Este documento presenta una alegoría sobre las prioridades en la vida a través de una demostración realizada por un profesor. El profesor llena un frasco con pelotas de golf, canicas y arena para representar las cosas importantes, menos importantes y pequeñas en la vida. Explica que si se pone primero la arena, no habrá espacio para lo que realmente importa. Al final, añade café al frasco para mostrar que siempre hay lugar para pasar tiempo con los amigos a pesar de lo ajetreada que pueda parecer la vida.