La sociedad post-industrial se caracteriza por sistemas de relaciones controladas y cambios programados que responden a necesidades y actitudes dominadas por organizaciones político-económicas. Los pensadores John Galbraith y Alan Touraine han contribuido al entendimiento de esta sociedad, en la cual los conocimientos se manifiestan a través de la creación y alineación de pensamientos aplicados a la producción, aunque todavía falta reconocer plenamente el capital humano de los trabajadores.