La persona describe a su madre Adriana como una mujer maravillosa que le brinda su apoyo incondicional y valiosas enseñanzas sobre los valores, aunque a veces discutan. A pesar de las dificultades, ella siempre está ahí para corregirlo y hacerlo entender lo correcto, demostrándole que uno debe alcanzar sus sueños sin importar las circunstancias. La admira como una mujer luchadora y trabajadora que, a través de sus sacrificios, ha obtenido grandes éxitos y sigue adelante sin dejarse vencer