humana. Agrupa un conjunto de técnicas que,
mediante circuitos electrónicos y programas, busca imitar procedimientos similares
a los procesos inductivos y deductivos del cerebro humano. Su intención es copiar
electrónicamente el funcionamiento del cerebro, basándose en la investigación de
las redes neuronales humanas.
Existen muchas expectativas para el futuro, en relación a la aplicación de
las técnicas de IA. Algunas son las siguientes:
En el campo de las computadoras personales, se espera que en poco
tiempo la velocidad del procesador sea enorme y con una memoria inagotable. Se
encenderán tan solo con decir: “Actívate”. Quizá ya no se necesiten los monitores,
en su lugar se utilizarán unos anteojos inalámbricos de realidad virtual. En vez de
2. teclados, bastará con imaginar las palabras para plasmarlas en la memoria de la
computadora. En lugar de usar ratón, podremos manipular el objeto con el
movimiento de nuestros ojos, que será detectado por un inofensivo rayo láser.
La red Internet nos permitirá cargar inmensas cantidades de información en
décimas de segundo. Incluso podremos acceder a cualquier programa de
televisión o radio que se transmita en cualquier parte del mundo, con una
traducción impecable, y guardarlo en la memoria para acceder a él en cualquier
momento. En el caso de los estudiantes, tendrán cada vez más clases virtuales y
se comunicarán con sus maestros sólo para resolver dudas o exámenes.
Asimismo, se espera que los robos desplacen al personal que atiende
detrás de las ventanillas, También, serán comunes los edificios “inteligentes”. Esto
implica que al llegar a casa, la puerta se abrirá con el sonido de nuestra voz.
Sensores controlarán el encendido y apagado de las luces, ahorrando electricidad.
La temperatura será controlada por la computadora central. Los aparatos
electrodomésticos serán activados verbalmente. La alarma se activará ante la más
mínima insinuación de peligro, dando aviso a los cuerpos de seguridad.
En el caso de una guerra global, los pilotos controlarían por realidad virtual
los aviones sin arriesgarse, por lo que se le llamaría “The Robot War”. Por otro
lado, en el campo de la medicina, es muy probable que en pocos años robots
cirujanos realicen complejas intervenciones utilizando el instrumental quirúrgico
con la precisión de una impresora.
Otra expectativa es que los robots biológicos autorreplicantes poblarán en
nuestro nombre otros sistemas solares hasta hacerlos habitables para nuestra
especie.
Conclusión
De acuerdo a lo analizado, parece que la inteligencia artificial promete un
mundo fantástico. Sin embargo, si realmente así será, eso está por verse. Aunque
no sabemos a ciencia cierta cuál será el futuro de la humanidad, indudablemente
cambiarán las relaciones de producción y quizá de comunicación. Algunas
posibles consecuencias son: que se agravará más el problema del desempleo;
que se transformarán radicalmente los conceptos de ocio y tiempo libre; que
cambiarán las relaciones laborales y que se agudizarán más las diferencias entre
los países desarrollados tecnológicamente y los dependientes. Además, es casi
seguro que la inteligencia artificial y el desarrollo tecnológico subsecuente estarán
al servicio de una minoría.
3. Reflexión
Este tema me resulto particularmente interesante, debido a que vivimos en
un mundo donde las máquinas tienen gran impacto y ya controlan parte de nuestra
vida. De hecho, es un tema común en películas, revistas, etc. Sin embargo,
todavía se espera que la inteligencia artificial logre muchas más cosas, como se
analizó en la lectura. Para empezar a escribir este tema, partí de algunos logros
que el ser humano ha tenido en la creación de robots desde hace bastante tiempo.