El documento describe un proyecto de arte comunitario en el que Alejandro Nájera llevó a cabo talleres de pintura con niños en el pueblo de Las Margaritas durante 7 meses. Aunque los adultos al principio no apoyaron la idea, la personalidad cálida de Alejandro ganó su confianza y cultivó amistades. Los niños progresaron desde dibujos individuales hasta crear un mural colectivo de 2x2 metros, del que quedaron sorprendidos por lo que lograron juntos. El mural es descrito como un