Un hombre consultó a una bruja porque no le gustaba que su pene midiera 50 cm. La bruja le dijo que podía preguntarle a una rana si quería casarse con él, y si la rana decía que no, su pene disminuiría 10 cm, pero si decía que sí, crecería 10 cm. El hombre fue al bosque y le preguntó tres veces a la rana, y cada vez que la rana dijo que no, su pene disminuyó 10 cm más, hasta medir solo 20 cm. La moraleja es nunca jugar con la paciencia de los demás.
2. Un día, un hombre, al que no le
gustaba su pene porque medía 50
cm, demasiado largo para su gusto
y para el de muchas mujeres,
decidió consultar a una bruja para
que le ayudara en su problema.
3. La hechicera, después de pensarlo
mucho, dijo:
- "Vete al bosque. Allí conocerás a una
rana que está en el lago. Pregúntale si
quiere casarse contigo. Si contesta
“no”, tu mejor parte disminuirá 10 cm,
pero si te dice “si”, crecerá 10 cm!!.
4. El hombre se pone en marcha. Llega al
bosque, se encuentra a la rana y le
pregunta …
-Oye rana!... quieres casarte conmigo?
La rana le responde: "NO"
El hombre, muy contento, vuelve a casa
a medírselo: 40 cm.
5. Pero como no está satisfecho, decide
volver al bosque:
-Eh, rana! .. ¿quieres casarte conmigo?
Otra vez la rana le responde, ya algo
impaciente : ¡NO!...
El hombre, muy contento, vuelve a
casa, y por supuesto se lo mide otra vez:
ahora 30 cm!.
6. Se dice a si mismo que lo mejor sería
si midiera 20 cms…
De nuevo se dirige hacia el bosque y
muy seguro de sí mismo pregunta:
-¡Eh, rana! ¿quieres casarte conmigo?
La rana, que estaba harta de tanta
insistencia, le dice:
7. -¿Estás sordo o qué?... Te lo he
dicho ya varias veces…
NO, NO y NO!!!