La leyenda griega de Perseo trata sobre un joven que inicialmente actuó con temor en una batalla, pero finalmente logró más de lo esperado al salvar la vida de su madre. La leyenda refleja que lo divino siempre está presente y enseña que pocos jóvenes son conscientes de la necesidad de obrar espiritualmente aunque se den cuenta de mejorar las cosas.