3. Las leyes espirituales.
• La “Ley de la Generosidad” Dios, desde
el principio de la creación lo demostró
proveyendo para el hombre todo lo que
necesitaba.
• La generosidad divina no depende de
las personas, sino de la naturaleza
divina.
4. Las leyes espirituales.
Le dio dignidad personal Gen
1:26.
Le dio un lugar donde vivir
Gen 2:8.
Le dio la provisión cotidiana
Gen 1:9.
Le dio un trabajo Gen 2:15.
Le dio una ayuda idónea Gen
2:18.
La generosidad de
Dios con Adán:
5. Dios, Dios dador de todo bien.
Todo lo que el hombre
necesita para vivir en
armonía con Dios,
consigo mismo y con el
prójimo fueron dadas por
Dios.
6. Las leyes espirituales.
• Dios, en su generosidad, se reservó
una estricta prohibición: No comer del
fruto del árbol Gen 2:16.
• Dios se reservó este derecho para el
bien del hombre 2 Sam 22:31.
8. Las leyes espirituales.
• Dios determinó que el hombre manifestará
la generosidad de manera genuina.
• El cuidado del necesitado Isa 32:8; Det 15:7-
11.
• De modo especial a quienes no pueden
retribuir Exo 22:22-24.
9. Las leyes espirituales.
Dios determinó que
el hombre entregara
de lo le es dado.
Ofrendas.
Diezmos.
Ofrendas especiales.
10. La acción satánica.
•Con la introducción del
pecado, el hombre
comenzó a querer lo que
desea y no lo que necesita.
11. La acción satánica.
• Que el hombre dependiera de cualquier
otro que no sea de Dios Gen 3:1-5.
• Dar a Dios con la actitud incorrecta Gen
4:3-7.
• Tener más de lo que Dios da Gen 4:19.
12. Dios, Dios dador de todo bien.
A pesar del pecado, en el hombre esta la
marca divina del dar Gen 4:3-5.
Caín ofreció del
producto de su
trabajo.
Abel ofreció lo
mejor que tenía.
13. La acción satánica.
• Como efecto de la naturaleza
marcada por el pecado, el
hombre desarrollo la avaricia
como estilo de vida.
14. Las leyes espirituales.
• Al nacer de nuevo, la naturaleza original del
hombre es restaurada 1 Jn 3:1.
• ¿Qué que dar a Dios?. Dios ha dicho que le
demos una parte de lo que nos ha dado,
dándonos la libertad de usar el resto de
acuerdo a Sus pautas.
15. Las leyes espirituales.
• El dar, que es parte de nuestra nueva
naturaleza, ésta determinada por nuestra
voluntad 2 Cor 9:7.
• Las ofrendas son determinadas por la
generosidad que hemos aprendido.
• ¿Obligatorio? Como el dar es la respuesta
de la voluntad, no se obliga a quien no
desea.
16. Las leyes espirituales.
El dar trae recompensas
a quien da 2 Cor 9:8-11.
Recompensas
personales.
Recompensas
generacionales.
Notas del editor
Gen 2:24-25 DHH 24 Por eso el hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como una sola persona. 25 Tanto el hombre como su mujer estaban desnudos, pero ninguno de los dos sentía vergüenza de estar así.
Gen 2:24-25 DHH 24 Por eso el hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como una sola persona. 25 Tanto el hombre como su mujer estaban desnudos, pero ninguno de los dos sentía vergüenza de estar así.
Gen 1:28; DHH y les dio su bendición: «Tengan muchos, muchos hijos; llenen el mundo y gobiérnenlo; dominen a los peces y a las aves, y a todos los animales que se arrastran
Gen 2:16-17 DHH le dio esta orden: «Puedes comer del fruto de todos los árboles del jardín, 17 menos del árbol del bien y del mal. No comas del fruto de ese árbol, porque si lo comes, ciertamente morirás
Gen 2:16-17 DHH le dio esta orden: «Puedes comer del fruto de todos los árboles del jardín, 17 menos del árbol del bien y del mal. No comas del fruto de ese árbol, porque si lo comes, ciertamente morirás.
2 Sam 22:31 DHH El camino de Dios es perfecto; la promesa del Señor es digna de confianza. ¡Dios protege a todos los que en él confían!
Gen 2:24-25 DHH 24 Por eso el hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como una sola persona. 25 Tanto el hombre como su mujer estaban desnudos, pero ninguno de los dos sentía vergüenza de estar así.
