Víctor y Malena toman el último tren hacia Carbón. A medida que pasan las horas, la mayoría de los pasajeros descienden en diferentes paradas, dejándolos solos. El tren parece no avanzar y se detiene repentinamente, descarrilándose e impactando contra un árbol. Al inspeccionar al conductor fallecido, Víctor y Malena se fusionan para hacer funcionar el tren de nuevo.

1. La última parada
Víctor y Malena toman el último tren a Carbón. Él es serio y
cerrado, así que no tiene mucho que compartir con ella que es lo
opuesto a él. Después de unas horas de viaje, fueron bajando la
mayoría de los pasajeros en distintas paradas. Ellos se quedaron
dormidos soñando que llegaban a su destinado lugar, al despertar
notan que no han avanzado, seguían en el mismo lugar, así que
Víctor y Malena se las arreglaron para no dormirse jugando a las
cartas ya que no sabían por qué permanecían siempre allí. El tren
se detuvo y bajaron los pasajeros restantes menos ellos. Al
terminar de bajar la última persona, el tren avanza unos kilómetros
y de repente se descarrila de las vías hasta chocar contra un roble.
La luz se apaga y el motor deja de funcionar.
Como por arte de magia todo vuelve a prenderse y los chicos
quedaron estupefactos por lo ocurrido, deciden ir a la cabina del
conductor para verificar si sobrevivió. Al llegar los dos dicen: ¡Conductor! ¿Está usted bien?- al tocar el hombro del conductor
su cuerpo se desmorona completamente.
Desesperadamente Víctor y Malena intentaron mover el tren y
hacer que caiga en bajada a la calle. En cuanto ambos tocaron los
controles del tren, él y ella se hicieron uno y automáticamente el
tren vuelve a estar en las vías con un nuevo conductor.