El documento describe cómo la pandemia ha afectado la salud y el bienestar de las mascotas debido a los cambios en sus rutinas y estilos de vida. Muchos veterinarios han visto una disminución en las consultas, aunque siguen ofreciendo servicios esenciales. Algunas mascotas han desarrollado problemas de piel, digestivos y comportamientos compulsivos debido al aislamiento. Además, se resaltan historias de dueños que han enfrentado dificultades para cuidar la salud de sus mascotas durante esta crisis.

1. Mascotas: La salud no puede
esperar
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• Con la pandemia, la vida de todos se transformó, incluso la de nuestras mascotas, los cambios drásticos
en sus rutinas han afectado su salud
L
as mascotas son más que animales de compañía,
muchas personas llegan a considerar a su
perro o gato parte de su familia. Representan
distintas cosas para cada persona, pero durante las
crisis su presencia ha sido mucho más fuerte, no sólo
porque las tenemos todo el día acompañándonos,
igualmente podemos sentir cómo nos cuidan, cuánto
les importamos y sin duda entender que el vínculo
con ellas es irrompible.
El nuevo ritmo de vida adoptado por la
pandemianosobligóacambiarnuestrarutinaypor
ende la de nuestros animalitos, todo esto con el fin
de prevenir contagios. Además de afectar a las
personas, también alteró el comportamiento y la
salud de nuestros queridos amigos.
En México gran parte de los establecimientos comerciales
cerraron como medida de prevención ante el COVID-19, a excepción de
algunos lugares considerados de primera necesidad, como clínicas y consultorios
veterinarios. Los médicos veterinarios percibieron una baja en sus consultas y
ventas, por esto modificaron las condiciones al ofrecer sus servicios. El cuidado de las
mascotas no es algo que podamos dejar en manos de recomendaciones de Internet.
Un boletín informativo de petSellout elaborado por VetEvidence para
el mes de abril de 2020, cuyo objetivo es mostrar el impacto de la crisis
sanitariaenelsectordemedicamentosdeanimalesdecompañía;laventadeestos
productos ha caído un 12% con respecto al mismo mes del año anterior.
Por Melissa Saldaña José

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De acuerdo con la Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales
(WSAVA , por sus siglas en inglés), parte de las visitas a los consultorios médicos se
han dado para verificar que las mascotas no tengan el nuevo coronavirus.
“Mis servicios como médico veterinario disminuyeron un poco por las reglas de
distanciamiento social. Hago visitas a domicilio únicamente en casos de emergencia
o que sean especies de gran tamaño como vacas, caballos o puercos”.
Sergio Hurtado Suárez, médico veterinario y zootecnista quien labora en
Veterinaria Doggato , ubicado en Cuautla, Morelos. Para quien lleva a sus mascotas
pide como requisito que únicamente vaya el dueño de la mascota, pues el local es
pequeño y así se evita la aglomeración de personas en el mismo espacio.
Jaraeth Hernández Fernández actualmente trabaja en Farmacia Veterinaria “La
Vaca Pinta” ubicado en Tetela de Ocampo, Puebla, es también otro de los médicos
que asegura percibir una baja en sus actividades del consultorio desde que llegó la
pandemia.
En “La Vaca Pinta” para atender a las mascotas, el propietario o cuidador del
animal se le toma la temperatura, se aplica gel antibacterial, el uso del cubrebocas es
obligatorio para poder ingresar y se brinde el servicio.
EL AISLAMIENTO ENFERMA
Un perro que solía pasear con su amo, constantemente jugaba a la pelota y corría
grandes distancias a partir de la pandemia su espacio se redujo a cuatro tristes muros.
La falta de estimulación, la alimentación desbalanceada y todo lo que implica estar
en casa, desarrolló en las mascotas comportamientos compulsivos. Estar más horas
aislados y ofrecer más compañía al animal se puede estar convirtiendo en el origen de
este estrés.
“He notado que las personas se volvieron más atentas con sus lomitos, le prestan
atención al comportamiento. Gracias a ello podemos encontrar signos de algunas
enfermedades. Sin embargo, la hipocondría también se hace presente” afirmó
Valeria Marmolejo Batres, estudiante de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la
FES Cuautitlán, trabaja en Medical Vet ubicada plaza Centella, Tultepec y
Esteriliza Mascota situada en la colonia Luis Donaldo Colosio, sobre Av.
De las Torres, Ecatepec.

