La retroexcavadora se utiliza habitualmente para realizar excavaciones en terrenos, como la preparación de cimientos y la apertura de zanjas para tuberías. Funciona hundiendo una cuchara en el suelo para arrancar y depositar materiales en su interior. Puede montarse sobre cadenas o neumáticos, y en este último caso incluye gatos hidráulicos para fijarla al terreno. A diferencia de una excavadora frontal, una retroexcavadora excava de arriba hacia abajo.