Isa 32:8 RV60 Pero el generoso pensará generosidades, y por generosidades será exaltado.
Det 15:7-11 DHH »Si hay algún pobre entre tus compatriotas en alguna de las ciudades del país que el Señor tu Dios te da, no seas inhumano ni le niegues tu ayuda a tu compatriota necesitado;8 al contrario, sé generoso con él y préstale lo que necesite. 9 No des lugar en tu mente a este malvado pensamiento: “Ya está cerca el año séptimo, el año en que se perdonan las deudas”, y entonces pongas mala cara a tu compatriota que se halla en la pobreza, y no le prestes nada; porque él clamará contra ti al Señor, y tal acción se te contará como pecado. 10 Debes ayudarlo siempre y sin que te pese, porque por esta acción el Señor tu Dios te bendecirá en todo lo que hagas y emprendas.11 Nunca dejará de haber necesitados en la tierra, y por eso yo te mando que seas generoso con aquellos compatriotas tuyos que sufran pobreza y miseria en tu país
Exo 22.22-24 DHH No maltrates a las viudas ni a los huérfanos, 23 (22) porque si los maltratas y ellos me piden ayuda, yo iré en su ayuda, 24 (23) y con gran furia, a golpe de espada, les quitaré a ustedes la vida. Entonces quienes se quedarán viudas y huérfanos serán las mujeres y los hijos de ustedes
Esto es resultado del egoísmo, que es resultado del pecado.
Gen 3:1-5 DHH Entre los animales salvajes que Dios creó, no había otro más astuto que la serpiente. Un día, la serpiente le dijo a la mujer: —¿Así que Dios les dijo que no comieran de ningún árbol del jardín? 2 La mujer le contestó: —¡Sí podemos comer de cualquier árbol del jardín! 3 Lo que Dios nos dijo fue: “En medio del jardín hay un árbol, que no deben ni tocarlo. Tampoco vayan a comer de su fruto, pues si lo hacen morirán”. Pero la serpiente insistió: 4 —Eso es mentira. No morirán. 5 Dios bien sabe que, cuando ustedes coman del fruto de ese árbol, serán iguales a Dios y podrán conocer el bien y el mal.
Gen 4:3-7 DHH Pasó el tiempo, y un día Caín llevó al Señor una ofrenda del producto de su cosecha. 4 También Abel llevó al Señor las primeras y mejores crías de sus ovejas. El Señor miró con agrado a Abel y a su ofrenda,5 pero no miró así a Caín ni a su ofrenda, por lo que Caín se enojó muchísimo y puso muy mala cara. 6 Entonces el Señor le dijo: «¿Por qué te enojas y pones tan mala cara? 7 Si hicieras lo bueno, podrías levantar la cara; pero como no lo haces, el pecado está esperando el momento de dominarte. Sin embargo, tú puedes dominarlo a él
Gen 4:19 DHH Lámec tuvo dos esposas: una de ellas se llamaba Adá, y la otra se llamaba Silá.
Gen 4:3-5 DHH Pasó el tiempo, y un día Caín llevó al Señor una ofrenda del producto de su cosecha. 4 También Abel llevó al Señor las primeras y mejores crías de sus ovejas. El Señor miró con agrado a Abel y a su ofrenda, 5 pero no miró así a Caín ni a su ofrenda, por lo que Caín se enojó muchísimo y puso muy mala cara
Gen 2:24-25 DHH 24 Por eso el hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como una sola persona. 25 Tanto el hombre como su mujer estaban desnudos, pero ninguno de los dos sentía vergüenza de estar así.
1 Jn 3:1 DHH Miren cuánto nos ama Dios el Padre, que se nos puede llamar hijos de Dios, y lo somos. Por eso, los que son del mundo no nos conocen, pues no han conocido a Dios.
2 Cor 9:7 DHH Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, y no de mala gana o a la fuerza, porque Dios ama al que da con alegría.
2 Cor 9:8-11 DHH Dios puede darles a ustedes con abundancia toda clase de bendiciones, para que tengan siempre todo lo necesario y además les sobre para ayudar en toda clase de buenas obras. 9 La Escritura dice: «Ha dado abundantemente a los pobres, y su generosidad permanece para siempre.» 10 Dios, que da la semilla que se siembra y el alimento que se come, les dará a ustedes todo lo necesario para su siembra, y la hará crecer, y hará que la generosidad de ustedes produzca una gran cosecha. 11 Así tendrán ustedes toda clase de riquezas y podrán dar generosamente.