Este documento lista varias actividades familiares y religiosas que fortalecen a las familias y los preparan para la vida eterna, incluyendo oración diaria, estudio de las Escrituras, comidas familiares, noche de hogar los lunes, asistencia regular a la iglesia y al templo, y vivir de acuerdo a los mandamientos y convenios del templo. También enfatiza la importancia de mantener una perspectiva eterna al hacer las listas de tareas diarias y enfocarse en aquellas cosas que realmente importan espiritualmente