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Al trabajar en dos establecimientos comentó que los motivos por los cuales han
asistido más al veterinario durante esta cuarentena son principalmente problemas de
piel y digestivos. Debido a la situación actual se complican las visitas a domicilio. Todo
está muy restringido y exclusivamente en casos de emergencia se presta este servicio.
Un problema que cada vez se incrementa más es que los dueños tratan a las
mascotas como si fueran personas, sin embargo, no se dan cuenta que afectan el
comportamiento volviéndose “berrinchudos” y dañando su salud modificando su
alimentación.
Valeria dijo “Deben evitar esto a toda costa, pues,
nosotros al adoptarlo adquirimos responsabilidades que
conlleva su cuidado y el poder brindarles una vida
digna.”
Con respecto a los felinos, Marmolejo afirmó que
algunos de los síntomas que están experimentando por
el confinamiento son problemas en la piel por excesivo
acicalamiento, dificultades gastrointestinales por
consumir comida humana. Conductas repetitivas como
recorrer el mismo trayecto o compulsivas como jadeos y
perseguir constantemente la cola.
“El alimento de perro y gato está balanceado con lo que ellos necesitan (me
refiero a marcas premium) con cantidades fuentes de proteína y ácidos grasos
adecuados. Si les damos comida que nosotros consumimos desbalanceamos la porción
causando obesidad, diabetes etc. Además, al dar cosas con picante, alimentos
tóxicos que quizá para humanos no es tan grave a un perro o un gato lo puede hasta
matar”. Es lo que recomienda la estudiante Valeria Marmolejo Batres. Las mascotas son
compañeros, amigos, incluso familia, pero no humanos pequeños.
MOMENTOS DIFÍCILES, DECISIONES DIFÍCILES
Kelly, es una gata siamesa de 12 años, una minina muy fuerte para la edad que
tiene que ama mucho a su cuidador. En estos tiempos de aislamiento, el miedo
invadió a su dueña Patricia cuando comenzó a notar que los años le
empezaron a cobrar factura.

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“Yo tenía 10 años cuando le pedí a mis papás una
mascota, siempre le he tenido miedo a los perros así
que esa no era una opción, en cambio, los gatos me
parecen lo más tierno del mundo”. Patricia recuerda
mientras acaricia a la pequeña Kelly.
“Imagina el amor que siento por ella, la criamos
como una niña. He vivido desde mi infancia, mi
adolescencia y ahora un poco de mi vida adulta a su
lado. De los 25 gatos que hay en mi casa, Kelly es
la consentida, con ella empezamos lo que nosotros
llamamos ‘nuestra colección’.”
El hermano de Patricia estudia la carrera de
veterinaria en Cuautitlán, él se encarga de las
revisiones aunque están conscientes de
que no es ningún profesional, pero con la pandemia y la escasa
producción de trabajo a veces es difícil alimentar a todos los gatos y tenerles el
cuidado médico correspondiente. Ellos saben que no pueden solventar una situación
de emergencia.
Un diente chueco ya vencido por la edad le impedía comer y le estaba
causando una infección de la que no se había percatado. La visita al
veterinario era más que necesaria si no quería verla sufrir. Kelly empezaba a tirar
saliva e intentaba meter su patita en su hocico para disminuir la molestia, sin tener un
resultado favorable.
“La llevé con su doctor de toda la vida, afortunadamente se encuentra cerca de
mi casa la clínica porque no cuento con una transportadora. No había de otra, así que,
la metí en una mochila envuelta con una toalla para que no se escapara en el
camino. Con todo el miedo de que se escapara de mis manos me fui muy temprano al
consultorio.”
Con un cubrebocas de tela desgastado, unos guantes quirúrgicos y una buena
dosis de gel antibacterial, Patricia llegó con Kelly en sus brazos al veterinario. Un
momento crucial fue cuando el médico preguntó la edad de la pequeña
siamesa ya que sus 12 años le jugaban en contra ante los pronósticos de
salud.

