Las nuevas tecnologías de la información han generado cambios en la forma en que nos comunicamos y dependen de aparatos electrónicos, haciéndolos más indispensables. Han globalizado el mundo y proporcionado herramientas para lograr objetivos de desarrollo. También afectan a los humanos al aumentar nuestra dependencia de la tecnología y dejarnos vulnerables durante los cortes de energía, e impactan especialmente a los jóvenes que nacen con la tecnología y se vuelven rápidamente autodependientes de ella.