Dos niñas curiosas e inteligentes que vivían con su viudo padre decidieron poner a prueba a un sabio al que visitaban con una mariposa azul escondida en sus manos, preguntándole si estaba viva o muerta para atraparlo en una respuesta equivocada. Sin embargo, el sabio respondió sabiamente que el destino de la mariposa dependía de las niñas ya que estaba en sus manos, enseñándoles que somos responsables de nuestras propias vidas y decisiones.
¿Realmente hablamos con nuestros hijos, con nuestros alumnos, de todo aquello que conllevaría la lucha por conseguir aquello que les viene negado?
Un mundo mejor, en paz, un mundo donde convivan de la mano las culturas y las religiones... Un mundo donde la Carta de la Declaración de lo Derechos Humanos llegue a todos los buzones, donde los que más tenemos sintamos que podemos y debemos ayudar a los más necesitados... Un mundo sostenible, donde la naturaleza pueda volver a sobrevivir sin depender del "hombre". Un mundo...
Y, ¿qué piensan nuestros hijos, nuestros alumnos? ¿Les hablamos alguna vez? ¿Encaramos nunca esos temas con ellos con una mínimo de profundidad? ¿Quizás con alguna continuidad?
Nos preocupamos mucho, lo sé, por construir su futuro académico, profesional... Y, ¿que pasa con su educación humanística?
¿Realmente hablamos con nuestros hijos, con nuestros alumnos, de todo aquello que conllevaría la lucha por conseguir aquello que les viene negado?
Un mundo mejor, en paz, un mundo donde convivan de la mano las culturas y las religiones... Un mundo donde la Carta de la Declaración de lo Derechos Humanos llegue a todos los buzones, donde los que más tenemos sintamos que podemos y debemos ayudar a los más necesitados... Un mundo sostenible, donde la naturaleza pueda volver a sobrevivir sin depender del "hombre". Un mundo...
Y, ¿qué piensan nuestros hijos, nuestros alumnos? ¿Les hablamos alguna vez? ¿Encaramos nunca esos temas con ellos con una mínimo de profundidad? ¿Quizás con alguna continuidad?
Nos preocupamos mucho, lo sé, por construir su futuro académico, profesional... Y, ¿que pasa con su educación humanística?
Gaceta Educativa por la Democracia Social N° 8. 22 de junio de 2015, publicación del Centro de
Documentación y Monitoreo de la Educación. Venezolana Jose Luis Salomón. Secretarías
de educación y Políticas Públicas. Consejo Editorial: Robert Rodríguez, José Luis Farías, Ysrrael Camero, María de la Paz Silva, Eulogio Figuera y Nancy Acevedo. Edición: Luis Bravo Jáuregui
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«¡Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura!» (Marcos 16:15)
2. Había un viudo que
vivía con sus dos hijas
curiosas e inteligentes.
Las niñas siempre
hacían muchas
preguntas. A algunas
de ellas, él sabía
responder, a otras no. .
Como pretendía
ofrecerles la mejor
educación, mandó las
niñas de vacaciones con
un sabio que vivía en lo
alto de una colina.
3. El sabio siempre
respondía a todas las
preguntas sin ni siquiera
dudar.
Impacientes con el
sabio, las niñas
decidieron inventar una
pregunta que él no
sabría responder.
Entonces, una de ellas
apareció con una linda
mariposa azul que
usaría para engañar al
sabio.
4. “¿Qué vas a hacer?” –
preguntó la hermana .
“Voy a esconder la
mariposa en mis manos y
preguntarle al sabio si está
viva o muerta”
“Si él dijese que está
muerta, abriré mis manos
y la dejaré volar. Si dice
que está viva, la apretaré y
la aplastaré.
Y así, cualquiera que sea
su respuesta, ¡será una
respuesta equivocada!”
5. Las dos niñas fueron
entonces al encuentro
del sabio, que estaba
meditando.
- “Tengo aquí una mariposa
azul. Dígame, sabio, ¿está
viva o muerta?”
Muy calmadamente el
sabio sonrió y
respondió:
“Depende de ti... Ella está
en tus manos.”
6. Así es nuestra vida, nuestro
presente y nuestro futuro.
No debemos culpar a nadie
cuando algo falle: somos
nosotros los responsables por
aquello que conquistamos
(o no conquistamos).
Nuestra vida está en
nuestras manos, como la
mariposa azul... Nos toca
a nosotros escoger qué
hacer con ella.
Autor desconocido