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Por supuesto, siempre hay un riesgo con la
anestesia. Sin duda, las condiciones específicas
(los traumatismos, las enfermedades, la edad y las
infecciones) pueden aumentar los riesgos.
El veterinario dijo que había una probabilidad
de un 70/30, comentó que no dejaría que se quedara
en la plancha. “La abracé con todas mis fuerzas.
Me empezaron a temblar los brazos y no sabía
qué hacer”. ─Unas lágrimas aparecieron mientras
relataba ese duro momento.
“El doctor me pidió bajarla para checar
su pulso y pudiera tomar la decisión”.
Paty se arriesgó y dijo que sí al procedimiento.
Hoy su gatita está en su casa, con sus otros 24 compañeros. La falta de
dinero y la situación por la pandemia pusieron en peligro la vida de su felina,
pues al tener pocos ingresos y tantas mascotas que cuidar es difícil afrontar
situaciones como lo es un diente infectado.
Otra historia es la de Tara quien era apenas una cachorrita de 4 meses, la cual fue
abandonada, lidiando con la crueldad de la vida en la calle. Indefensa del mundo
exterior sus días ya estaban contados, pues enfermedades como anemia, hipotermia,
neumonía, caquexia y hasta las pulgas terminarían con sus fuerzas de la pequeña.
Afortunadamente su vida cambió cuando la mamá de Noemí decidió cambiar el
destino de Tara.
En su visita al veterinario accedió de emergencia al consultorio. Una doctora
amable y joven proveniente de la UNAM se encargó de atenderla lo antes posible. Para
continuar con la revisión sobre el estado de salud fue necesario agendar más visitas.
Los días posteriores a la consulta fueron difíciles, Noemí comenta que no sabían
si en realidad se podría salvar. “La situación era muy grave, pasabamos noches en vela
por cuidar que no pasara frío y que no se agravara su salud”.

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“La pequeña Tara me veía con nostalgia
y usaba sus últimas fuerzas para aferrarse a esta
nueva oportunidad, no podía evitar llorar pues
el amor que un animal nos brinda sobrepasa los
límites de la comprensión humana y de la vida
misma. Me destrozaba completamente verla mal y no
poder hacer más para ayudarla”.
Al día de hoy Tara es afortunada porque encontró una familia que
le brinda todos los cuidados y el amor que necesita. Noemí considera que las mascotas
son terapéuticas. El encierro nos hace sentir solos y aislados muchas veces no sabemos
qué hacer, pero su simple compañía, su calor, sus demostraciones de afecto nos hacen
sentir mejor. Ellos saben cuando estamos mal y nos
consuelan.
México se ubica entre los primeros lugares en
maltrato animal a nivel mundial, el cual se refleja en
distintas acciones, sobre todo en animales de compañía
comosonlosperros.Elranking,destacaelmaltratofísico,
sexual, peleas clandestinas y abandono, por mencionar
algunas.
Las cifras de abandono son alarmantes. De
acuerdo con cifras del INEGI, 70 por ciento de las
mascotas en el país, sobre todo perritos, son
abandonadas.Yeso no es todo. Organizaciones en defensa de los
derechos de los animales, reportan que 60 mil animales mueren al año en México
como consecuencia de la crueldad animal.
Esta es la historia de Max un boxer de 8 años. Su dueño Sebastian decidió
contratar a una persona para que bañara a sus perros a domicilio, esto por el
confinamiento. Max es muy delicado de la piel y del pelaje dato que los responsables
de bañarlo no tomaron en cuenta y optaron por quitar todo el pelo que se le caía. Lo
anterior le ocasionó un hongo por lo que Sebatian decidió llevarlo al veterinario.
El dueño comentó que el doctor era muy buena persona, pese a que
se tiene que hacer una fila interminable, pero vale la pena el trato que le
ofrecen a las mascotas y el servicio es excelente.

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Para tratar el hongo de Max el doctor recetó una
pomada, la cual fue gratis, pues no les cobró nada más que la
consulta. Después de la primera visita se llamó al consultorio
para hacer cita previa cada domingo y ver el avance en el
tratamiento.
La cuarentena unió más a Sebastian y a sus perros;
pues la universidad lo tenía alejado de ellos, ahora
que está todo el día en casa entiende porqué eran tan
hiperactivos y traviesos, al pasar tanto tiempo solos
extrañaban la compañía de su amo.
Hoy sus cachorros son felices y muy tranquilos, han
subido un poco de peso, además un gatito es el
nuevo compañero de la familia, se acoplaron muy bien,
comparten su cama a la hora de dormir. Estar con ellos le da
paz y bienestar emocional. Las mascotas son beneficiosas
en general.
Llevar a las mascotas a revisión es importante tomando
las medidas adecuadas al salir de casa y de camino a la
clínica, nos mantiene seguros aún cuando el semáforo
COVID está en naranja o rojo. Los médicos veterinarios
siguen siendo personal de salud, dentro y fuera de los centros
de atención médica, asegura Valeria que siguen todas las medidas sanitarias necesarias
para cuidarse y cuidar a los animalitos.
LAS MASCOTAS SON LA MEJOR MEDICINA
Numerosos estudios demuestran cómo las mascotas influyen de manera positiva
en la salud y en el bienestar humanos.
Recientemente, se han realizado investigaciones para determinar si la tenencia
de gatos y perros puede influir sobre el desarrollo de enfermedades alérgicas como el
asma, la atopía y rinitis alérgica. Los autores de Meer et al y Hesselmar et al
concluyeron que tener un perro o gato como mascota durante los primeros
años de vida es un factor protector contra las enfermedades alérgicas ya
mencionadas.

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Los expertos en la materia determinan que una exposición a temprana edad es
hasta los 6 años, y la protección adquirida dura a través de toda la adultez,
independiente de la presencia de un perro o un gato en esta etapa de vida.
El vínculo entre las personas y los animales es sujeto de diversas investigaciones
en las cuales señalan los atributos de esta relación sobre la salud mental.
Las mascotas ayudan a disminuir las alteraciones psicológicas, reducen la
sensación de soledad e incrementan el sentimiento de intimidad, conduciendo a
la búsqueda de la conservación de la vida en personas enfermas.
En estados de depresión, estrés, duelo y aislamiento social, los animales se
convierten en un acompañamiento incondicional, aumentando la autoestima y el sentido
de responsabilidad, que necesariamente genera una mejor integración social.
Los animales de compañía permiten que se desarrolle el sentimiento de apego
en los niños.Además de ser un compañero de juegos para los más pequeños, crecer con
una mascota es una oportunidad de enseñanza, responsabilidad y respeto para los seres
vivos.
Durante tiempos tan difíciles y un
panorama que aún resulta impredecible, saber
quealguienestaráahíconnosotrossinimportar
lo que pase es un verdadero aliciente. Todo
puede ser incierto, pero algo que no cambiará
es el amor y la lealtad de nuestras mascotas.
Los animales domésticos nos necesitan
tanto como nosotros a ellos, por ese
motivo, la Procuraduría Ambiental y del
Ordenamiento Territorial (PAOT), el
gremio de médicos veterinarios, diversas
instituciones públicas y líderes de opinión
en materia de bienestar animal lanzaron la campaña #BienestarAnimalCDMX con la
que difunden los servicios que prestan y concientizan a la población sobre la
importancia de atender a los animales de compañía durante esta
contingencia.

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La campaña cuenta con una plataforma en internet, donde los prestadores de
servicio pueden registrarse y así dar a conocer sus servicios. En la página de internet
de la PAOT se puede acceder al micrositio de la campaña.
Buscan apoyar el consumo en consultorios, clínicas y hospitales veterinarios de
la Ciudad de México durante la emergencia sanitaria por Covid-19. Mariana Boy, la
procuradora ambiental, hizo un llamado a todos los dueños de mascotas, para que no
se abandone a los animales de compañía en ninguna circunstancia.
Asimismo, se les siga proporcionando la atención médica veterinaria,
alimentación y cuidados que requieren, en los diversos consultorios, clínicas u
hospitales veterinarios de esta ciudad, expresó en su cuenta de Twitter .
No abandones a tus animales, son familia y a la familia no se le abandona.
Claramente, lo único que las mascotas transmiten es lealtad, seguridad y amor.